Ask me to stay (Elipsismo) - KTH&JJK - Completa

Epílogo

"Desde la creación del universo y más allá, a través de los siglos infinitos y más allá.
En la vida anterior y en la siguiente tal vez también.
Estamos eternamente juntos".

—Bangtan Boys.

6 años después.

La vida de Jeon Jungkook fue un huracán categoría seis, amenazando con destruir todo a su paso.

Después de tres años de recibir ayuda psicológica, Jungkook puede decir que vive una vida relativamente diferente a la de hace unos años.

Poco a poco, con ayuda de sus amigos, pudo recolectar cada una de sus partes y pegarlas a sí mismo.

No fue fácil, nadie le dijo que iba a ser fácil cuando comenzó el proceso. Hubo momentos donde se levantaba después de tener pesadillas y solo deseaba abandonar todo.

Pero pensaba en Jimin. Pensaba en Hoseok. Pensaba en Yoongi. Pensaba en Taehyung. Pensaba en todo lo que habían hecho por él.

En como secaron cada una de sus lagrimas y lo obligaron a salir del caparazón. Y tal vez no todo fue color de rosa, nada en la vida de Jungkook asemejaba a ese matiz, pero lo intentó.

Lucha contra sus más profundos miedos.
Aún se encuentra buscando nuevas partes en el camino. Las cicatrices de las heridas siguen ahí, el morado fantasma de sus costillas lo persigue a todos lados, años de traumas no desaparecen por que sí. Quedan las secuelas, los ataques nerviosos cuando está fuera del aula, listo para comenzar una nueva clase con sus alumnos.

Las pesadillas que acechan sus horas de sueño cuando no tiene un buen día. Pero Jungkook no se rinde, y de eso se trata.

Cuando cae el atardecer, Jungkook se encuentra en el apartamento de Yoongi y Jimin, que celebraran con sus cercanos la víspera de año nuevo.

Y Jungkook está nostálgico y sus estomago se siente pesado al recordar que un día como este tenía planeado dejarse ir.

Recuerda la agonía dentro de su ser, el dolor y la culpa que se desbordaba. No quiere volver ahí.

Su vida es mejor, él es mejor. Después de hablar con sus padres, por recomendación de su psicólogo; pasaron muchas cosas.
Su padre siguió siendo el mismo hombre que deseaba no tener un hijo torcido y despreciable, pero después del divorcio desapareció en alguna parte del mundo. Su madre se disculpó. Jungkook recordaba el maquillaje corrido en las tardes donde era torturado, entonces intenta darle el perdón. Pero no por completo, las marcas de los golpes se sentían frescas sobre su piel, las palabras dichas rondaban en un bucle sobre su cabeza.

Perdonar es difícil.

Perdonarse lo fue aún más.

Después de pensarlo seriamente y hablarlo con Yoongi, Jungkook decide cambiar a la especialidad de música.

Jimin, Yoongi y Hoseok siguen siendo ellos mismos y su rara relación. Al final, sólo ellos se entendían.

El amor tenía muchas formas.

Y Taehyung, tan brillante, se convierte en la luciérnaga que guía a Jungkook durante la oscuridad de Jungkook. Se vuelve mugre debajo de sus uñas y se cuela en toda su piel para no soltarlo jamás. Jamás se alejó, jamás dejo de amarlo.

Jungkook se sentía bien cerca de él. Jungkook amaba a Kim Taehyung, sin miedo y de cerca.

Después de años intentando entenderse, Jungkook decidió darle una oportunidad no hace más de catorce meses. Taehyung esperó pacientemente, jamás se fue.

"¡Jimin!" Jimin grita desde el otro lado de la sala junto a Yoongi y Hoseok, borrachos "Ven aquí, ya va a comenzar el conteo."

Jungkook se levanta del mueble, la alegría del ambiente es contagiosa y hace que se sienta como en casa.

Taehyung, Jimin, Hoseok y Yoongi son su hogar.

Jungkook abre las palmas de sus manos y ya no las cierra.

Las aprecia, aprecia las heridas invisibles que hay en ellas. La luz neón que emana ya no es tan opaca, es tenue, pero diferente a lo que fue antes. Jungkook ya no ve fealdad en ellas.
Jungkook ya no se odia tanto. Jungkook quiere tomarlo y nunca soltarlo.

Jungkook no necesita ver su reloj para saber que ya son las doce, el ruido de la sala anuncia todo.

Jungkook voltea y toma el rostro de Taehyung, la persona a quien amó y ama, y le planta un dulce beso, suave, de sentimientos, que es correspondido con el mismo amor y cariño.

"Feliz Año Nuevo, Kim Taehyung." susurra a centímetros de sus labios.

"Feliz Año Nuevo, Jeon Jungkook."

Y quizás en algún momento desee tirar todo a la basura, pero Jungkook está seguro de que jamás se arrepentirá de haber conocido a las personas que pudieron ayudarlo y jamás dejarlo ir.

El epílogo no iba a existir, honestamente, fue planeado porque sentí que necesitaba una conclusión firme.
With luv, CM