Ask me to stay (Elipsismo) - KTH&JJK - Completa

24: Amor revolver

"El amor puede con todo, me dijo. ¿Hablas de capacidad o destrucción?, pensé."

"Amor revolver"
—Loreto Sesmo.

Unos días antes de que Jungkook se vea obligado a regresar a Busan, Taehyung sugiere que vayan a un bar, al que Jungkook inmediatamente dice que no.
Su tolerancia es horrible y no le va bien con las multitudes, además ni siquiera ha estado en un bar antes, pero Taehyung insiste en que vaya y no aceptará un no como respuesta.

Por supuesto, Jungkook cede porque nunca puede decir no al otro chico.

El bar no es tan horrible como pensaba que sería. Es sábado, pero no está abrumadoramente lleno, y una vez que Jungkook supera el nerviosismo y Taehyung le da algo afrutado para beber, se encuentra soltándose por una vez.
No hay ansiedad sentada en la parte posterior de su garganta. Jungkook, que odia este tipo de cosas, en realidad se lo está pasando bien.

Tal vez Taehyung lo esté cambiando, dándole más valor. O tal vez no haya cambiado en absoluto.

Jungkook se sorprende al encontrarse en su tercer vaso de cualquier cóctel de frutas que Taehyung sigue pidiendo, perplejo de cómo aún no se ha desmayado.

Cuantos más bebidas bajen, más delicado y pegajoso será Taehyung.

En su cuarto mueve el taburete tan cerca de Jungkook que sus piernas están atrapadas entre las de Taehyung. Se ríe y juega con la manga de la camiseta de Jungkook. Jungkook no puede pensar, así que mira fijamente las largas pestañas de Taehyung.

Bonito.

Cuando se excusa para ir al baño y se pone de pie, es cuando el alcohol lo golpea y Jungkook se balancea precariamente sobre sus pies. Ahí es también cuando Taehyung decide que tienen suficiente y una vez que Jungkook se recupera se van.

Tropiezan por la calle. La luna cuelga sobre ellos, y Taehyung se ríe dulcemente como un canto de pájaros.
Jungkook, demasiado borracho de tres bebidas afrutadas y tres tragos de vodka, también se ríe.

No está exactamente seguro de lo que es tan gracioso, pero se ríen tanto que las casas encienden sus luces y Taehyung lo silencia, pero ambos siguen riendo y es perfecto.

Demasiado perfecto.

Taehyung es lluvia en los tejados, alguien que siempre se deslizará entre sus dedos y se evaporará, pero Jungkook nunca ha sido capaz de soltar lo intangible.

Si se besaran, ¿se derretirían juntos?

Él quiere saberlo.

Quiere saber porque su océano está desbordado. Si, deja huellas en la arena y Jungkook ha estado anhelando un fantasma durante demasiados años.

Alguien abre su ventana para gritar y Taehyung, en su estupor borracho, le devuelve el grito. Camina hacia atrás y los voltea, y todo el tiempo Jungkook se ríe y trata de tirarlo.

"Vamos antes de meternos en problemas."

Taehyung lo mira con ojos salvajes, sonríe. "Sí, vamos."

Y antes de que Jungkook se dé cuenta, es él quien está siendo arrastrado mientras Taehyung se agarra a su muñeca y despega en un salto.

Él no sabe por qué están corriendo.
No hay nadie persiguiéndolos y no tienen ninguna razón para hacerlo, pero lo hacen de todos modos. Corren por callejón tras callejón y todo el tiempo se ríen.

¿Es esto lo que es ser libre? Jungkook siente el viento a través de su cabello.

Sus pies golpeando fuertemente asfalto sacuden sus huesos. Él no sabe a dónde van, pero no necesita hacerlo. Por Taehyung, iría a cualquier parte.