Parte 3: La gran guerra y el 4° Hakuryuukou

249 33 1
                                    

Después de la muerte de mi amada no supe que hacer, estaba perdido, el significado de mi vida, mi razón de ser se había ido y no sabia si la volvería a ver. Todo se había vuelto monótono e increíblemente aburrido, realmente no tenia ninguna clase de propósito en el mundo. Durante esos 40 años lo único relevante que hice fue matar al hakuryuukou, otra vez. Si, todo un récord según Draig, nunca en la historia hubo un sekiryuutei que derrotara a 3 emperadores blancos en su vida. Por lo general un humano normal no vivía tanto, pero henos aquí. El caso es que durante eso años pase lamentándome por la muerte de mi esposa y además me empezaba a ganar la incertidumbre de cuando carajo iba a morir, de cualquier forma. Hubo un punto en el que pensé en quitarme la vida pero sabia que no la podría ver a los ojos si la iba a ver por el camino fácil. Además, Draig me convenció de no hacerlo y no sabia si era inmune al daño letal, pero después de decidir no quitarme mi propia vida decidí n probarlo, no soy tan estúpido como para suicidarme accidentalmente, me convertiría en el hazme reír de las siguientes generaciones de sekiryuuteis. ''El sekiryuutei que se mato probando su propia mortalidad'' vaya titulo seria ese.

Durante todos esos años en los que volví a ser un nómada me decidí a que quería conocer un poco mas del mundo, así que me dirigí hacia uno de los pueblos mas cercanos al mar y me apunte como marinero de una de las embarcaciones que estaban amarradas. Durante en el que estuve trabajando en el puerto fui a un par de viejez cortos con el resto de la tripulación en los cuales fue descubriendo un poco mas de mis capacidades regenerativas (si hasta ese momento me había puestos a intentar desentrañar el misterio). Parece ser que cuando nací a la Boosted Gear se le genero un fisura por la que escapo un poco de poder de Draig y esto parece que no me volvió dragón pero al mi cuerpo acostumbrarse a esta aura extraña aprendió a aprovecharla. O esa es la conclusión que tuve yo con Draig en ese momento.

Después de unos cuantos viajes me decidí a ir mas lejos y me aliste esta ves para ser tripulante de un barco mercante el cual parecía ser de un extranjero.

Esta decisión me llevaría a descubrir nuevas culturas y lugares. Incluso llegue a detectar mas seres del mundo sobrenatural. Esto me ayudo a ir conociendo mas del mundo en el que ya llevaba tiempo metido. Debido a esto puede darme cuenta del poder que tenían todos estos seres y me di cuenta del peligro que suponían no solo para mi mismo, si no el peligro que suponían para la raza humana. Un demonio de clase media tenia el poder para eliminar a miles de humanos sin el mas mínimo esfuerzo. Eso hablando de las habilidades físicas, en el caso de contar las mágicas la diferencia era abismal. Sin embargo me deje de preocupar por los demonios y otras razas ya que para eso existían los ángeles. Seres de luz los cuales se dedicaban, dentro de otras cosas, a la protección de la humanidad y gracias a esto pase muchos años sin preocuparme por los humanos ya que pese a ciertos conflictos bélicos que hubo entre ellos, ninguno había tomado una enorme cantidad de vidas por lo que los considere seres relativamente pacíficos, y mantuve mi confianza hacia ellos. Esto fue así hasta que desembarque en un lugar que le llamaban Londres. Era un lugar francamente caótico y muy concurrido. Sin embargo me pareció interesante, nunca había visto un poblado tan lleno de gente y tan grande.

El caso es que después de estar un tiempo ahí me di cuenta de que esta nación se llamaba Gran Bretaña, la unión entre Inglaterra, Escocia, Irlanda y Gales. La bandera de este ultimo me sorprendió ya que tenia un dragón escarlata en ella.

Issei: Mira Draig, ese dragón es bastante parecido a ti.

Draig: Si la verdad, y bastante.

Issei: Alguna idea de porque?

Draig: Tengo un vago recuerdo de una vez que peleé contra uno de los reyes dragones en esta tierra,  Yu-Long, probablemente algunas personas de este reino malentendieron la situación y creyeron que los estaba protegiendo y tal vez por eso es que mi imagen esta en su bandera.

Issei: El InvencibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora