Una nueva vida

Ocho

—Me parece bien ¿tú qué opinas de mi amor? —le pregunto Devin con una sonrisa cálida.
—Es perfecto —respondió Da Vinci tomado la pata de su amado.
—Bueno amigo, nos puedes traer el platillo por favor —Devin le pidió amablemente el platillo antes mencionado.
—Muy bien, en unos minutos se los traigo —dijo el mesero apuntando la orden.
Los dos se veían muy felices, Mientras tanto el Akita los veía desde la distancia y pensaba. ,«que hermosa pareja no se donde los he visto pero se que se ven tierno». Era el pensamiento de Johan.
—¿Johan?¿qué estás viendo? —preguntó otro empleado.
—¿Eh? Estoy viendo a esos dos dálmatas que están juntos se ven muy felices —respondió Johan viendo con una sonrisa a la pareja.
—Bueno no te distraigas mucho con ellas.
—No lo haré.
Johan sigue haciendo su trabajo, mientras que Devin y Da Vinci vieron     que era noche de Karaoke, Devin incitó a Da Vinci a cantar.

Devin estaba sorprendido de ver como Da Vinci cantaba.
—¡Wow! Da Vinci no sabía que podías cantar tan hermoso —dijo Devin sorprendido.
—Jejeje gracias Devin, pero es tu turno para cantar —dijo Da Vinci con una sonrisa traviesa.

Da Vinci Estaba completamente sonrojada al oír cantar a Devin, todos le llamó la atención como Devin le dedicaba la canción a Da Vinci, Devin al terminar de cantar tomó a Da Vinci para darle un beso, algo que sorprendió a la dálmata artista.
—Vaya, ¿No sabía que podías cantar? —preguntó Da Vinci a Devin con una sonrisa
—Ya muchas cosas que no sabes de mí —respondió Devin con una sonrisa.
—Bueno mi dálmata espero saber todo lo que eres —dijo Da Vinci para lamer la mejilla de Devin.
Devin se sorprendió por lo que había hecho Da Vinci, Devin reaccionó para así volver con su amada a su mesa, Johan llegó con el plato de espaguetis para los. Sin embargo, se quedó a conversar con ellos, ya que no tenía nada que hacer por más raro que pareciera no tenía nada que hacer.
—Bueno chicos espero que les guste el platillo de Hoy —dijo Johan con una sonrisa maliciosa.
—Gracias Johan —agradecieron los enamorados.
Johan se retiró de la mesa para vigilarlos desde lejos pero este estaba pensando en lo que le había puesto a la cena de los dos dálmatas «Bien Esas pastillas de addyi que moli en todo su plato de espagueti» era el plan que tenía el Akita,
Los dos dálmatas siguieron comiendo los espaguetis, sin notar lo que le había puesto su supuesto mesero. Una vez terminado de comer, los dos dálmatas le pidieron la cuenta para irse del restaurante.
—Johan sé lo que hiciste a esos dos dálmatas —dijo el compañero de Johan.
—Solo estoy haciendo una travesura para mi amigo en superhéroe —dijo Johan con una sonrisa.
Devin y Da Vinci fueron a su casa solo que los dos iban muy animado los dos entraron a la casa para ir directamente a la habitación de Devin, el macho sabía que las habitaciones estaban hechas a prueba de ruidos, esto hizo que nadie se diera cuanta de que Devin y Da Vinci tuvieron un momento especial para cualquier pareja de casados, Devin si tenía planeado hacer estas cosas solo, pero tenía que casarse amando a su esposa. Pero la vida tenía otros planes para Devin o mejor dicho Johan tenía otros planes. A la mañana siguiente Dyllan y Donny vieron que no estaba Devin en la cocina.
—¿Has visto a Devin? —se preguntaron entre ellos.
—No —se respondieron confundidos.
En la habitación de Devin estaba aún dormido, el sol comenzaba a salir para entrar por la ventana de la habitación de Devin, Devin junto a Da Vinci comenzaron a despertar. Da Vinci estaba abrazada de Devin, cuando de pronto.
—¡Ah…! —gritaron los dos al verse.
—Lo siento Da Vinci no quería tomarte como mi hembra —dijo Devin sonrojado por ver a Da Vinci.
—No te preocupes se que no sabemos qué fue lo que nos pasó —dijo Da Vinci.
—Pero yo quería que fueras mi esposa —dijo Devin para taparse la boca.
—¡Hay Devin! —dijo Da Vinci tiernamente con una sonrisa para contestar—. Claro que sí quiero ser tu esposa.
—Pero no tengo anillo para ti —dijo Devin con tristeza.
—Eso no me es necesario —dijo Da Vinci con una sonrisa.
—¡Esto lo tiene que saber toda la familia! —gritó Devin feliz de la respuesta de Da Vinci.
Los dos bajaron felices, tanta era su felicidad que bajaron corriendo por las escaleras.
—Bueno buenos días dormilones —dijeron todos los dálmatas.
—¡Les tenemos una noticia! —gritaron los dos de la alegría.
—Bueno diga nos —dijo Donny.
—Quiero pedir la pata de Da Vinci —dijo Devin feliz.
—¿No creen que ven muy rápido? —cuestionó Dyllan al oír la noticia.
—Bueno aun así quiero pedir la pata de Da Vinci —dijo Devin nervioso para pensar con felicidad—. «Gracias the bad dog por hacerme la vida más feliz».
Devin conocía la verdadera identidad de su némesis más leal a él, quién era Johan Akita alias the bad dog, pero solo por esta vez estaba feliz de que una de sus travesuras funcionara. En otro lugar cierta doberman ya tenía todo listo para un secuestro, que no tardaría en realizarse.
—Donny Dunne tu seras mio y de nadie mas jajaja —eran las risas de Devora quien estaba perdiendo la cordura.
Volviendo con la familia dálmata, todos estaban desayunando ya que estaba empezando otro día para ellos. Devin se levanta para llamar la atención de la familia dálmata.
—Bueno familia dálmata, como saben yo y Da Vinci somos novios, pero quiero que sea mi esposa, por lo tanto… —Devin es interrumpido.
—Su pata es toda suya —respondió Doug pero este tenía un pensamiento—. «Al fin se nos va la solterona».
—Gracias Doug o mejor dicho suegro —dijo Devin con una sonrisa.
—Bueno, ¿quién quiere ir al festival? —preguntó Donny a los cachorros.
—¡Si! —era el grito de todos los cachorros felices.
Todos salieron de la casa con rumbo al festival de la primavera, cada cachorro se divertía ya con algún juego de la feria o actuaciones del mismo festival.
—Bueno al final la casa se quedó sola, ¿Quieres ir a la feria? —preguntó Devin a su amada.
—Bosteza—. No aun tengo sueño ya que aun tengo sueño —dijo Da Vinci con cansancio.
—Bosteza—. Yo también tengo sueño mejor vamos a dormir —dijo Devin casi cerrando los ojos.
Da Vinci se lo lleva a dormir a la sala para que pudieran descansar,  una cosa era segura Devin era más ligero que una almohada. En el festival Devora vigilaba de Donny de cerca solo necesitaba que Donny dejará a Dyllan, Donny quería darle una regaló a su esposa por lo tanto fue a uno de los juegos, Devora aprovecho esto para seguirlo y con un sedante le dispara a Donny, paso un rato y Dyllan estaba preocupada por su marido que desapareció sin decir nada.
—¿Cómo es posible que Donny haya desaparecido? —preguntó Delilah confundida.
—No se mamá, Donny dijo que ya volvía —respondió Dyllan preocupada.
—Bueno hay que dividirnos para encontrarlo —dijo Doug preocupado por su hijo.
—Bueno, ya saben que hacer —dijo Delilah confiando en que lo encontraron.
Pero Devora ya estaba muy lejos con Donny quien aún estaba inconsciente.
—Al fin tango al dálmata que quiero jajajaja —dijo Devora con una risa malvada.
En las calles de Nueva York Dyllan buscaba a su amado, quien desapareció sin dejar rastro, Esto se le hizo raro al oficial de policía, es decir el jefe de Donny.
—Es imposible que los dos de mis cadetes hayan desaparecido sin dejar rastro, esto no encaja —dijo el oficial analizando lo que pasó.
—Señor, Devora siempre estaba detrás de Donny —dijo el compañero de los dos desaparecidos.
—Solo espero que Devora no tenga nada que ver esta vez, porque si ella fue será despedida por esto y a su vez un examen psicológico se le tendrá que hacer —dijo el oficial al escuchar el testimonio de uno de los cadetes.
Todos seguían con la búsqueda de Donny quien no estaba en Nueva York, Devora estaba en un tren con rumbo a canadá para estar con Donny quien no estaría en despertar solo  que gracias a Dawkins Donny tenía una trampa en su collar que le permitía tomar la apariencia de Dolly pero para esto tenía que estar despierto. Devin aun dormido sabía que algo no estaba bien del todo.