Lucía 29

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-Cariño, no hay necesidad de que te exaltes de esa forma, aquí te trataremos muy bien-Dice Owen con una sonrisa maliciosa, la mujer a su lado parece una estatua, la misma imagen que vi la última vez, pero esta tiene algo, se ve distinta...

Se ve rota, además de lucir un vestuario demasiado elegante

Es la señora.

-Hiciste un buen trabajo hijo...-Owen coloca su mano en el hombro de Sebastián

- ¿Hijo? -Pregunto consternada, él rueda los ojos

-No te das cuenta del parecido niña tonta-Dice mirándolo como si fuera su creación más preciada

-Alessia llévala a su habitación-me mira-aquí hay suficiente vigilancia, difieres lo demás o te lo explico.

La chica camina directamente hacia mí, yo solo corro hacia la salida y con cada paso siento mis pies arder y como me toman de los dos brazos.

-Suéltame maldita sea-Grito con todas mis fuerzas

-¡Te odio, esto jamás te lo perdonaré, confié en ti maldito!-Lloro y grito con todas mis fuerzas.

Los hombres que me tienen sujeta no dicen nada, y puedo ver entre mis lágrimas como Owen se adentra con Sebastián no dándole importancia al asunto, delante de mí veo como nos adentramos a la maldita cada y Alessia camina con clase hacia donde será "mi nueva habitación".

- ¿Tú eres la madre de Gabriel? -Ella no habla, parece un robot.

-Cuando daño te ha hecho ese hombre-digo removiéndome, estos gorilas ni se inmutan, solo logro que ese se intensifique, al punto de doler.

-El suficiente, pero no te preocupes no pasarás por lo mismo que yo, no intentes nada, mejor guarda energías, niña- Dice con voz neutra, me empujan hacia una habitación y me encierran en ella.

Guarda energías.

Que mierda.

-Déjame salir de aquí maldición-Golpeo y golpeo hasta que mis palmas duelen

No quiero estar aquí.

Ya amaneció y no he dormido, ni comido nada y me siento muy débil, todo es silencio y esta habitación parece una cárcel, además intuyo que, estuvo habitada por otra persona, en las paredes hay una especie de rasguños, pero no son notorios, si no se acercan a ellos.

Será posible que Alessia estuviera aquí.

He revisado hasta en el rincón más oculto, pero no hay nada, solo una cama pequeña, una mesa de noche a cada lado, un closet y una puerta que me lleva a un baño muy pequeño. La pared del lado de la cama tiene un gran ventanal que da vista a una extravagante piscina, no sé cuándo tiempo me quedo mirando la dichosa vista, lo que si sé, es que mi pierna arde por un dardo que está incrustado y yo simplemente no sé qué sucede conmigo.

Despierto algo conmocionada, mirando todo a mi alrededor, estoy en el piso, y siento como mi cabeza da vueltas, al punto de vomitar

-Qué asco-Digo mirando el suelo y mi bata manchada.

Como puedo camino hasta la salida, pero me detengo abruptamente, la puerta está a medio cerrar y lo primero que veo son charcos de sangre, y un cuerpo sin vida al lado de la puerta

-No, no, no, esto no es real-Niego mirando la escena, siento como un líquido caliente recorre mis piernas

Tengo miedo, mis piernas tiemblan

¿Quién hizo esto?

Camino rápidamente por el pasillo y el mismo panorama me espera

Dios, esto no puede ser.

Veo una puerta abierta y desde afuera puedo ver a Sebastián con sangre en su ropa, Alessia en una esquina llorando a mares y a Owen...

Muerto...

- ¿Qué hiciste? -Chillo

Mis pasos no se detienen y me dirijo hacia Alessia, ella es mucho más alta que yo, pero eso no me impide ir a su lado.

- ¿Qué te hizo?, ¿Qué le hiciste traidor? -Digo mirándolo fríamente.

-Nada que no disfrutara, y no tengo por qué sentirme culpable pequeña-Dice antes de salir por la puerta.

- ¡MALDITO!-Grito tanto que me quedo sin voz.

-Debemos irnos de aquí-Me dirijo a ella y veo como esta no deja de ver el cadáver de Owen.

Su propio hijo lo mato, esto es irreal.

-Alessia nos tenemos que ir-Ella me mira, pero solo veo sus lágrimas correr

Como puedo la arrastro, estoy tan débil y mareada que no sé cómo estoy corriendo a la vez que la llevo conmigo.

La miro y observo como tiene la mirada perdida hacia un ventanal enorme

-Nos tenemos que ir, vamos, vamos-Ella hace que me detenga tomando mi brazo y llevándome hacia un auto que no había visto.

Ella  se sube del lado del copiloto, las llaves estaban aquí y mis manos tiemblan al tomar el volante.

Ella se queja bajito, y veo como sus manos cubren una herida, su rostro está pálido y solo en este instante puedo ver su vestuario, su peinado ya no está, en lugar de eso, esta su cabello todo enredado, su maquillaje corrido, su vestido roto, y solo tiene unos de sus tacones.

-Mierda-Mascullo y piso el acelerador para ir más rápido por esta carretera sin un alma

-Tienes que resistir por Gabriel y Felipe-Digo dándole una mirada de reojo.

Segundos después solo escucho sus sollozos

Solo espero no llegar demasiado tarde 


Hola, hola, estamos aquí de nuevo con un capitulo nuevo, debo confesar que es el penúltimo, para culminar esta historia que ha sido un reto.

En el capitulo del día de hoy nos encontramos con Alessia ¿Qué les pareció?

¿Se esperaban la traición de Sebastián? los leo 

nos veremos en una próxima actualización.

Bye,Bye 

Abrazos virtuales

Al final todo regresa. (Saga Italiana #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora