La leyenda de la Gardevoir, Hanako!

¿Quién eres tu?

El Gallade aún no podía dar crédito a sus ojos, a lo que veía, su hija había evolucionado pero a la vez no, su hermosa figura blanca era algo confusa, no se parecía a su hermana Millie pero era más adulta que una Ralts. ¿Una evolución? La cabeza de Gallade tenía tantas preguntas pero solo podía asombrarse.

-¿Que te parece papá? ¿Verdad que estoy bonita?- La pequeña semi Kirlia da una vuelta alegre orgullosa de su nueva forma
-Hanako... ¡Te vez hermosa hijita!-.

Gallade sin dudar la toma en brazos y carga abrazandola- Evolucionaste, no puedo sentirme más orgulloso, te vez tan, bueno no se cómo decirlo, sabía que un pequeño campamento con tu padre te vendría bien-.
Gallade no podía ocultar su alegría mientras carga a Hanako en brazos, el rostro de la pequeña semi Kirlia era notorio de orgullo.

-Muy bien, ahora vamos alla- Hanako se baja de los brazos de su padre e intenta hacer levitar como puede, aún así apenas podía mover unas hojas.
-No hay manera, no puede ser, aún así- Todo ese orgullo desapareció en un segundo al ver la debilidad que poseía, su padre sin dudar le acaricia la cabeza.
-No tenemos que pensar mucho en eso Hanako, deberíamos volver, tu madre seguro se alegrará de verte así-

Hanako suelta una pequeña sonrisa mientras asiente, aunque aún sentía el dolor de su debilidad era algo que no podía consumirla frente a su padre

El tiempo pasa, van caminando por dónde vinieron, Gallade preguntaba de vez en cuando a su hija por preocupación de cómo se sentía o si sentía algo diferente a cuando era una Ralts, las respuestas de Hanako dejan más tranquilos a su padre al menos por un tiempo hasta llegar a su hogar

-Uff me preocupa como reaccionara tu madre, pero es lo mejor, iré por el gran maestro para saber de esto- Gallade deja con cuidado a su hija- Cariño, volvimos- El sonido de su esposo alerta a Gardevoir y está abre de inmediato, sus palabras se cortan de inmediato al ver a su hija con su hija con la curiosa apariencia, con un pelo poco común en su especie y su vestido más corto, la Gardevoir se queda sin palabras un momento para después abrazar de inmediato a su hija
-Mi niña... Te vez tan hermosa- Hanako sorprendida corresponde con gusto dejando una tranquila sonrisa
-Aun así me debes una explicación Gallade- La mirada algo afilada llega a su esposo y este de inmediato se notan sus nervios

-Bueno, pues verás... Iré al templo- Antes de poder decir más usa Teletransportación desapareciendo por completo

-Cielos, no hay manera... Jeje vamos, seguro que a Millie le sorprenderá verte, aunque pareces un poco diferente a una Kirlia-
-Asi es, por eso papá fue con el gran maestro-
-Ya veo, bueno sería agradable tener respuestas- Gardevoir entra a casa dándole la mano mientras Hanako camina tranquilamente- Por cierto, creo que ya no necesitarás tu cuna ¿Verdad?-
-Ay... Es que es muy cómoda-
-Ja ja ay siempre serás mi linda bebé-

Con el sol en lo más alto y la llegada de Gallade al templo, el Gran maestro Vacío salía pareciendo que ya estaba listo para su llegada

-Gallade, me alegro verte, sentí algo muy curioso y creo que mi presentimiento era correcto-
-Gran maestro- Gallade hace una pequeña reverencia juntando su puño con su palma siendo como un saludo de respeto- Así es, Hanako algo paso con ella, sus poderes no solo crecieron si no también evoluciono por así decirlo-
-¿Por así decirlo?-
-Sus vestido no está del todo como una Kirlia y sus cuernos no son tan grandes, aunque aún tienen ese color blanco-
-Interesante, sígueme Gallade- Vacío entra en el templo y se pone a buscar entre algunos registros que tenía, distintos libros, pergaminos y escritos de distintos tipos, todo parecía completamente organizado aunque para Gallade no parecía tener cohesión alguna

-Justo aquí, lo tengo- Vacío va con el y le muestra el antiguo escrito- Esto es hace cientos de años, cuando todas las regiones estaban en una guerra, los Pokémon con gran poder tenían una fuerza tan debastadora que la simple evolución sería un modo de gastar energía excesivo, por lo que pasaban por una fase intermedia oara acostumbrarse-
-¿Cuándo Hanako la consiga será una Kirlia?-
-Exactamente, por eso Hanako debe seguir entrenando, tiene un gran poder y aún no lo saca todo nisiquiera

Gallade en ese momento se queda totalmente sin palabras, sintiendo un nudo o una roca, que podría decir sobre esto a su esposa, a su hija que tenía ese poder, pero aún así algo no tenía sentido, el porque sus poderes psíquicos no se desarrollaban al punto que no podía hacer levitar unas hojas, ¿Que era su hija? Esa era la pregunta principal, sin duda un gran misterio del que debería aprender al ver el crecimiento de su hija, aún así su idea quedó clara sobre el que hacer

-Debe controlar su poder, pero no aquí, yo la ayudaré gran maestro
-Gallade, se que podrás y cuando sientas que ella está lista debes tener en cuenta su destino, sea cruel o sea glorioso- Esas palabras daban nervios a Gallade, pero dejaron clara su mente

-Estoy convencido, Hanako debe ser la persona que nos dé luz a la región... Incluso si usted se va
-Suerte Gallade, estaré esperando

Con las puertas cerradas Gallade volvió a su hogar, centrándose sobre que sería del futuro de su hija, si hacía lo correcto y que pensaría al ponerle tanta presión o como podría manejarlo al ser básicamente una niña, su meta era clara, debía hacer caso omiso y con eso atrasar el entrenamiento de Hanako, al menos al punto en que sepa que ella se podría cuidar y a la vez que sepa controlar su poder y no dar lagunas de fuerza, aunque no sabe cómo esto podría afectar la región donde vivía le quedó claro que sobre todas las cosas iba a poner a su hija
Mirando por afuera ve a Hanako comiendo con gustó una comida hecha con todo el amor de una madre, con esos sus dudas quedaron claras, Hanako debía esperar para poder demostrar el cien porciento de sus capacidades, y si todo Rensei va contra el que así sea, pero su hija no sufrirá la presión de una batalla

Continuará...