Si eso no es amor, ¿qué es?

1.1K 129 13
                                        

Cuanto más se esfuerce él en seduciros, más debéis creer en su sinceridad.

 

Del capítulo titulado

 

«Si eso no es amor, ¿qué es?»

A primera hora de la tarde hacía calor en el salón barroco

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

A primera hora de la tarde hacía calor en el salón barroco. O quizá, admitió Hyunjin para sí, estaba nervioso. No mucho, pero lo suficiente para que le molestara la corbata, aunque se la había ajustado dos veces. Tocar para un grupo, aun para el reducido número de invitados de Minho, no era algo que aceptara muy a menudo. En ocasiones tocaba para la familia y lo había hecho, a petición de su abuela, en la íntima y discreta boda de su madre con su conde italiano.

Lázaro había escogido a Vivaldi, por supuesto, y eso complació a Hyunjin, pues el maestro italiano era uno de sus favoritos. Y después, cuando su madre, con aquel traje nupcial que la hacía parecer tan joven y encantadora, se le acercó con lágrimas en los ojos y le abrazó emocionada, incluso a él se le empañó la vista. Porque la quería y era conmovedor verla feliz de nuevo tras la devastadora muerte de su padre.

—Imaginad al conquistador más famoso de Seúl, un verdadero imán para el escándalo, famoso por su afición a los jóvenes encantadores y a los juegos de azar, interpretando un dúo con un jovencito virginal durante una fiesta campestre, solo para complacer a su cuñado.

El cáustico comentario hizo que Hyunjin mirara de reojo a su hermano, que se había acercado para colocarse a su lado.

—Nadie lo creería, así que estoy bastante convencido de que mi fama seguirá intacta.

Felix tenía una expresión inocente, pero eso no era nada nuevo.

—A mí mismo me cuesta creerlo. Dime, ¿hay algo en ese par de ojos color ámbar que motive que te hayas vuelto tan pródigo con tu talento? Minho me dijo que estaba encantado de que Jeongin hubiera podido convencerte para que tocaras. Oí perfectamente que le hacías creer a Christopher que su esposo te lo había pedido. De hecho, mentiste como un bellaco, y eso no es propio de ti. Ni tampoco tocar en público. Te lo pregunto, ya que el delicioso joven Yang es un denominador común en ambas situaciones.

Eso se acercaba demasiado a un territorio incómodo, y Hyunjin lanzó una mirada torva a su hermano.

—¿No te basta con utilizar el ingenio para combatir en la guerra? Estoy convencido de que mi vida privada no puede compararse con intrigas de esa categoría.

—Por desgracia, la guerra está muy lejos. Tú, en cambio, estás aquí. —Felix hizo un ruidito con los dientes, parecido a una carcajada.

El problema era que en ese par de ojos había algo que impulsaba a Hyunjin a hacer cosas irracionales, tales como corretear por los jardines a la luz de la luna. Diantre.

ᒪᕮᑕᑕIOᑎᕮS ᗪᕮ SᕮᗪᑌᑕᑕIÓᑎ ( 𝐵𝑎𝑛𝑔ℎ𝑖𝑛𝑜)[TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora