Doyoung cayó exhausto al suelo del salón en cuanto terminaron de grabar la coreografía para un nuevo vídeo del canal de su grupo. Los demás chicos se dejaron caer también en broma mientras reían pero solo Johnny se acercó hasta el pelinegro.
—¿Estás bien? —susurró Johnny con notoria preocupación y cuando quiso acariciar la mejilla del chico que le gustaba se encontró con la mirada del manager quién casi lo estaba regañando.
—Solo estoy cansado —pero Doyoung no tenía la fuerza para levantarse del suelo, sentía como su vista se nublaba poco a poco hasta que de repente todo se volvió negro.
—¿Doyoung? —Johnny movió un poco al pelinegro y al no obtener respuesta se levantó rápidamente asustando a los demás. —Chicos, Doyoung no responde.
Quince minutos después todos se encontraban esperando a su amigo fuera de una enfermería, Johnny era quien más preocupado estaba, sabía que Doyoung a veces era muy exigente consigo mismo a la hora de ensayar coreografías hasta el punto de no cuidar de su salud.
—Oye, tranquilo —Taeyong se sentó a un lado del chico de cabellos castaños quién estaba casi sollozando. —No te pongas así, de seguro no es nada grave.
—Ty, tu sabes lo mucho que me... —Johnny observó al manager y pasó saliva. —Me preocupo por el, es como mi hermano pequeño.
Media hora más tarde Doyoung salió del lugar caminando como si nada hubiese pasado, los chicos por fin pudieron respirar con normalidad, nunca lo habían visto colapsar de esa forma.
Por órdenes del médico Doyoung tuvo que irse al departamento a descansar así que terminaron dándole el día libre a todos los chicos ya que no tenían nada más que hacer.
—¿Me vas a decir que pasó realmente? —Johnny entró a la habitación del pelinegro viéndolo acostado en su cama mientras abrazaba su pingüino. Doyoung sonrió al darse cuenta de la presencia del chico de sus sueños e hizo un pequeño puchero.
—Solo es cansancio —se quejó en tono infantil haciendo reír a Johnny quién se sentó a su lado para poder darle pequeños masajes en la cabeza a Doyoung.
El pelinegro amaba que con Johnny a solas podía comportarse como un niño pequeño porque el mayor le iba a seguir el juego, también amaba como lo consentía y siempre lo ponía de su prioridad.
Le gustaba demasiado, de eso no tenía duda.
Mientras tanto Johnny admiraba lo hermoso que se veía Doyoung estando relajado, en realidad se veía hermoso de todas las formas posibles pero siempre quería verlo en paz, calmado y feliz.
Sus manos bajaron hasta la mejilla de Doyoung acariciándola con lentitud cómo había querido hacerlo durante en ensayo, la piel del pelinegro era suave, casi como la seda.
—Johnny... —Doyoung abrió los ojos sintiéndose avergonzado cuando el tacto del mayor viajó hasta sus labios.
Había sido imposible para Johnny contenerse, llevaba mucho tiempo gustando de Doyoung, queriendo tener una oportunidad de decirle lo que sentía.
Y hoy se sentía valiente.
—Me gustas mucho —Johnny comenzó a acercarse peligrosamente al rostro de su amigo quién ahora tenía las mejillas completamente rojas. —¿Puedo?
—Sí —el pelinegro no dudó en contestar haciendo que ambos soltaran una pequeña risa.
Se besaron cuántas veces pudieron esa tarde que tenían de descanso, Johnny aún seguía sin creer que en verdad lo estaba besando, que le gustaba al chico pelinegro del cual se enamoró desde el primer día que lo conoció en la empresa.
Se enamoró de ese instinto maternal que el pelinegro tenía con los que en su tiempo eran niños pequeños, como cuidaba de Jaehyun e incluso de sus hyungs cuando alguno enfermaba.
Tenía un corazón tan puro para este horrible mundo.
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Otro fanfic que sale gracias a un edit que hice en mi tiktok (@ Shipperscorporation)
Así que agarrense mijos que vamos recio
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Saturno ¡! JohnDo
Fanfiction-¡Miren que hermoso se ve mi futuro esposo -gritó Johnny riendo mientras filmaba a Doyoung. -¡Deja de grabarme! -el pelinegro cubrió su rostro.