❤Viaje al Amor❤ [Spartor](en edición)

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Después de denunciar todo el abuso a la estación de policía y de mostrar las pruebas suficientes, así como hacer unos estudios para comprobar agresión y violación, los policías se encargaron de dirigirse hacia el lugar donde se encontraba aquel hombre tan despiadado.

Llegaron al lugar de la fiesta, búscaban la descripción que había dado Yoiira de Tadeo con la mirada.

Entre todas esas personas bebiendo y disfrutando, las cuales se empezaron a alarmar cuando vieron a los policías, ahí lo vieron, a ese abusador bebiendo como loco. La música paró a petición de un guardia ya que lo había solicitado un policía.

Las luces se encendieron y para cuando él quería darse cuenta ya era tarde. No tenía ningún lugar para escapar, estaba rodeado de policías y las personas algo borrachas que se habían reunido en un círculo para poder observar lo que ocurría. Lo primero que pensó fue correr y abrirse paso entre la gente, pero algunas personas impidieron que escapara al reconocer la situación.

Uno de los policías lo arrestó. No podía hacer nada más que no decir nada y esperar a que le dijeran que podía hacer. Desafortunadamente para él y afortunadamente para Yoiira, se iría a la cárcel directamente con una condena de veintisiete años por violencia y violación.

Y asi explotó, esa idiota escapó y le dijo todo a los policías, pensaba él. Cuando lo metieron a la patrulla por la ventana se acercó Yoiira y Sparta, mientras que poco lejos estaba su madre, aunque éstos dos últimos él no los conocía.

Miró a Yoiira con rabia, ésta no lo podía creer, se acabaría, todo el dolor, todo el sufrimiento, todo el llanto, era el final de todo eso.

-Eres una horrible persona, ojalá te pudras en la cárcel maldito imbécil.-Dijo Yoiira.

-¿Sí? ¿Y qué harás? El departamento es mío, las cosas son mías, no tienes nada.-Sonrió con sadismo.

-Yo la ayudaré mientras se compone de nuevo.-Habló Sparta pasando uno de sus brazos por la espalda de la chica de forma protectora.

-Sí, tú, hombrecito, muy machito te vez, eh. Hasta eres menor que ella seguro.-Rodó los ojos.

-Eres un animal.

Un policía hablaba con Yoiira mientras ésto pasaba. Después de eso se dirijió hacia ella y aclaró unas cuantas cosas que pasarían con Tadeo. Al finalizar el arresto todos los policías se fueron dejando en la oscuridad de la noche a Paola, Sparta y Yoiira, quien se abrazaba a sí misma.

-¿Es verdad que no tienes a dónde ir?-Preguntó Sparta.

-Sí, después de un tiempo de que ellos me dejaran independizarme, mis padres resultaron en un accidente de avión de camino hacia México. Era un viaje para que el director de la empresa donde trabajaba mi madre conociera a los esposos o pareja de sus trabajadores y... Solo había treinta o cuarenta personas en el avión, sin contar a azafatas y pilotos... No tengo hermanos y corté relación con mis antiguos amigos.-Explicó con tristeza.

-¿Tú tienes espacio? Felipe.

-Lamentablemente no. Apenas cabemos Ari y yo. Me temo que no puedo recibirte en mi departamento Yoiira.

-Venga, te vienes a vivir conmigo, no pasa nada.-Aceptó Paola despreocupada.

-Gracias Paola, en verdad se lo agradezco mucho, prometo que buscaré un trabajo y daré todo mi esfuerzo por comenzar de nuevo.-Sonrió con lágrimas en los ojos.

-También te ayudaré con eso. Mañana te conseguiré un celular y podrás comunicarte conmigo si es que necesitas algo. No tienes que agradecerme, hazlo haciéndome saber que estás bien y que lo estarás, ¿sí?

-Por dios, Andrés, ¡gracias!-Se lanzó a abrazar al nombrado. El último recibió el abrazo acariciando la espalda de la mujer consolándola. Como nunca hizo.

🛫❤[...]❤🛫

A la mañana siguiente, como prometió, compró un celular y además de eso algo de ropa exterior para poder entregárselo a su exnovia. Así lo hizo recibiendo un gracias y otro abrazo por parte de Yoiira. También le entregó algo de dinero para que se comprara algo más de lo que necesitara.

Y finalmente terminó por llevarse a su hermana con él para cuidarla mientras que Yoiira salía a buscar trabajo y Paola trabajaba en el suyo. Pocas veces hacía eso ya que Ariadna se podía quedar sola, pero ésta vez Paola tardaría mucho más en llegar a casa.