❤Viaje al Amor❤ [Spartor](en edición)

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Sparta ya había terminado de preparar el desayuno, por lo que subió las escaleras hasta su cuarto para poder avisarle  a su amigo, quien se estaba tardando un poco en bajar.

El desayuno de ambos ya estaba servido, al igual que el de la familia de Sparta, quienes sólo esperaban que los dos amigos llegasen para poder comer. Al momento, los últimos bajaron y se dirigieron a la cocina.

-Mamá, aquí está Ari.-Dijo Sparta sacando una silla de la mesa para ofrecer a Raptor, cosa que el mayor aceptó por su puesto. Luego de ésto Sparta se sentó en otra silla.

-Gonzalo. Un gusto verte en persona. Puedes llamarme Paola, con confianza.-Saludó la madre de Sparta, estrechando la mano con el primer mencionado.

-Un gusto, igualmente, y claro que sí, Paola.

Entonces el padre de la familia tosió un poco, así llamando la atención de todos los de la mesa.

-Disculpen. Estoy un poco resfriado.-Dijo el hombre con una voz algo ronca. Aclaró su voz y habló de nuevo.-Soy el padre de Andrés, puedes llamarme Richard.-Estrechó su mano con el falso pelirrojo.

-Un gusto.-Sonrió.

Todos los presentes a la mesa empezaron a comer, en unos segundos más, se escucharon pequeños y cuidadosos pasos con dirección a la cocina. De pronto la hermana de Sparta entró a la cocina en dirección a su padre con una botella de jugo de naranja en sus manos.

-Papá. No puedo abrir el zumo sola.-Dijo la niña mientras acercaba la botella de plástico hacia su padre, quien cogió la botella con sus manos y la abrió rápidamente.

-Ariadna, saluda a las visitas, mi niña.-Dijo Paola.

-Lo siento.-Se giró hacia Raptor.-Mi nombre es Ariadna. ¿Eres amigo de mi hermano? él me mostró unas fotos de ti.-Dijo la pequeña inocente.

-Oh, con que sí.-Miró de reojo a su mejor amigo, dándole una sonrisa algo pícara. Mirada que ninguno de los adultos notaron pero el menor sí y se sonrojo levemente.-Me llamo Ari, nuestros nombres son algo parecidos.-Rió un poco con la niña.

-Es verdad. ¡Adiós!-Se despidió cogiendo la botella de jugo de naranja para después retirarse hacia la sala de estar a seguir viendo dibujos animados.

Pasaron unos minutos mientras que todos a la mesa hablaban de cosas triviales al mismo tiempo que terminaban su desayuno, entonces cuando todos acabaron de comer, Sparta se ofreció a levantar los platos de todos y su madre fue a lavar su boca para seguir con sus actividades normales, dejando solos a Richard y Raptor en la mesa. Entonces el último sintió la mirada de su mayor sobre él mientras revisaba su celular esperando a su amigo.

-Debo decir que esperaba que fueras un poco más bajo, rebasas a Felipe por unos cinco centímetros. Además tienes un acento español mejor que el mío.-Llamó la atención del joven, haciendo que levantara la cabeza para poder responder.

-Oh, claro, gracias, soy Ecuatoriano pero hablo con acento Español para que Andrés se sienta más cómodo, también por algunos de mis amigos que también son Españoles.

-Oh.-El hombre se sorprendió un poco.

-Además, en verdad que Andrés es alto, soy mayor que él por cuatro años.