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SooBin ya estaba listo, BeomGyu también. Estaban practicando hasta que ambos sintieron que ya podían comenzar a dar su "función" al público. Entonces, BeomGyu dejó el estuche de su guitarra en frente de ellos, en el piso, para dejar en claro que a quien le gustara su espectáculo  podían dejar dinero como recompensa.

Sin más rodeos, respiraron hondo una vez más.

- Espero que ganemos algo de dinero.

BeomGyu habló, tomando toda la atención del chico pelirrojo.

- Créeme, lo haremos. Ya puedes empezar a tocar la melodía.

Y apenas dijo aquello, el castaño tocó con sus dedos las finas cuerdas de su instrumento.

Cuando llegó el momento, SooBin añadió el vocal a la canción.

Luces como un loro azul
¿Volarías hacia mí?~

BeomGyu se sorprendió al escuchar la hermosa voz del más alto.

Quiero un buen día, buen día, buen día
Buen día, buen día

SooBin miró al castaño, y le hizo una seña para que lo acompañe en la canción. Rápida y disimuladamente éste se negó. Pero no por mucho, porque venía su parte favorita y no pudo evitar callar.

Pareces un oso de invierno
Duermes tan feliz
Te deseo buenas noches, buenas noches, buenas noches
Buenas noches, buenas noches

Eran muchas las personas que comenzaban a acercarse para disfrutar de aquel pequeño espectáculo. La voz del chico castaño junto con la del pelirrojo combinaban a la perfección. Un toque grave, suave y relajante, junto con uno agudo, fino y dulce. O al menos eso decían los espectadores.

Imagino a tu rostro
Diciéndome hola
Y es ahí cuando los días malos
Ya no son nada para mí
Contigo

La letra era corta, pero la canción era estable y hermosa.

Oso de invierno
Ooh, ooh, ooh
Duermes como un oso de invierno
Ooh, ooh, ooh
Duermes como un oso de invierno

Finalmente terminaron, y había sido buena la cantidad que recibieron. ¡Y eso que sólo habían tocado una vez!

SooBin pensaba que hacerlo un par de veces más no estaría mal.

Dieron las gracias y la mayoría de la gente se fue. Algunas chicas estaban elogiándolos y algunos otros dándoles apoyo.

- Wow, lo hicimos muy bien.

- Eso creo.

Ambos rieron. SooBin se puso de pie y le sonrió, el otro haciendo lo mismo por inercia.

- Gracias por ayudarme, lo recordaré por siempre. O eso espero. SooBin, por cierto.

El más alto acercó su mano hasta el castaño para estrecharla, cosa que éste último hizo enseguida.

- B-beomGyu, Choi BeomGyu.

- Bien BeomGyu, ya podemos ir a comer. Bueno, si es que quieres venir conmigo...

SooBin se dió la vuelta mientras caminaba lentamente. El menor se apresuró para llegar a su lado.

- Claro que quiero. D-digo, ese era el trato.

El mayor rió mientras se dirigían al restaurante de la otra calle. BeomGyu iba bastante callado en el trayecto y el mayor había notado el extraño sonrojo en sus mejillas.

- Eres muy tímido, tienes que dejar esa timidez de lado o así nunca conseguirás pareja.

BeomGyu se atragantó mientras tosía fuertemente. Aquel comentario le resulto un tanto atrevido y podía asegurarlo porque vio la "risa malvada" de SooBin resaltar en su rostro.

- Cierra la boca. –Beom se sorprendió a si mismo por hablar con tanta confianza– Tú eres el que no conseguirá pareja si dices todas esas tonterías a cada rato.

Sí, BeomGyu ya no sabía si era él o otra persona quien había dicho aquello.

Él era un chico de muchos valores, casi nunca decía maldiciones porque era una falta de respeto y mal comportamiento. Pero ahora se sentía diferente.

- Wow, creo que saqué tu demonio interior.

SooBin rió con fuerza mientras veía el rostro enojado del castaño.

- Vamos a comer rápido, tengo cosas que hacer.

- Como usted diga, patrón.

Finalmente entraron al local de comida, sintiendo como diferentes olores inundaban su nariz.

- Buen día, ¿quieren que les traiga el menú o desean el combo del día?

- Buenos días. Ahh... Por ahora veremos el menú, luego sabremos que pedir.

SooBin volteó a ver a BeomGyu indignado. ¡Él quería el combo del día! Aunque no sabía qué era, lo quería porque estaba más barato. O eso pensaba.

- Siéntate, no te quedes ahí parado. ¡Me jodiste con venir y te quedas ahí! Tengo ganas de golpearte ahora.

- Wow, cambia esa agresividad niño bonito.

BeomGyu se sonrojó fuertemente mientras lo miraba con fastidio. SooBin se limitó a reír y sentarse frente a él en la mesa.

- Toma, yo ya sé lo que voy a pedir.

El menor le entregó el menú mientras tenía su mirada puesta en la TV detrás de SooBin. Éste último lo tomó mientras sonreía pícaro.

Vió todo con detalle y detenimiento hasta lograr encontrar su objetivo. Por suerte, lo encontró.

- ¡Lo tengo! ¡Señorita, señorita!

BeomGyu se asustó ante el agudo y fuerte grito de SooBin. Deseó haber rechazado la idea de ir a comer con él, quería que la Tierra lo tragara para no pasar vergüenza frente a todos.

En cambio, SooBin, se encontraba más que emocionado. ¡Iba a probar la pizza napolitana por primera vez en su fingida e inmortal vida como humano! Estaba emocionado por ello, tanto que no pudo evitar soltar un grito muy agudo –un poco contenido– cuando la mesera le dijo "En seguida se lo traigo, joven". Definitivamente ese día era el mejor de todos.

- Dios, ¡no puedo esperar! Pero lo bueno tarda en llegar o así dicen.

BeomGyu, por su parte, pidió pizza con piña. Y como el mayor no escuchó lo que dijo en el momento en que la mesera tomó sus pedidos, cuando la comida llegó BeomGyu no pudo sentirse más juzgado.

- ¿¡Qué tanto miras!?

- Dios, ¿¡En serio pediste pizza con piña!?

- Sí, la amo.

SooBin sentía que iba a vomitar.

- ¡No podré vivir contigo si comes esa porquería!

BeomGyu se atragantó con su pedazo de pizza y SooBin dió un mordisco a su porción con el ceño fruncido.

"¿¡Qué carajos le pasa!?"

 𖠌 Ángel And Devil 𖠌  » SooGyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora