six

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Tomás POV:

El show de ysy había terminado hace media hora aproximadamente, ahora mismo me encontraba en el after que había echo por lo bien que había salido el concierto de Alejo.

— ¿La conoces? — me preguntó Gonzalo, interrumpiendo lo perdido que estaba en mis pensamientos.

— ¿a quién? — me señaló a una morena que hablaba animadamente con Mauro, relamí mis labios, era completamente hermosa. — No la he visto nunca.

— Voy a hablarle. — dijo seguro, pero por instinto lo detuve, me vió confundido.

— Está hablando con Mauro, no hay que interrumpir. — Biza rodó los ojos y reí levemente.

— Como sea. — dijo desinteresado y fue a no sé dónde, probablemente se molestó por impedir que fuera con ella.

Mientras tanto, yo me quedé ahí observándola de la manera más disimulada posible. Me era imposible dejar de verla, tenía algo que me intrigaba demasiado y por ello mi necesidad de hablar con ella  crecía a lo largo que pasaba la noche.

(...)

Era la quinta cerveza que tomaba, hace unos segundos estaba hablando con Julieta, pero fue a la pista a bailar. Mientras tanto, seguía sentado donde mismo, esperando a que Mauro se alejara de la morena y poder acercarme a ella.

Y finalmente, parecía ser que mis súplicas fueron escuchadas, pues Mauro fue a no sé donde, dejándola sola. Como pude, evadí a las personas que estaban alrededor y fui hacia ella.

— Hola. — dije seguro, por alguna extraña razón no me sentía nervioso al hablarle, es como si ya la conociera.

— Hola. — dijo sonriente, haciéndome comprobar que podía ser aún más hermosa de lo que aparentaba.

— Soy Tomás, no te había visto antes y por eso me acerqué. — Ella rió algo nerviosa, me causó demasiada ternura.

— Soy Kendra, hace años que no venía acá, tal vez por eso no me habías visto.

— Bueno, Kendra, es un gusto conocerte.

— El gusto es mío, Tomás. — ambos estrechamos manos y una especie de electricidad invadió mi cuerpo ante su tacto, haciéndome estremecer un poco, pues hace tiempo no sentía algo así.

Una simple presentación entre ambos fue suficiente para que pasáramos horas hablando, riendo e incluso bailando, me hacía sentir como si la conociera desde hace tiempo, disfrutaba demasiado de su compañía.

— Ken, es una lástima que no te haya conocido antes. — ella soltó un pequeño "oww" y habló.

— Pienso lo mismo. — rió un poco. — Pero mira, que afortunados somos de toparnos ahora. — asentí.

— Totalmente, y dime. ¿Qué te trae por aquí?

— Oh, vine a vivir con mi nov...

— Hola amor. — y entonces llegó Alejo, abrazándola por detrás y con confianza hizo lo que toda la noche había esperado hacer... la besó. — Cenfe, ¿ya se conocieron? — preguntó en cuanto se percató de mi presencia y yo asentí, me sentía algo incómodo, pero tenía que disimular.

— Si, de echo llevamos rato hablando. ¿Verdad? — dijo Kendra.

— Así es, así que... ¿Son pareja? — ambos asintieron al unísono.

— Perdón por no presentártela antes, acabamos de llegar de España y los shows y eso. — habló Alejo y yo negué.

— No, no te preocupes, me da gusto verte feliz. — Alejo sonrió, me sentía feliz por él, pero por alguna extraña razón, muy en el fondo sentía una especie de celos.

— Gracias, hermano. — hubo un pequeño silencio, el cual rompió Alejo. — Tendré que robarte a Ken, quiero mostrarle algo. — dijo con entusiasmo.

— Claro, vayan. — Alejo la tomó de la mano y con la otra se despidió de mi.

— ¡Fue un gusto conocerte, Tomás! — dijo Kendra mientras se iba detrás de Alejo, tomando su mano.

En cuanto la vi alejarse suspiré cansado y terminé mi cerveza de un trago.

Kendra, es una lástima no haberte conocido antes..

𝐀𝐥𝐞𝐣𝐨'𝐬 𝐠𝐢𝐫𝐥 | 𝐂.𝐑.𝐎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora