Protocolo: Servir y proteger.

Un Día Normal.

Durante la noche del día anterior en un laboratorio, en el cual se construían robot tripulados para asuntos militares o de seguridad nacional, dos intrusos pudieron ingresar hackeando la seguridad que se había instalado para guardar aquellas armas. Los intrusos que habían entrado al laboratorio, llevaba puesto una chaqueta negra, pantalones negros, zapatos negros y guantes que combinaba con su ropa, bordado sobre su chaqueta tenían diseñado dos engranaje dorado y alrededor de estos, había un círculo color blanco.

Los intrusos eran miembro de una secta religiosa, la cual adoraba a un dios en forma de engranajes, según el fundador de esta secta, el dios engranaje es un ser divino que quiere instaurar una teocracia en la tierra, esto con el fin de gobernar a los humanos, y ayudarlos para que no se maten entre ellos y alcanzar un estado de armonía. La secta del dios engranaje, quiere instaurar ese tipo de gobierno, y han hecho varios ataques terroristas para lograr su objetivos.

Los dos intrusos al entrar al laboratorio, esquivaron la seguridad interior y tomaron dos de los robots tripulados, los cuales eran conocido como ED-212, estos tenía una cúpula de vidrio grueso, que permitía al conductor ver hacia afuera, pero las personas que ve desde el exterior no ven al conductor, la cúpula estaba pegada a un cuerpo de metal en forma de ovalo, y debajo de este cuerpo, había pegados unos pies de dos metros, y clavado al cuerpo había dos metralletas a cada lado.

Los dos miembros de la secta del dios del engranaje, hicieron un gran destrozó al salir del laboratorio y de una forma extraña, pudieron salir del lugar destruyendo todo a su paso.

La ex del científico le había dicho a su antiguo esposo y padre de su hija, que se juntarse en un café que tenía el nombre "Aroma del norte" , que se ubicaba en el centro comercial, el científico fue al lugar señalado por la que fue una vez su esposa, vistiendo un conjunto de ropa muy formal para la ocasión. La esposa que vestía con una ropa consistente en una camisa blanca con manga larga, una chaqueta de corte americano que tenía encima, una falda que le llegaba hasta las rodillas, unas medias trasparentes unos zapatos negros y unos guantes blanco, al ver a su ex esposo, respiro profundo y molesta, a ella no le gustaba hablar con su ex.

—Veo que recibiste mi mensaje—Sonrió de forma burlona la mujer al ver los cachetes rojos de su ex.

—Si lo recibí muy fuerte—El científico se sentó frente a su ex.

—Te aconsejo que te aplique algo frío en tu mejilla, y ve al doctor por un posible problema que puedas tener hay abajo—Le aconsejo la mujer al científico, aun manteniendo su sonrisa de burla, y luego agregó aun manteniendose en su poción burlona—Aunque, tal vez no sea necesario, ya no tiene mucha agua en tus dos cantimploras.

El científico cerró sus ojos, tampoco le agradaba su ex, en ese momento llegó un androide que ejercía de mesero y le pregunto a los divorciados, que es lo que quería pedir, el científico pidió un café cortado, y la mujer pidió una mimosa, el mesero robótico, se fue para hacer la orden, dejando a los antiguos esposo solo para conversar.

—Siempre tomando alcohol—El científico le comento a su ex, y agrego—Ahora que lo pienso, me sorprende que un café venda alcohol.

—El mimosa es considerado un coctel en el desayuno, así que este café se permite servir esta bebida alcohólica, además, es bueno empezar el día con alcohol en la sangre—Le comento la mujer y agrego—Ahora bien, es momento de conversar sobre tu extraño proyecto de ciencia, ¿esperabas sacar una calificación máxima?

—Ahora ya se porque no extraño tu presencia, tus bromas son tan molestas—Le comento el científico y agrego—Mi idea para el proyecto, era demostrar que se podía crear una nueva raza de humanos cibernéticos.

El mesero interrumpió la conversación trayendo la orden que la antigua pareja había pedido, y dejando el café cortado y el mimosa, sobre la mesa, los dos dieron las gracias al mesero robótico, el cual hizo una reverencia y se fue a atender otra mesa.