Solo los recuerdo de disparos, gritos y sangre, inunda su memoria, ha despertado en el cuerpo de una androide, no sabe quien es, solo disparos, grito y sangre, recuerda.
Su actual misión es hacer de sirvienta para un científico, limpiar la casa, co...
Disparos, gritos y sangre, seguido por la visión borrosa del suelo, es lo que recordaba, casi todo sus recuerdo había sido borrado, ¿ quien era? Y porque tenia esos recuerdos.
Su visión negra, se vuelve verde y aparecen unas pocas letras; Modelo: Beta-X.
—¿Beta-X?, ¿es así como me llamo?—se preguntó.
Se escucho el ruido de una compuerta abrirse, mientras su visión verde era inundada por un vapor frío y el color verde, fue remplazado por una gama de colores.
Una luz cubrió el lugar en donde estaba, pudo observar que estaba en una especie de laboratorio en el cual había varios...¿brazos?, pero estos eran de metal.
—Al fin, al fin pude crea a un robot con mente humana—se escucho una voz masculina y después una risa—He logrado, lo que no estaba permitido, el gran taboó de la cyberciencia y de la robótica, ha sido roto y por mi.
Su ojos pudieron visualizar el brillo de unos lentes y una sonrisa, de lo que puede ser un humano.
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Entonces el ser humano se acercó y pudo ver mejor quien era, era un tipo de cuerpo delgado piel blanca, ojos verde claro, pelo de color castaño claro y corto, vestido con una camisa blanco, pantalones negros, zapatos negros y una bata de científico blanca, además llevaba puesto unos lentes redondo.
—Mi gran creación, mi sirvienta perfecta—el científico, estaba feliz.
«Espera, ¿sirvienta?», pensó Beta-X, y agrego,« Por que, algo me suena mal».
—Tendrás muchas preguntas, en especial de tu nueva forma—El científico, le dijo y agregó —Ven te mostrare.
No tuvo más opción que seguir a aquel científico, mientras escuchaba unos pasos metálicos.
Subieron por unas escaleras y atravesaron el holograma de una pared, entonces llegaron a una habitación, piso alfombrado, una cama de una plaza, un escritorio con un computador portátil, un armario y un espejo, era lo que había en aquella habitación.
—Contempla tu nuevo cuerpo—El científico, le señalo el espejo.
Obedeció al científico y se contemplo en el espejo, se sorprendido al ver su cuerpo.
«¿Este soy yo?», se preguntó, mientras observaba su cuerpo.
Ante su vista, se reflejaba, una chica de cuerpo esbelto y perfecto, piel blanca, pelo corto que le llegaba hasta la barbilla, el cual era claro, algo que parecía unas orejas, dos antenas saliendo de su cabello, ojos de color miel, vestía con un uniforme de sirvienta color azul, medias blancas y zapatos negros.
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