Capitulo 3: El chico nuevo

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                                                           Capítulo dedicado a @CamyBarretooo

Ya era de mañana, aún los ojos me dolían por lo de la noche pasada pero mi plan se estuvo maquinando toda la noche y aunque no haya conseguido algo concreto, se que tengo algo a mi favor, este día será divertido.

–Made—me llamó mi mamá—te hará tarde, baja de una vez.

–Ya mamá—le dije, me levanté de la cama y fui directo a bañarme. Una vez que termine, salí del baño y me dirigí a la cama para ponerme el uniforme, iba cursando quinto grado de secundaria, solamente unos meses mas y salía de esa cárcel.

Baje directo a la sala, saludé a mi mamá y salí directo al colegio, fui corriendo al paradero donde mi novio me esperaba en su auto, porque sí él era dos años mayor y ya estaba en la universidad así que me llevaba siempre al colegio de paso para ir hacia su universidad. Por cierto tenia 17 años.

–Hola Made, ¿Cómo amaneciste?—dijo muy relajado, sentado en el lugar del copiloto.

–Hola cariño—le dije en un tono cursi, abriendo la puerta del auto para subirme—Amanecí bien y tu.

–No parece que hayas amanecido bien, tienes los ojos hinchados—me dijo apunto de arrancar el auto y recordé que no me había puesto maquillaje ya que la noche anterior no dormí casi nada, uno por leer y dos por pensar en el plan.

–Si, me quede haciendo una tarea muy larga—mentí—y me conoces, después empecé a leer.

–Deberías tener más cuidado, el no dormir te hará daño—dijo y sabia que tenía razón porque mamá también me lo dijo, pero le creía más a él ya que estaba estudiando medicina humana.

–Si lo sé—le dije restándole importancia.

En todo el camino no volvimos a cruzar palabras, llegamos a mi colegio y baje del auto no sin antes despedirme, le di un beso cálido en los labios y me fui.
Ya en la entrada vi a mis amigas paradas alrededor de algo, exactamente alguien y ese chico era Andrew Black, el alumno nuevo que no iba a poder hacer amigos fácil. Me dirigí al tumulto de personas cuando Andrew y yo cruzamos miradas y se acerco hacia mí.

–Butterfly como estas—dijo poniendo su brazo sobre mí—Ayúdame—dijo susurrando a mi oído—Vamos a clase nos hará tarde—me dijo en tono alto, caminando hacia el salón.

–Porque tengo que hacerte caso—dije botando su brazo fuera de mí—yo no soy nada tuyo y el hecho de que tus padres le pidieran a mi mamá que te ayude a hacer amigos no te da derecho a tratarme como quieras—dije en un grito, cuando me di cuenta que todos nos habían escuchado y se quedaron alrededor de nosotros, impactados por lo que acababa de decir y si hasta yo me sorprendí y salí corriendo de ahí.

Siempre acostumbraba a correr cuando causaba un desastre pero esta vez siento que fue un error porque todo el mundo estaba por todo lado viéndome, escape hacia un campo y me quede allí, sentada y en silencio razonando lo malo que había hecho. Perdí las tres primeras horas de clase, ningún profesor se dio cuenta porque de ser así hubieran llamado a mi mamá para preguntarle el porque de mi inasistencia, seguía sentada, sintiendo el viento correr y me sentía libre.

La lluvia empezaba a caer y supuse que ya era hora de enfrentar todo el caos que había causado, empecé a pararme para limpiar el césped que había manchado mi uniforme cuando escuche mi nombre en una voz familiar, maldije por lo bajo y sentí unas ganas de correr cuando vi que era Andrew.

–Madeline, Madeline—me llamaba desesperado como si estaría preocupado—Made se que te encuentras aquí—yo estaba parada detrás de un árbol—Yo quería pedirte perdón por lo que hice ayer en la noche, se que estuvo mal pero sentía que si te obligaba a hacerlo sería malo y reaccione de una forma incorrecta lo sé, pero solo quiero protegerte, porfavor sal te lo suplico—sentí un llanto por su parte—Me dolió, me dolió verte así ayer, llorando, y hoy en la mañana verte subir al auto de ese chico y también despedirte de él con ese beso tan cálido que le diste. Eres más de lo que pensé y lo siento mucho.

–Espera—dije en un tono apresurado, saliendo de detrás del árbol—Porque hiciste eso anoche, no te entiendo de que me quisieras proteger, Andrew eres el segundo chico que me gusta, y sí el chico de la mañana era mi novio—estaba parada al lado del árbol y Andrew solo miraba hacia el césped.

–Lo sé y no te pido que termines con él por mi, solo que me trates como a un amigo, a una persona en la que confiarías y te dejare en paz—dijo, para luego marcharse y dejarme allí.

Llegue a la cuarta hora a tiempo y Andrew estaba allí rodeado de amigas y se me acerco Diane.

–Donde te fuiste toda la mañana, tienes alguna relación con ese chico, porque si es asi me decepcionarías bastante, no le puedes hacer eso a Bred, es mi hermano y me dolería verlo sufrir—dijo sentándose en la carpeta de mi lado para empezar las clases.

–No tengo nada con él, solo es mi vecino—agache la cabeza para leer la nueva lección.

Diane es mi amiga, mi única amiga, porque soy muy desconfiada de las personas lo cual hace que no tenga amigas ni amigos, pero mi mamá no lo sabe, podría decir que a ella no le importa tanto mi vida social, continúo. Diane es hermana menor de Bred, mi novio, en fin todo es lo de siempre, su hermano aún estaba en el colegio cursando su ultimo año, a mi me faltaban aún un año para acabar y ya conocía su hermano quien me gustaba.
Un día como cualquier otro Diane me invito a su casa para espiar a su hermano porque ella ya sabía que él me gustaba, estábamos en su sala viendo televisión y decidí ir al baño.
Abrí la puerta del baño ya que estaba abierta, pero cuando entré vi a Bred ahí parado desnudo a punto de tomar una ducha suponía, de manera veloz me tape los ojos con las manos y quise salir de ahí pero sentí una mano que me agarraba por el brazo y me volteó rápidamente.

–¿Por qué te quieres ir?—susurró a mi oído de forma seductora—¿te incomoda que estemos así de cerca?. Te observo Made, no se como nunca te diste cuenta de que me gustas—me quede sorprendida por lo dicho y solamente opte por bajar las manos de la cara y ahí estaba él con su pelo desordenado, alto y con sus ojos verdes mirando fijamente hacia mi, esperando una respuesta de mi parte y hablé.

–Nunca lo supe, pero a mi también me gustas—de manera tímida me lancé a envolverme en sus labios, en un beso apasionado y él me correspondió. Ahí fue cuando empezó a bajar poco a poco sus manos hasta introducir una de ellas en mi ropa interior y saqué la toalla que llevaba en la cintura, vi esa grande erección ahí. Los dedos de Bred empezaron a deslizarse y moverse más rápido.

–No puedo—dije en un gemido, cuando Bred estaba besando mi cuello.

–Porque , ¿no es lo que querías?—me tomo de las piernas para levantarme y ponerme contra la pared—Me encantas, pero no sería justo que sea el único dándote placer aquí, arrodíllate—dijo en un jadeo y obedecí.
Empecé a meter el miembro a mi boca para llenarlo todo de saliva y así se haga más fácil lamer, metí y saqué, seguí esa secuencia hasta que él bajo sus manos a mi cara y me hizo detener para llevar sus labios a los míos, desabrochó mis vaqueros para bajarlos y empezar a realizar un cunnilingus en mi parte íntima, subió después de hacerlo y empezó a lamer mis pechos.
De esa manera en una cajita al lado del baño se encontraban los preservativos, se colocó uno para que se introduzca en mí y así fue como perdí mi virginidad.
Una vez llegado el esperado orgasmo, él se deshizo del preservativo y me empecé a vestir.  Talvez no fue la manera correcta de iniciar algo ya que solamente éramos amigos pero las cosas suceden verdad.

–Pensé que no querías nada—se acercó a mi para darme un beso en la frente—¿Quieres estar conmigo?—dijo susurrando en mi oído

–Si —le dije con una emoción inexplicable y lo bese desenfrenadamente.

–Tranquila—soltó una risita divertida— tendremos tiempo después, ve que mi hermana te espera.

–Esta bien—salí de ahí y fui donde Diane a contarle lo que había pasado.

Y así fue nuestra historia con Bred.
Si lo sé le dije a Andrew que aún era virgen pero él era un completo desconocido y quería sacarme de ahí.

Mi niño inmaduroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora