Joseína Gray:
Amaneció, la brisa corría, salí de casa para ir al encuentro con Peter James, el gran magnate de las empresas J&G y esposo de mi hermana Millag Gray.
Al salir de casa me topé con el padre de mi hijo, John Williams, el enredo que tuve con él por simplemente dinero terminó en tragedia, al final acabe teniendo un hijo pero nadie lo supo porque el niño vive con su padre.–Josei esperame—gritó pero no pude reconocer bien la voz, empezó a llover, seguí caminando sin darle importancia—Mamá—una voz pequeña me llamo y sentí que me llamó exactamente a mí porque hubo un escalofrío en mi cuerpo, me detuve.
El pequeño niño, el hijo que tuve de una aventura estaba ahí, corriendo hacia mí para abrazarme.
–Mamá volviste de tu viaje, te extrañé—me abrazó y sentí la necesidad de también abrazarlo, pero en vez de hacerlo, me quede quieta, sin una palabra en la boca.
–Josei—me dijo John, moviéndome del hombro para que reaccionara—Hey tenemos que hablar sobre él, ya pasó el tiempo que me pediste y se me presentaron asuntos, ya no podré cuidarlo—tomé aire y solté algunas palabras
–Vamos adentro—cargué al niño y le di un cálido beso en la mejilla—¿como te llamas?—le pregunté caminando hacia adentro.
–Me llamó Max Williams Gray—dijo con tanto orgullo de sus apellidos, si supiera la persona que he sido, una madre que ni el nombre de su hijo sabía.
–Que bello nombre—le dije, abrí la puerta de mi casa y los hice pasar adentro—Maxi, corre explora la casa y cuando encuentres mi habitación, entras y prendes la televisión—lo baje de mis brazos.
–Okey mamá, pero, ¿luego podemos ir a pasear juntos?—me dijo, viéndome a los ojos y a lo cual no pude decir no.
–Si cariño, yo te llamó para que vayamos—una vez dicho eso, él se fue y yo me quede con John en la sala
–Empezamos—me dijo, sentandose en el sofá.
–Dame un minuto, haré una llamada, puedes servirte algo—le indiqué por donde queda la cocina y me dirigí afuera.
Marqué el número de Peter, tendría que cancelar nuestra cita, timbró y no respondió, le volví a llamar y me contestó.
–Hola Peter, hoy no podré ir a donde quedamos—le dije con un resentimiento en la voz.
–Esta bien supongo, hoy es el cumpleaños de Madeline así que talvez pueda pasar tiempo con ella, mañana nos vemos, adiós—sin decir más me colgó el teléfono, entré a mi casa y me senté en el sofá.
–Supuse que tendrías frío, te preparé té—me dijo, viniendo de la cocina con dos tazas de té en una bandeja, se sentó en el sofá de enfrente—¿Ahora si podemos hablar?
–Si—dije, llevándome la taza de té a los labios—Gracias por el té
–Si, entonces como has estado en estos cinco años Joseína—me preguntó para tomar el té—Ya se cumplió el tiempo que me pediste.
–Si lo sé, escúchame necesito un par de años más, porfavor—le dije acercándome a él.
–No Joseína, crees que para Max es facil vivir con esa mentira de que su mamá siempre esta de viaje, no y ni sabes que día es hoy ¿cierto?—lo miré confundida.
–Viernes supongo—le dije.
–Si, un viernes como hoy diste a luz a Maxi y si un viernes como hoy hace ya cinco años es su cumpleaños—me dijo para pararse del sofá y empezar a caminar—En fin, te lo traigo y ya no lo puedo cuidar, tengo familia Joseína y no lo quieren.
–Por eso te deshaces de él, cierto, para tener feliz a tu nueva familia, es tu hijo John, lleva tu sangre—le dije en un tono alto y él me respondió igual.
–Pero también es tu hijo, es tu responsabilidad, no te hagas la víctima ahora Joseína, sabes muy bien nuestro acuerdo y yo lo cumplí ahora te toca a tí—me gritó y me quede parada sin decir nada.
El acuerdo que tuvimos fue que cuando Max cumpliera cinco años me lo devolvería, ya que yo nesecitaba más tiempo para lograr acabar mi estudio y empezar a trabajar. Lo hice acabe de estudiar y me puse a trabajar y esta casa era alquilada.
–Esta bien, pero hay una condición—le dije de manera tranquila—Voy a irme de viaje pronto y necesito que te lo lleves por unos días.
–Perfecto, ahora me condicionas, vete a la mierda Joseína—y se fue, abrió la puerta de mi casa, pero antes de salir me dijo
–Siempre voy a estar para ti, adiós.
Me quedé parada allí en medio de la sala,
escuché un grito que provenía de mi habitación. Corrí, abrí la puerta y ahí estaba Max gritando de alegría–Mamá, ¿papá ya se fue?—me sorprendí ya que pensé que él no sabía—¿Nos vamos ya?
–Si Maxi, tu papá ya se fue y si ya nos vamos, ven—le dije, para tomarlo del brazo y llevarlo—¿Como sabías que tu papá se iba a ir?—le pregunte curiosa.
–Él me lo dijo y además quería quedarme aquí contigo porque su familia no me quiere—dijo agachando la cabeza y casi llorando.
–Ven—le dije, me agaché a su altura y lo tome por la mejilla—Nadie te hará daño otra vez, mírame—levantó su mirada—Tú eres un Gray y ellos nunca pierden.
–Okey mamá—me dijo para volverse a agachar.
–Repíteme, ¿Quien eres?—le dije.
–Soy un Gray y nosotros nunca perdemos—le sonreí y le di un beso.
–Perfecto hijo, vamos.
Ese día cambio todo y pensé de manera más seria.
Volvimos a casa después de su cumpleaños y me llamaron del celular de mi hermana para decirme que esa loca había matado a mi única oportunidad de salir adelante, todo eso cambio mis planes.
Y ahora todo lo que quiero es la fortuna los James por lo que tuve que empezar a hacerme cargo de la niña odiosa y a mi hijo lo mande con mi madre.
Madeline piensa que su madre esta muerta, pero no es así, su madre esta viva en coma porque alguien intentó matarla cuando estaba en el manicomio.
En fin y así se va dando todo, mi hijo es la clave de todo, él será parte de nuestro futuro.Holi chicos y chicas de wattpad, bueno ya vamos actualizando más seguido.
Quien creen que es la persona malvada de la historia.
Déjenme sus comentarios y obvio los leo siempre.
Los y las quiero mucho
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Mi niño inmaduro
Novela JuvenilHas oido hablar del Karma y eso de que todo vuelve donde empieza, el mundo es grande y todo gira , solamente que no siempre todo acabará bien ni tampoco mal. Aquí en este mundo siempre todo volverá y en el amor no es bueno tener un plan ya que todo...