-Tord

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La mañana empezaba, los rayos de sol entraban por la ventana, el cantó de los pájaros se hacía presente desde afuera...

Un día normal empezaba

Lo normal para Tord sería quedarse todo el día en su cuarto encerrado, escuchando las peleas de sus padres y de cómo decían que el era un rebelde por no tener los ideales que el resto de su familia.

Tord siempre fue un chico reservado que se la pasaba haciendo absolutamente nada, un niño muy tranquilo y quieto, podrían pasar horas sin moverse o emitir algún ruido que no sea el de su calmada respiración

su sueño siempre fue tener más amigos, o simplemente ser más sociable, pero no era más que eso, un sueño.

Sus padres le obligaban a estar en su habitación completamente aislado de la sociedad, un "rebelde" como el no debía hacer contacto con nadie más, se podría decir que eso es su eterno castigo, era castigado por el simple hecho de haber nacido.

De todas formas su presencia en esa casa no era fundamental, sus padres ya tenían a su hermana, ella era "perfecta" para sus padres.

Una chica simpática, muy sociable, buenas calificaciones, muy bonita, atlética...

O al menos eso era lo que sus padres pensaban, por que por dentro ella era un demonio disfrazado de una chica buena

Era una "perra" que se encargaba de hacerle la vida imposible a tord, incluso llegando a auto lastimarse para después culpar a su hermano de sus fechorías.

(...)

tord se encontraba leyendo un manga hentai, pese a que suene ridículo era un pasatiempo que lo distraía de su hogar disfuncional, al menos por unos momentos.

de pronto se escuchó como la puerta se iba abriendo lentamente dejando ver a su hermana parada en la entrada

- dice mamá que bajes a desayunar- después de decir esto la chica entró rápidamente a la habitación, jaló del brazo a su hermano y lo llevó hasta la mesa del comedor, donde unos momentos después comenzaron a comer

todo iba demasiado normal, demasiado, tord sabía que en cualquier momento todo se iba a descontrolar y el más afectado iba a ser él

- Karina, tord, necesitamos decirles algo- ambos chicos levantaron la cabeza, viendo a sus padres -tord, vas a entrar a la misma universidad que tu hermana-

-¿¡QUÉ!?- la chica se levantó de su asiento completamente enojada - ¡SI MIS AMIGOS SE ENTERAN DE QUE ÉL ES MI HERMANO MI REPUTACIÓN VA A CAER EN PICADA! -

-lo sabemos cariño, pero necesitamos que tu hermano entre a la universidad, o de lo contrario se volverá aún más inútil de lo que ya es- la mamá de tord fue y abrazó a su hija, la cuál se encontraba al borde del llanto

-eres una maldita exagerada- dijo el pelinegro, completamente despreocupado- no sabes hacer otra cosa que no sea llorar--

La madre del noruego se paró de la mesa un poco molesta hasta llegar donde estaba sentado su hijo y jalarlo de la oreja para que quedara parado adelante de ella

- más te vale que respetes a tu hermana, por que ella es lo único que vale la pena en esta familia. No como tú, que eres un maldito inútil que no sirve para absolutamente nada- la mamá del noruego finalizo pegándole una cachetada a su hijo para después mandarlo a su habitación

A tord no le afectaba en nada eso, ya se había vuelto un hábito

Tord pasó el resto del día encerrado en su habitación, ya que su madre le había puesto seguro a la puerta para que no saliera

Simplemente pasaron las horas, pasaron y pasaron hasta que la luna salió.

-me pregunto si habrá chicas guapas en mi universidad- el noruego pegó la cabeza en la ventana- o si hay chicos guapos...- después de decir esto tord se fue a su cama a dormir, mañana iba a ser un día complicado.

This Is Home | TomTordDonde viven las historias. Descúbrelo ahora