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❦ ━━━━━━『𝑺𝒐𝒏 𝒍𝒊𝒃𝒓𝒆𝒔 𝒅𝒆 𝒄𝒐𝒓𝒓𝒆𝒈𝒊𝒓 𝒎𝒊𝒔 𝒆𝒓𝒓𝒐𝒓𝒆𝒔 𝒆𝒏 𝒍𝒂 𝒉𝒊𝒔𝒕𝒐𝒓𝒊𝒂』━━━━━ ❦
Abre sus ojos y lo primero que ve, es a Seung-Hyun dormido con Ming en el pecho, también dormido. Acaricia el cabello de su hijo antes de ponerse de pie para preparar el desayuno. El reloj dice diez de la mañana y agradece que el mas alto se hubiese despertado la última vez que su hijo lloró.
Hace huevo con jamón porque la verdad, le da flojera hacer otra cosa. Se sirve un poco, para comer antes de vestirse. Hoy iban por los resultados de paternidad y dejarían a Ming un rato con sus padres.
-Entonces tu papá dijo, "oh Seung-Hyun eres el hombre más guapo del mundo, tengamos Mingis juntos" y no me quedó más que aceptar- la voz de Seung-Hyun resuena, divertida. Entra a la cocina, con Ming en sus brazos, tomando su biberón de leche.
-¿Qué mierdas dices?- Se ríe, dando un bocado a su comida.
-Le cuento a nuestro hijo como surgió su creación-
-No seas idiota, tiene meses-
-Mejor temprano que nunca-
Ji-Yong rueda los ojos, parándose para servirle en desayuno a Seung-Hyun.
-Vamos, bebé- toma a Ming de los brazos del rizado. -Dejemos a tu padre embutirse como el cerdo que es-
-¿Después puedo embutirte?-
Ji-Yong se sonroja, tapando los oídos de su hijo.
-¡Seung-Hyun!- Le reprende. -No con Ming aquí-
Oye al rizado soltar una risa y él se va a arreglarse y alistar las cosas de Ming. Cambia el pañal de su hijo por uno seco y limpio. Lo viste con un onesie que le cubre hasta los pies y es de manga larga, sobre su cabeza va un gorrito azul con estrellitas blancas.
-Eres el bebé más bello- besa sus mejillas, poniéndolo en la cuna para vestirse.
Primero lava sus dientes y se asea bien, luego elige su ropa. Una camiseta blanca, totalmente lisa y sus jeans, junto con sus vans negras de siempre. Seung-Hyun entra a la habitación, abrazándolo por detrás, ubicando su nariz en la marca aún sin cicatrizar por completo.
-S-Seung- jadea, sintiendo la lengua del alfa pasar por la mordida.
-¿Aún duele?-
Ji-Yong niega, asegurando que estaba bien.
-Vístete rápido, Seungie. Antes tenemos que dejar a Ming con mis papás-
-No quiero dejarlo-
-Yo tampoco- mete ropa limpia y pañales a la mochila del bebé. -Pero no lo podemos llevar al hospital-
Seung-Hyun no contesta, sólo se viste.
-¿Has visto alguna vez a un bebé más guapo?- Ji-Yong abraza a Ming y después se lo pasa a Seung-Hyun. El bebé comienza a llorar cuando deja de sentir a Ji-Yong. -Ow, tranquilo, bebé- besa su cabeza y cierra la puerta.
Como los padres de Seung-Hyun estaban de viaje, le habían dejado el auto para que "cuidara". Deshi estuvo muy emocionado con eso de la llegada de Ming, tanto que él mismo había comprado y puesto un asiento especial para el bebé. Así que Seung-Hyun lo pone ahí, abrochándolo con seguridad.
-¿Primero a casa de tus padres, no?-
-Si, y apúrate que ya es tarde-
Seung-Hyun maneja hasta ahí, como siempre Ji-Yong cantando todas las canciones y quejándose de la gente que no sabía manejar.
Se saludan y despiden rápido de los padres de Ji-Yong para llegar a tiempo. El alfa entra sólo al consultorio seguido de la agente, quien saluda a ambos amablemente. Ji-Yong se queda afuera, esperando por el más alto. No sabe porque tarda tanto, hasta tiempo de leer casi todos los carteles informativos le da.
El alfa sale, secando sus ojos y buscando al más bajo con la mirada.
-Seung-Hyun- susurra, con el ceño fruncido. -¿Estás bien?-
Asiente, abrazando el cuerpo del castaño.
-¿Qué pasó?, ¿qué te dijeron?-
-Creo que... creo que tendremos que conseguir una casa más grande y una cama infantil- dice, desde el cuello del omega.
Ji-Yong sonríe, abrazando al alfa.
*
Pasaron por varias semanas para que Kaede pudiera ir a casa con ellos. Ji-Yong quedó enamorado del pequeño apenas lo vio. Era un bebé muy lindo y llorando por protección. Entre las visitas al juez y con los licenciados el pequeño estuvo presente, fueron casi dos semanas donde el agarró "confianza" con ellos como para dejar que lo cargasen sin llorar. Ahora están yendo a casa, con Ming en su asiento especial, Seung-Hyun al volante y Ji-Yong de copiloto, con el rubio entre sus brazos, durmiendo. Ambos detrás del cinturón de seguridad.
-¡Mira!- Ji-Yong mastica un chicle, leyendo la carpeta con los papeles de Kaede. -Aquí dice que nació el de agosto. Es como ¡Mi gemelo!-
Seung-Hyun rueda los ojos.
-Podría ser como eso de juego de gemelas. Él es rubio y mi cabello es negro con mechones rubios- abre su boca. -¡Él podría ser mi Hally!-
Seung-Hyun suspira, tocando sus sienes. Ji-Yong era un puto niño.
-¿Ya te he dicho que eres ridículo? Aparte, tus mechones rubios, es tinte-
Ji-Yong se ríe, asintiendo y haciendo una bomba de chicle.
-Cada día-
-Pues de nada-
-Aun así me amas- canturrea.
-Si, lo hago- y aprovecha el alto del semáforo, para besar los labios de su omega.
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Creditos a, la cual es la escritora original del Fanfic, se les recuerda si tengo un error de ortografía, informarme en los comentarios de la historia
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Ven aquí, y ámame❑❒Omegaverse❑❒
FanfictionA sus 19 años, Ji-Yong debería estar apoyando a su banda favorita, yendo a centros comerciales a mirar la ropa de temporada que ha llegado, o estar juntando dinero para su graduación de preparatoria. Pero no, a sus cortos -o largos- 19 inviernos, Kw...