⛓️Capítulo 11⛓️

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Por fin descanso para Jennie y Lisa. Estaban en su habitación compartida, el ambiente estaba un poco tenso, había incomodidad.

Ahí estaban las dos en la oscuridad del cuarto, se miraban pero no sé decidían a expresar palabra alguna hasta que por fin la mayor se animó.

—Lisa —dice Jennie para llamar la atención de la rubia. Mientras, se acomoda levemente sobre la cama y pone un rostro afligido. Su seño se frunció levemente y sus ojos se notaban caídos, sin duda se veía tierna y frágil.

—Mmm —la otra responde e inmediatamente la mira dándose cuenta de la expresión que mostraba la contraria. Su cara también era similar y un extraño sentimiento surgía de lo más profundo de su interior, se preocupaba por Jennie y se sentía mal por toda esta situación.

—Ya han pasado como 3 días desde que estoy aquí no? —la castaña miraba a su alrededor como buscando algo, quizá solo fuerza para resistir.

—Si, eso creo, tranquila Jen, estás a salvó junto a mí. ¿Qué te preocupa? —puso la mano sobre el hombro de Jennie y la miró con la misma extención triste que mostraba esta, quería darle apoyo sin dudas.

Los ojos de la castaña se posaron en el rostro de Lisa, específicamente en sus ojos. Esos ojos color miel que con simplemente mirarlos sentía una extraña corriente eléctrica pasar por su cuerpo. Antes odiaba eso, una de las muchas razones que tenía para molestar a la rubia en la universidad.

—Mis padres, ¿Como deberían estar...? Yo nunca me separé tanto de ellos y menos por una situación tan complicada, seguramente fui mala hija, quiero enmendar lo malo que he echo, no sé si salga de aquí algún día... Lis —la volvió a mirar fijamente a los ojos— ¿Escaparías conmigo? —los lindos y gatunos ojos de Jennie estaban aguados, no le gustaba mostrar debilidad pero eso se tornaba imposible de vez en cuando. Tomo con sus dos manos las de la rubia elevándolas a la altura de su pecho. Lisa se sorprendió un poco, dudo en dar su respuesta pero comenzó a hablar con un tono bajo.

—Yo... —tomó una gran bocanada de aire que dejo salir en segundos— Lo siento por tus padres y no creo que hayas sido mala hija, solo algo malcriada como toda niña rica —sonrió, una sonrisa que de alegría no llevaba nada— o eso parece. Emm... En cuanto a escapar —soltó sus manos del agarre y se levantó de la cama caminado de un lado a otro colocando ambas manos en su cabellos, al final terminó parándose frente a la chica— es algo que yo quisiera con todo mi corazón, te lo juro Jen, es lo que más quiero —bajo la cabeza— pero no puedo Kim —sus palabras salían forzadamente de su garganta y Lisa cada vez sentía más que desperdiciaba su vida— sería muy arriesgado, veamos qué pasa con el tiempo. Oí que vamos a viajar, no sé dónde quizá, te liberen no sé.

—¿Viajar?, ¿Eso es posible? Osea y si alguien me reconoce y se forma una revuelta —amplió los ojos y mostró sumo interés en las palabras de Lisa.

—Eso sería bueno para ti —pensó un momento colocando la mano izquierda en su barbilla y el brazo derecho aguantando su codo— o bueno no tanto, Jack es capas de todo por huir de los problemas.

—Y si escapamos en ese viaje —sus ojos se mostraban soñadores, una oportunidad se abría, se levantó de la cama igualmente.

—No Jennie, no puedo escapar ya te dije y asunto serrado —<<Lo quiero, ¿Que pasaría si me voy con Kim?>> pensó Lisa.

—Okey —Jennie bajo la vista desilucionada.

—¡Ah! —Lisa se acordó de su plática con Jackson y decidió decirle a Jennie para animarla tan solo un poco— tengo una buena noticia —la menor sacudió su cabeza levemente para eliminar esos pensamientos de escapar que la atormentaban y concentrarse en Jennie— puede que te guste.

Amante o Secuestrada [Jenlisa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora