Paso como un mes de aquel día Brad no me llamo mas y Connor dejo de hacerlo también, aquello me destrozaba los estaba perdiendo así que un día llame yo al numero de Connor, y para mi sorpresa me decía que el número marcado no existía lo intente varias veces y también lo hice con el número de Brad, Tristan y James, ninguno existía, y desde ese día no volví hablar con ellos.
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Tras unos meses yo casi no pensaba en esos chicos del aeropuerto, los intentaba olvidar aun que no lo consiguiera del todo. Pronto vendrían las vacaciones de navidad, mi familia y yo estábamos muy feliz nos encantaba la navidad y lo pasábamos genial.
El día que me dieron las vacaciones mi familia y yo fuimos a comer a un sitio especial y los días se pasaban muy rápidos, como suele pasar cuando estas a gusto. Por fin llegó el día esperado, la noche vieja, quedaban pocas horas para despedirme de ese año y empezar uno que fuese mejor, o eso quería yo, ese día en mi casa estábamos mi familia y la familia de Lucia y Antonio que se juntaban con la nuestra como todos los años, nuestras madres preparaban un exquisita cena y lo pasábamos genial.
- Clau y Lucia venir.- oí gritar desde la cocina a la madre de Lucia.
- Ya vamos.- contestamos al unísono
- Llevar este rico pastel a la mesa y estos vasos con las uvas que apenas quedan tres minutos.- dijo alterada
- Ya vamos
Empezaron a sonar las campanadas y todo comíamos las uvas intentando no ahogarnos, por fin año nuevo vida nueva, pensé, estuvimos hasta muy tarde hablando y escuchando música que salía por la tele, fui a llevar una cosa a la cocina y empezó a sonar una bonita canción, corrí con todas mis ganas para bien quien era el cantante y poder oírla cuando quisiera y una vez llegue y me plante en frente de la pantalla mis ojos no podían creer lo que estaban viendo.
