Mi amiga me vuelve señorita

La apuesta

Luis es un chico de 14 años que siempre hace apuestas tontas, aunque en este momento hizo una que le cambiaría la vida.

-Bueno Luis, esta es la cuarta vez que pierdes, ríndete.
-Nunca. Ya sé, si pierdo la próxima apuesta, hago todo lo que tu quieras por un mes.
-Ok, acepto- Lo dice Erica con voz confiada-.
Como Erica lo supuso, Luis perdio la apuesta y ahora tendrá que cumplir su parte del trato.
-No puede ser...- Dice Luis decepcionado de si mismo.
-Bien bien, que harás primero?
-No sé, lo que quieras.
-Ya vuelvo- Erica sale sorriendo de la habitación.
Y Luis recibe una llamada de su madre.
-Hola hijo como estás?
-Bien ma, que pasó?
-Solo te queriamos decir que nuestro viaje de negocios se adelanto una semana y hoy nos vamos, hablamos con la mama de Erica y dice que te puedes quedar con ellas el mes.
-QUE?! ES NETA?!
-Es enserio, bueno nos vemos.
-No espe- Le cuelgan.
-Ya escuché el chisme, así que un mes te quedarás conmigo, mmmph, ponte esto.
Erica le tiró unas bragas rosas con diseño de flores y un camisón para dormir.
-No me voy a poner esto.- Dijo Luis serio.
-Mamáááááá dice Luisa que no va a hacer caso.
-¿¡LUISA?! ¿¡DE QUE HABLAS ERICA!?, YO SOY LUIS!!!
Sube la mamá de Erica a la habitación.
-¿Que está pasando aquí?
-Señora Gutierrez, Erica me dice Luisa y que me ponga esa ropa interior de mujer junto con el camisón.
-Pues póntelo al cabo eres su hermanita gemela, son de la misma talla y todo, ya vete a dormir con tu hermana que mañana te vamos a ir a comprar ropita.
-NO INVENTES, ESTÁN LOCAS!!!
-No me alse la voz señorita, que ya grabé como me gritó, si se lo mando a tus padres, tendrá problemas.
-MMMPH...
-Muy bien hermana, ponte lo que te di.
Luis entre enojo pena y tristeza se pone las bragas rosas y el camisón con un gato en el frente.
-Listo, ¿dónde dormiré?
-Junto con Erica.
-Yeiii, hermanas juntas.
-Pues ya que...
En la noche Luis se para al baño y Erica se da cuenta, a lo que se para en cuanto Luis se mete al baño.
Cuando Luis sale del baño, Erica ya esperaba afuera.
-Te bajó hermanita? Te sientes mal?
-Bajó? ¿De qué hablas?, mejor duerme.
Erica le extiende una toalla femenina.
-Tienes que ponerte esto para no ensuciarte.
-No me voy a poner eso Erica, en primer lugar porque ni siquiera soy mujer.
-Si no lo haces llamaré a mamá y tendrás problemas, aparte tomé esta foto.
En la foto se podía ver uan foto de Luis con el camisón levantado, dejando ver las bragas rosas.
-BORRA ESO!
-No, recuerda que debes hacer todo lo que diga, así que ponte esto YA!.
Apuntando hacia la toallita femenina.
Luis la recibe, se mete al baño a ponersela y vuelve a salir.
-Que bien hermana ahora estás protegida.
Ahora déjame tocar bien la parte donde va la toallita, para ver si te la pusiste bien.
-Per...
Luis ya sabía que era imposible resistirse, aunque su subconciente le decía que se defendiera, él no hacían nada para evitar que su amiga de la infancia le revisara una toalla femenina que el estaba usando bajo ropa interior de mujer, siendo él hombre, pero extrañamte al sentir como Erica lo tocó esos pocos segundo, fue más que suficicente para que su aparato reproductor se pusiera erecto.
-Oh vaya parece que tu amiguito despertó hermana. Solo porque pronto dejarás de ser hombre, te complaceré una primera y última vez, talvez, jejeje.
-Pero que haces....
Mientras Luis pronunciaba esas palabras, Erica le emepezaba a bajar las bragas rosas, y empezó a masturbar su miembro.
-De-de-tente.
La excitación de Luis era tal que no se podía mover, Erica aprovechó esto y lo tiró al piso.
-Así te gusta?
-S-si as-í-í.
Erica procedió a quitarse la blusa que usaba para dormir, solo para mostrar un brasier color azul con rayas blancas.
-Pronto estarás utilizando de estos Luis.
Aquella noche fue la última que Luis se sintió verdaderamente hombre.

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Si alguien llega a leer esto que comente que tipo de ropa le gustaría que le compraran a Luis.
(Esto en caso de que no haya subido la parte 2 aún)