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⚠️¡𝘈𝘥𝘷𝘦𝘳𝘵𝘦𝘯𝘤𝘪𝘢!
𝘌𝘴𝘵𝘦 𝘤𝘢𝘱𝘪𝘵𝘶𝘭𝘰 𝘤𝘰𝘯𝘵𝘪𝘦𝘯𝘦 𝘢𝘭𝘨𝘶𝘯𝘢𝘴 𝘦𝘴𝘤𝘦𝘯𝘢𝘴 𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘰𝘤𝘢𝘯 𝘵𝘦𝘮𝘢𝘴 𝘴𝘦𝘯𝘴𝘪𝘣𝘭𝘦𝘴.⚠️

Sentía cada toque en mi piel y todos ellos estaban llenos de lujuria; No había amor ni cariño

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Sentía cada toque en mi piel y todos ellos estaban llenos de lujuria; No había amor ni cariño. El deseo de poseer mi cuerpo de nuevo era lo que incentivaba a ese hombre a hacerme estas cosas; no sólo a mí, sino también al resto de sus esclavas escondidas en su sótano. Con una mano toqueteaba mi desnudo trasero, a otra le estaba manoseando los pechos y por último una tercera se sentaba sobre él mientras le comía la boca. No tenía expresiones ni reacciones; quería escapar, dejar esta pesadilla en la que encontraba viviendo.

James Abercromby, mi esposo, el gran general inglés que me compró a mis padres por una fortuna. El primer mes fuimos esposos comunes corrientes...bueno algo así. Normalmente llegaba a casa tarde en la noche ya cuando estaba dormida, y se iba temprano en la mañana. Casi nunca hablábamos o si nos encontrábamos solo era "buenos días" o "buenas noches".

"Quizás sólo me tenía para ser una tapadera social", eso pensé en aquel momento. Mucha gente lo hacía para mantener su estatus social y conservar limpia su reputación.

Un día compró un vestido para mí y me llevó a cenar en un restaurante popular de Londres. Me tomaba de la mano y abría la puerta del carruaje; por primera vez me trataba como lo que en verdad era, su esposa. Toda la cena fue normal, preguntó sobre cosas personales para conocerme. ¿Por qué había esperado hasta este momento para tratarme así?. Después de comer y llenarme de varias copas de vino me sentía mareada, muy mareada; Jamás había bebido alcohol y mi primera vez fue con él. Tomamos el mismo carruaje con el que llegamos al restaurante y esta vez cambió de dirección; no íbamos a casa.

ㅡ¿A dónde vamos? ㅡPregunté sólo por curiosidad. Él hizo contacto visual conmigo, su ceño estaba fruncido y sus ojos denotaban que no debía preguntar sólo quedarme en silencio. Por temor, me quedé tranquila y esperé hasta llegar a nuestro destino.

Su chaqueta estaba un poco desaliñada, me moví hacia al frente para acomodarla; pero al momento en que iba a tocar su ropa él quitó mis manos con un golpe brusco, me quejé por el dolor producido por tan repentino acto.

ㅡJamás te atrevas a tocarme si yo no lo autorizo. ㅡFue lo último que dijo. Después todo quedó en silencio mientras trataba de aguantar mis lágrimas por su trato tan diferente al que tenía cuando empezamos la noche.

Llegamos a un bar, uno muy alejado de la ciudad; habían muchos carruajes afuera del local, todos ellos parecían costosos en comparación con el exterior. Al momento que entramos lo detallé mejor; estaba decorado muy bien para ser un simple bar, como si este lugar solo fuera para personas de clase alta. Varios hombres de los que estaban allí me comían con la mirada. Me sentía muy incómoda, tanto así que trataba de subir el escote de mi vestido para que no siguieran mirando. Mi esposo los veía y sonreía satisfecho, eso... eso no es normal, ¿verdad?

Our Desired Reliquiarium: Innocence; [sn]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora