Paperhat || ᴅɪᴀs de ᴏᴛᴘ

Día 20

Ruidoso y exagerado

No les voy a mentir, no me acuerdo en que termino el capítulo de esta pareja, así que será algo diferente a la continuación pero tendrá sexo sooo… Espero que les guste

(...)

El calor de dos cuerpos comenzaba a aumentar ante el roce de estos además de los besos sonoros que se podían escuchar en la habitación del jefe de la peculiar mansión.

Estaban en la espaciosa cama del White, siendo este el que estaba bajo Slug como ya era costumbre al no poder dominar al científico, pequeños pero placenteros roces y caricias eran proporcionados por ambos hombres provocando que poco a poco la ropa desapareciera y más piel se exponía para los lujuriosos ojos de los amantes que estaban deseosos por más.

—Mi turno—

Hablo White cuando se separó del voraz beso, tenía que avisar antes de hacer una acción sino Slug se enojaría y lo que tanto deseaba hacer desde hace unos días se prolongaría más.
El científico asintió con su cabeza mientras recuperaba el aire que necesitaba. Ahora que los papeles estaban invertidos el Hat podía estimular a su malhumorado científico.

Besos y lamidas eran repartidos por su cuello, pecho y seguía descendiendo hasta llegar a la mejor parte, bajo los boxes de Slug y su pene erecto hizo presencia. White se relamió sus labios antes de meterlo a su boca y comenzar una felación con un ritmo rápido además de tener lamidas por todo ese pedazo de carne.
Slug no podía evitar dejar salir jadeos con un volumen considerable que podrían parecer gemidos.

—¡Si!... Mnhg~… ¡Así!—

La parte superior de su cuerpo se estremecía por las olas de placer que sentía al ser atendido en aquella erógena zona, el Hat detuvo los movimientos de su boca así como los de su lengua pues no quería que su pareja terminara de esa forma, una sonrisa ladina apareció en su rostro.

No acostumbraba ocupar esos tentáculos de su energía y tampoco someter a Slug pero esta vez sería una de esas pocas veces que podría tener el control en el sexo. Esto era la idea que tenía en mente hace días.
Las manos de Slug ahora estaban sujetadas por aquellos tentáculos azulados con una luz estilo neón que daba un toque erótico al momento.

—¿¡Pero que mier…!?—

No pudo terminar de hablar pues su cuerpo había sido girado de manera rápida y firme, su trasero levantado poyado por sus rodillas mientras que el resto de su cuerpo lo apoyaba en sus codos y brazos y por supuesto de los tentáculos.

—¡White Hat, suéltame!—

-Lo siento cariño pero es mi turno de mandar, así que te recomiendo que cooperes conmigo amor-

—¡Deja de bromear! ¡Libe…ra…me!—

Su voz se quebró cuando sintió la lengua del Hat lamer una de sus nalgas, agacho su cabeza; no tenía oportunidad ya que iba enserio su novio pero también porque le gustaba su lengua bífida.
Después de deleitarse con esa montaña de tono canela clara, decidió ir al punto; literalmente. Dio una lamida en aquella zona para lubricar la entrada y poder adentrar su lengua poco a poco.
La lengua bífida salía y entraba a un ritmo considerable, tocando esa bolita en el interior del científico provocando gemidos por parte de este y poco después sus piernas comenzaban a temblar, el sentimiento que algo iba a salir y su pene temblar. Su cuerpo le estaba avisando que el orgasmo estaba por llegar.

—¡Detente!... ¡White Hat!—

El mencionado utilizo otro de sus tentáculos comenzó a masturbar al miembro del científico mientras que su lengua bífida se concentraba en aquel punto.

—¡AAhhh!—

Aquel gemido alto fue lo que quería escuchar el Hat, además del peculiar aroma de semen de su amante y tener de vista su cuerpo cansado y sus piernas temblorosas por el orgasmo, White Hat acerco el tentáculo que estaba manchado con la esencia de Slug a su rostro para poder lamer un poco del blanquecino líquido. Sonrío, una sonrisa satisfactoria por realizar su plan pero esto era una parte de este. Reafirmo el agarre de sus tentáculos en las muñecas de Slug para mantenerlo en ese estado mientras el abría sus pantalones y los retiraba, haciendo caso omiso a las quejas de su querido novio.
Se posiciono tras las nalgas y piernas, sostuvo su gran hombría colocándola cerca de esta casi dilatara entrada y sin previo aviso ingreso en esta con una estocada, White Hat gruñido de placer y apretó una nalga de Slug, mientras este se aferraba con uñas a la cama y un sonoro gemido salió de lo más profundo de su garganta que dolió. Sus piernas temblaban más que todas las gelatinas juntas.

—Hijo de… Su puta madre—

—Aww, ¿A mi científico le dolió?—

—¡AAHH! ¡WHITE HAT! ¡AHH!—

Las embestidas comenzaron, rápidas y profundas tomando por sorpresa a Slug que mordió la almohada. No quería admitirlo pero se sentía muy bien pero también estaba confundido pues White Hat nunca lo había hecho así.
El mismo sentimiento de antes de volvía a hacerse presente en su cuerpo y solo bastaron un par de embestidas para que volviera a venirse pero aun así, su novio no había parado sus movimientos de cadera.

—¡Idiota! ¡Detente!... ¡Mngh! ¡Estoy corriéndome! ¡AAH!—

Pero sus quejas o suplicas no fueron escuchadas así es como su cuerpo fue desecho por todas las veces que lo hicieron, el miembro de su pareja no parecía bajar. ¿Por qué tenía tanta energía hoy?

¿Por qué no lo había hecho así antes?

Slug ya conocida cada extrema de la cama, fluidos de ambos amantes estaban esparcidos por las sabanas, el científico solo suplicaba que no comenzaran fuera de la cama pues su cuerpo ya no soportaría más. Como ahora, sus manos seguían siendo sostenidas por unos tentáculos pero esta vez era tras su espalda, sus piernas las mantenían más abiertas de lo que estaba acostumbrado por otros de esos azulados tentáculos y por último, otro lo estaba sostenido por su cintura para poder subir y bajar su cuerpo, ayudándolo a montar al Hat que estaba acostado en esa cama mientras disfrutaba de la vista.

El hermoso cuerpo de su científico, con marcas más que visibles y mordidas en los muslos internos, pecho y abdomen así como ver como una cantidad de su semilla se derramaba del interior de Slug cada vez que su cuerpo subía, ¿Razón? El pene del Hat no había dejado de correrse dentro del interior de Slug, dejándolo más lleno que pavo en navidad. Mientras su rostro era todo un deleite, mientras seguía disfrutando de las embestidas.

—Amor, estas muy lleno. Estoy seguro que lograría embarazarte—

—¡Aahh! Solo termina ya… Mmngh—

Como lo pidió, el ente de luz se derramo por última vez en esa madrugada al igual que el científico pero el lechoso líquido parecía más como agua. Los tentáculos se fueron, soltando el cuerpo del moreno con cuidado y que terminara sobre el pecho del albino y este salía con cuidado del interior de su pareja. Slug hizo una mueca de molestia por las pequeñas gotas de sangre que salían.
Slug sentía que se moría, mientras que el Hat estaba cansado así que tuvo las fuerzas para cambiar las sabanas con su magia, acomodar a su amante y taparse. La pareja no desperto hasta la tarde del día siguiente.