Capítulo 4

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Voz de la narradora

Billy la tomó fuertemente de la cintura, cuando intentó huir por un lado de él, escondió su cara en su cuello respirando desagradable olor a miedo.
-no tengas miedo yo nunca te dañaría- aumentando el agarre, para que dejará de temblar.

-nunca- dando lentos besos en el cuello de ella.
-¿qué es todo esto?-
-solo mi pequeña colección- sin dejarla responder la tomó en sus fuentes brazos, encaminándose hacia la salida de la habitación.

Ashley se dio cuenta que la llevaba hacia la habitación cuando subió con ella las escaleras.

Voz de Ashley

Está vez si tenía mucho miedo, de lo que me podía hacerme, siempre se ha sabido desde tiempos ancestrales, que cuando un lobo encontraba a su mate, podía confiar ciegamente en uno al otro, no todo lo que me contaba mi abuelita es verdad.

Si no porque mi mate tiene un millón de cosas que había usado en mi vida cotidiana o porque me está amarrando en la cama.
Como saldría de esta, no se luchar menos defenderme de alguien mucho menos de alguien tan grande como Billy.

Las ataduras están bien hechas lo bueno es que no me lastiman las muñecas.
Con tengo el aire al ver como Billy se quita la ropa hasta quedar desnudo ante mí, está muy excitado.
"seré violada" se que no tengo la mínima posibilita de huir, no conozco este bosque y por lo que me dijo el está llena de lobos salvajes.

-Ahsley yo nunca te haría daño- como no, si me esta prácticamente arrancando la ropa dejando me sin nada.
Su áspera mano acaricia lentamente mi muslo hasta arriba, tengo que hacer algo.

-aguarda, me prometiste respuestas- se detuvo.
-claro, puedes preguntarme lo que quieras, con toda confianza amor- su sonrisa hermoso, si que es hipnotizante.
-¿desde hace cuánto tiempo me conoces?- intento de ignorar cuando pone mis piernas en sus caderas, rodando nuestras intimidades.

-desde hace más de cinco años-
"queee escuche bien"
-¿cómo?¿dónde?-
-estaba en una misión a Francia, cuando inspeccionaba la zona donde me alojaba, vi a una hermosa niña de grandes risos dorados y piel blanca de ojos azules en un parque en ese entonces y a tus putas primas que te estaban usando como puente para los grandes charcos de lodo- moví mis caderas por que el agarre de Billy se intenficaba.

-Lo siento- Billy acaricia en los lugares donde me había agarrado con fuerza.
-sabes tengo un vago recuerdo de ese día, mi querida abuela me había comprado un vestido nuevo, después de ese día mi vestido quedo inservible-
"como amaba ese vestido"
-en ese entonces tenia quince años, no dejaba de mirarte desde entonces, además me vengue por ti- un minuto
-entonces ¿tu fuiste?-
-el del panal de abejas, si fui yo- se inclina sobre mi pegando su pecho al mio.
-tus primas quedaron irreconocibles por tanto que les picaron las abejas-

-eso fue muy cruel-
-se lo tenían merecido- sentía su cálido aliento en mi barbilla, poniéndome la piel de gallina, sobre todo mis pezones.
-¿que clase de misión estabas?-
-estaba entrenando con mis maestros-

-¿maestros? Dijiste que estabas solo-
"acaso serán unos psicópatas o unos violadores"
-lo estaba- Billy toma mis manos, le devuelvo el apretón, en sus ojos solo miro pura sinceridad.
-me acogieron cuanto estaba más solo que nunca, ellos son como mis padres- en su voz estaba tanta nostalgia que se me había olvidado porque estaba amarrada, me rodio con sus brazos dándome un fuerte abrazo.

Nuestro lazo de compañeros hace que sienta sus sentimientos, su dolor, su necesidad por mi.
-Billy podías por favor desatar me- sin despegar su pecho del mio rompió las ataduras de mis manos.

MI PropiedadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora