Capítulo 1

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Notas antes de leer: La historia comienza en algún momento de marzo 1982, Harry tiene un año y ocho meses de edad; estuvo con los Dursley unos cinco meses.

Un pequeño bebé había despertado asustado, él sabía que no podía llorar, tomó la única manta que tenía y sin sorprenderse, la puerta de la alacena debajo de las escaleras (donde dormía) se abrió. Quería leche, pero al llegar a la cocina vio por la ventana que daba al patio trasero y decidió salir, nuevamente la puerta al patio trasero cedió, comenzó a gatear (no había nada en que apoyarse para caminar) no sabía hacia donde iba, así que siguió y siguió gateando.

Rosalie en ocasiones solía caminar cerca de las casas, su auto control por la sangre humana había mejorado bastante con el tiempo, le gustaba imaginarse en una vida suburbana con Emmett (su esposo), escucho un leve gimoteo... muy bajo... muy cerca... camino hacia el leve llanto, vio a lo lejos un bebé, podría tener un año o dos, éste en cuanto vio a Rosalie le sonrió y ella se enamoró de él, lo tomó lo mejor que pudo en brazos y secó las lágrimas de sus mejillas, el pequeño bebé se acurruco en el frío regazo de ella.

Rosalie comenzó a olerlo y siguió el rastro, llegó hasta una casa con la puerta del patio trasera abierta, no podía simplemente dejarlo ahí, ya estaba dormido, así que se lo llevó a su casa.

Cuando llegó lo llevó hasta su habitación a hurtadillas, bajo a la sala y vio a su familia reunida.

– Estas loca Rosalie – Le dijo Edward una vez que este había leído su mente.

– Callate.

– Bien dejare que lo expliques.

– Rosalie ¿Qué pasa? – Pregunto Esme y luego vio que Alice salía de un trance y sonreía enormemente, ansiosa de que Rose, contará la historia. Comenzó entonces con su relato, finalizando con una frase...

– Quiero quedármelo.

– Rosalie no es como si hubieras rescatado un perrito, es un bebé, no puedes quedarte con él – Comenzó Carlisle.

– Su familia ni siquiera se dio cuenta que el niño salió, en mi opinión son malos padres – Todos comenzaron a discutir y pronto comenzaron los gritos, hasta que escucharon un leve gimoteo.

– Vamos a tranquilizarnos todos – Les dijo Esme muy tranquila y pacífica a sus cinco hijos adoptivos y luego se dirigió a su esposo – Carlisle ve a calmar al bebé; Edward ve con Emmett a comprar algunos biberones, vasos entrenadores, varios tipos de leche en polvo, para un año o dos; Rosalie y Alice irán a esa casa a vigilar y en cuanto vean que se preocupan por el bebé, vendrán por él y lo dejaremos cerca de la propiedad. Jasper, ven conmigo a calentar agua – Todos comenzaron a moverse.

Cuando Rosalie llegó a la casa junto con Alice, se dispusieron a vigilar y escuchar atentamente algún sonido, hasta que Rosalie se hartó y decidió entrar, Alice estaba asustada de que la descubriera (aunque su instinto aventurero la incito a seguirla) al entrar por la puerta dieron con una cocina pequeña donde una barra dividía al comedor de ésta, junto estaba la sala formando una L, Rose se guio por el olor del bebé hasta llegar a una alacena debajo de las escaleras, junto a la sala que era dividida por una pared y puerta; no había nada ahí, solo un pequeño colchón roto de una esquina y algunas sábanas , Alice tenía otra visión del futuro, pero no quiso decirle nada a Rose.

Escucharon en los pisos superiores un llanto, tenían otro bebé, aún con la gran velocidad que tenían, harían mucho ruido al salir de la casa, por lo que se escondieron en la sala, veían como una mujer bajaba con un bebé, parecía de la misma edad que el que Rose había tomado, pero sus rasgos eran muy diferentes, vieron que la señora calentaba leche mientras el bebé lloraba y pataleaba. Cuando ya tuvo su biberón, apagaron las luces y se iban yendo; la mujer al pasar junto a la alacena (que había quedado semiabierta) solo la azotó susurrando:

dance with the nightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora