Notas antes de leer: Primeramente, va dedicado a mi sobrino que me ha servido de inspiración, algunas anécdotas escritas son reales, hace unos años lo tome para describir a un bebé y ahora lo hago para un niño pequeño.
Ahora bien, como es un fic y en un fic todo puede pasar, me apetece que en este universo los vampiros si pueden dormir, ahora mismo aclarare un poco del ¿Por qué? ¿Y cómo?
Bueno, el dormir para cualquier ser vivo, es para descansar y recobrar fuerza al cuerpo, así como al cerebro; utilizare el sueño en los vampiros, no para un descanso corporal, si no un descanso mental, cuando existen muchas cosas que perturban a la mente, pero como el cuerpo no necesita descanso y por ende no despertar, alguien debe cuidar del sueño del vampiro, con un leve sonido se puede despertar, ya con la mente fresca. Y lo hago porque lo necesito para algunas escenas lindas..・゜゜・.・゜゜・.・゜゜・.・゜゜・
Desde la plática que habían tenido con Tanya, se decidió que tenían que enseñarle a Harry gaélico que era el idioma que se habla en Escocia, por lo que Esme y Tanya le hablaban en inglés durante las mañanas y cuando todos iban llegando comenzaban a hablar en gaélico, a Tanya le servicia para perfeccionar el suyo. Los fines de semana Harry decide que idioma hablar ¿Cómo? bueno, con la primera palabra del día que él dijera, ya fuera inglés o gaélico, normalmente y la gran mayoría de fines de semana, Harry siempre hablaba el segundo.
Cuando llego el segundo cumpleaños de Harry, se reunieron para celebrarlo, compraron un enorme pastel que tenia la imagen del elefante Dumbo y su amigo el ratón Timothy sosteniendo una pluma de cuervo. Decoraron con banderines triangulares y muchas cosas y posters de un circo.
Tanya había practicado con Harry como soplar a las dos velas de su pastel durante días previos.
Todos cantaron el "Feliz cumpleaños" y cuando terminaron, Rosalie tomaba un cuchillo y lo ponía en la mano de Harry, ambos partían el pastel, Alice tomaba fotografías de aquí a allá, dieron a comer a Harry dos rebanadas de pastel y cada uno con su respectivo obsequio lo ayudaban a abrirlo, la sala pronto se convirtió en una montaña de envolturas y juguetes.
El pequeño era tan feliz que jugaba de un lado a otro, y todos jugaban con él y lo animaban a bailar con Alice y Edward, Emmet lo tomaba en brazos y cantaban "Un elefante volar", todos aplaudían y cantaban con ellos, ya que Harry veía esa película al menos 5 veces al día. Todos estaban artos de la película, podían recitarla de memoria, pero su niño no se aburria de verla.
Finalmente, a la una de la mañana era hora de que Harry fuera a dormir, Rosalie y Esme fueron a acostarlo y cantarle una canción de cuna. Cuando todos se reunieron en la sala, se repartieron el aseo, entre eso: el de pastel embarrado en la pared y mesa, juguetes regados por la sala y envolturas rotas, entre muchas otras cosas, como un Jasper embarrado de pastel. Esto ocurrió porque Alice quería embarrar a Rosalie, y Emmet también quería, Harry fue separado del trio por Esme y cuando Alice aventó el pastel parte de éste termino en la pared y en Jasper.
Unas semanas después del cumpleaños de Harry, Rosalie estaba en su habitación del pequeño doblando su pequeña ropita y le encantaba hacerlo, aun cuando al doblarla se desdoblaba por lo pequeña que era y por los materiales de esta.
Escucho que Harry reía y venia corriendo hacia la habitación, cuando la puerta se abrió, éste comenzó a gritar:
– Mami doce, mami doce, ti Eddy mao, ti Eddy mao – (Mami rose, mami rose, tío Eddy malo, tío Eddy malo) reía y se subía en ella, mientras ella lo sostenía y veía como Edward entraba con las manos como garras y encorvado, Harry solo rio más y se aferro a Rose como queriendo escalarla.
– No soy tío Eddy, soy el monstruo de las cosquillas.
– Oh monstruo de las cosquillas, ¿No quisieras un cómplice?
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dance with the night
Roman d'amour¿Alguna vez se preguntaron si el sueño de Rosalie se volviera realidad? Los invito a descubrirlo. Rosalie encuentra a Harry cerca de Privet Drive, convencerá a su familia de quedarse con él y luego hacer todo lo posible por criarlo. Aunque hay cosas...