4

45 12 0
                                    

Esa voz se pasea entre sus sueños, pronunciando su nombre, dejándolo sin aliento al despertar, pero no solo eso, si no que despierta emergido de sueños grotescos, extraños en los que de alguna forma Min Gi se cuela.

Despierta envuelto en una maraña de sábanas y cobertores sin saber cómo hace para enredarse entre tanta tela.

Intranquilo, aún sintiéndose cansado se levanta cada mañana. ¡Dios! Sólo espera poder terminar las canciones para el álbum lo más pronto posible.

Ya es lunes y en la sala de ensayos todos estan listos para la práctica, excepto su líder, quien se encuentra en el estudio debatiéndose entre hacer una vídeo llamada para verlo al fin, o simplemente llamarlo y escucharlo, soportando las ganas de verlo, es algo que realmente le martilla la cabeza.

Quiere terminar las canciones lo más pronto para alejarse de la fuente de sueños y hormigueos en sus labios. Pero luego se encuentra debatiéndose entre verlo al menos en una pantalla.

Soy masoquista, piensa.

Creyó que podía soportarlo, pero han transcurrido 2 intensas semanas de idas al estudio, llamadas con extraños cambios de comportamiento en Min Gi que lo hna tenido al borde del colapso.

Yunho deja la sala de ensayos para dirigirse al estudio en donde encuentra a su pequeño amigo decepcionado, pues la llamada ha sido todo un fracaso, nadie apareció del otro lado.

–Hongjoong –le llama, asomando la cabeza por el espacio de la puerta. Yunho lo observa con párpados entrecerrados, con una ligera sospecha de lo que sucede.

–vamos a comenzar – le avisa, pero el pequeño continúa cabizbajo en el asiento, por lo que cierra la puerta tras de sí y toma asiento en el sofá junto a su amigo, y al no recibir respuesta decide ser más directo –¿qué tienes? –le pregunta.

El líder voltea y lo mira con ojos llorosos, seca sus lágrimas con la manga de su suéter, sorbiendo su nariz.

–Aún esa sensación en mis labios no desaparece –dice, iniciando un nuevo llanto – es extraño... Despierto cada mañana de esa manera.....y ahora es mucho peor porque el esta lejos pero escucho su voz....y sueño con él – intenta secar sus lágrimas con insistencia una y otra vez, pero no para de llorar del todo.

–¿y así querías hablar con él? ¿llorando? –le reprocha Yunho atrayéndolo y abrazándolo fuerte.

Yunho piensa en todas las cosas que han sucedido, todo lo que han superado juntos y ríe con tristeza, lo aleja y tomándolo del rostro para verlo mejor le dice:

–Supongo que ese beso fue realmente bueno, ¿no?– ríe divertido al verlo acongojado y lloroso, Hongjoong se une a su risa secando sus lágrimas.

–Fue un accidente– se defiende, aún intentando borrar los vestigios de su llanto.

–Por lo que me contaste eso no fue un accidente– le dice un Yunho burlón, levantando sus cejas una y otra vez, haciendo avergonzar al pequeño, sonriendo enternecido por un Honjoong tan vulnerable.

–Vamos cálmate, ya debe estar por llamarte.

–Hice una vídeo llamada- dice el pequeño.

Yunho amplía sus párpados de la sorpresa, y luego los entrecierra para lanzarle una mirada acusadora.

–¡Pero me dijiste que el nunca contesta!.

–Quería intentarlo- le aclara Hongjong con un deje de tristeza en su voz.

Yunho sonríe con nostalgia recordando el día en que llegó a KQ.

Su amigo es muy pequeño y al verlo pensó que era muy adorable, muy al contrario de su personalidad, directo y arisco la mayoría del tiempo pero no con el, si no con cierto miembro que luego se unió al equipo, que siempre lograba sacarlo de sus casillas de alguna forma pero con el que componía con facilidad pues ambos sabían en que dirección querían virar.

–Lo resolverás pronto si hablas con él. No te aflijas. – lo reconforta con unas palmaditas en la pierna y decide marcharse.

Esos dos pronto lo resolverán ya sea hablando o estando en modo acción.

Yunho se marcha dejándolo más tranquilo.

Luego de ese fatídico día, volvió a escuchar su voz por teléfono, de hecho, escuchó su voz durante todo el mes de enero.

El rapero iba y venía entre sus sueños borrosos algunos y, nítidos otros.

Una madrugada despertó de uno de tantos sueños en que lo besaba con desesperación. Suspiró y se levantó por un vaso con agua y volvió a su cama intentando recuperar el sueño.

Sí, recuperarlo, pues quería saber qué pasaba luego, qué sucedía luego, ¿quedaban como antes, siendo solo amigos? ¿seguían fingiendo que nada pasó como en la realidad?

La ansiedad lo carcomía cada día.

**********†************†*********†********†*******†****

¡¡VOTEN Y COMENTEN!!

INNEGABLE (corrigiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora