17. La escena

1.4K 145 97
                                    


Otra mañana típica de oficina. Me encontraba en una reunión sobre...ni yo mismo lo sé, llevo tantas que los temas se me van mezclando.

El caso, allí sentado mientras veía a uno de los asesores soltando cantidad de datos que yo iba apuntando sabiendo que después tendría que descifrarlos por que ahora no estaba prestando mucha atención y sentía que me iba a quedar dormido.

Liam, Zayn y el ochenta por ciento de los asistentes parecían exactamente igual que yo, creo que incluso alguno estaba pintando algo en su libreta y no eran precisamente números y el que estaba a mi lado empezó a jugar al Candy crush.

La sala tenía un ambiente denso y pesado, todos los presentes queríamos que finalizara esta tortura de una vez por todas pero el asesor no parecía dispuesto a dejar que nos fuéramos.

-Señor Tomlinson- Rose entró- le están esperando en su despacho.

Gracias universo, intenté ocultar la sonrisa de satisfacción de poder acabar con esto y poder salir y Liam y Zayn maldijeron.

Fui directo hacia mi despacho esperando ver a quién había sido mi salvador al que le debía que me hubiera salvado del ridículo de quedarme dormida en plena reunión pero al verla quise volver: Camile.

-Camile...Harry está en una reunión con un notario.- dije mientras me sentaba en la silla

-Lo sé, vengo a verte a ti- Rose se había marchado y que me dejara sola con ella no me gustaba un pelo.

-En ese caso ¿En que puedo ayudarte?

-Creía que te lo había dejado claro el otro día y que tu lo habías entendido.

-Camile no te entiendo

-Ayer Harry fue a tu casa.

¿Cómo lo sabe? ¿Se lo ha dicho Harry?

-¿Cómo....?

-¿Lo sé? Tengo una aplicación en el móvil de Harry que me dice dónde está en cada momento

- ¿Lo sabe él?- a mi no me interesa pero a mi no me gustaría que Eleanor me pinchara el móvil

-Eso da igual- eso es un no- Te dejé bien claro el otro día que no te acercaras a Harry y para mi sorpresa descubro que ha estado en tu casa.

- Camile de verdad que te entiendo perfectamente por que yo he pasado por exactamente lo mismo, se lo que son los celos, la impotencia y el miedo...Pero tienes que entender que trabajo con él y eso implica un mínimo de contacto.

- ¿Eso implica que vaya a tu casa?

Suspiré con paciencia y me di cuenta de que la reunión había acabado y ciertos curiosos se estaban arremolinando cerca para enterarse.

-Camile- bajé el tono de voz- ahora no voy a hablar de esto. Ayer Harry vino a entregarme unos documentos urgentes que necesitaban mi firma, ya está.

-¡¿Te crees que soy tonta?!

Me removí incómodo, todo el mundo estaba mirando. Incluso Harry que acababa de salir de su reunión con el notario y nos miraba con una ceja levantada desde su despacho.

-Camile voy a invitarte a que te marches y la próxima vez que quieras hablar de esto que no sea en la oficina.

-Se perfectamente que quieres estar otra vez con él pero no lo voy a permitir.

-Camile te lo repito por última vez te entiendo a la perfección pero Harry y yo trabajamos juntos y aunque no me haga mucha ilusión esto conlleva que tenemos que hablar de vez en cuando.

- y yo te lo repito por última vez aléjate de Harry, tuviste tu oportunidad y por tu falta de confianza e inseguridades adolescentes la desperdiciaste así que ahora déjanos.

Esta tía está de atar. Realmente me planteo que sea una loca que se haya escapado de un manicomio o algo así.

-¿Tener confianza es ponerle una aplicación para localizarle en todo momento?- Boom

-Me ayuda a alejarle de omegas cómo tú- la gente de fuera contuvo el aliento, lo habían oído.

-Fuera, ya o llamo a seguridad- dije intentado estar lo más tranquilo posible para no alterar más la situación.

Esta vez ella hizo un gesto de desdén y se marchó.

En cuanto tuve un par de segundos intentando calmarme y fuera los demás habían vuelto a sus puestos entre cuchicheos.

Salí de mi despacho y me dirigí al de Harry. Dentro Rose que le acababa de entre un café le miraba sonrojada y él sin hacerla caso contestaba a un correo.

-Rose, vuelve a tu puesto- dije borde por el enfado que estaba intentando contener. No la pago para que esté todos los días babeando por Harry.

-Si, señor Tomlinson- respondió bajando la cabeza.

Una vez que me quedé solo con él, me miró.

-¿Qué puedo hacer por ti?

-Dile a tu omega que ni se la ocurra volver a montarme una escenita en el trabajo. ¿Sabes la vergüenza que he pasado? Harry me pongo en su lugar de verdad que sí porque yo he sentido lo mismo que ella pero esto ya ha sido demasiado.

Le dio un trago largo a su café y suspiró

-¿Que te ha dicho?

No soy tan rastrero como para decírselo y hacer quedar a Camile tan desesperada ante él por muy mal que me caiga.

-Nada que no tenga que quedar entre nosotros.

-Hablaré con ella aunque me hace gracia.

- ¿Ah sí? Pues yo sigo intentado encontrar el chiste- respondí molesto ¿le hace gracia? Toda la planta se había enterado de lo que había pasado y ahora voy a ser la comidilla de todos.

- Acabas de echar a tu secretaria de aquí por estar celoso y dices de Camile.

-Eres el ser más absolutamente egocéntrico del mundo Harry Styles.

Cerró su portátil y me dedicó una media sonrisa.

-No todo gira entorno a ti, deja de pensar que todos y cada uno de mis actos van dedicados a ti, porque no es así. Tú no eres el único que ha rehecho su vida, yo tengo mi alfa, mi trabajo y mi familia, ya no soy el omega de diecisiete años que se ponía rojo en cuanto le mirabas y que babeaba por ti por las esquinas. Ya va siendo momento de que lo asimiles y lo entiendas.

Su sonrisa se esfumó al instante

-Y repito dile a Camile que no voy a permitir ni una sola escenita más- y me fui

Ese virgen fue mío (Larry stylinson, omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora