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🥀  ⟆࣪  Dulce conejo.

ー¿Vienen o no?ー preguntó Miu, la cual se encontraba en el receso pidiendo ir al casino.

ーMe apunto, antes me agradaba mucho ir al casino.ーrespondió Ryoma.

En realidad Miu solo quería ir al casino para trucar las máquinas y ver las caras de decepción en todos al no ganar nada.

ーA mí no me engañas copia barata de Souda, ¡Vas a trucar las máquinas!ーexclamó Kokichi llamando la atención del mencionado mecánico que soltó un "¡Hey!" generando unas risas en el mentiroso.

ー¿C-Copia barata de S-Souda?ーrespondió Miu sudando.

ー¡Ni que fuera tan malo!ーgritó Souda ofendido, el cual se encontraba platicando con sus compañeros de clase.

ーMe apunto al casino, ¡Suena divertido!ーdijo la pianista con alegría, en su poca estadía en la clase se había hecho amiga de casi todo el salón así que se alegraron por su unión a la salida.

Al llegar al lugar la alegría del grupo bajó un 98%, era un casino abandonado con todas las pintas a que estaba embrujado.

Sí, el 2% de emoción eran de Kaede y Kaito que no perdían el positivismo natural que tenían.

ー¡Vamos, no puede ser tan malo!ーdijo el astronauta entusiasta mientras temblaba de pies a cabeza debido al escalofriante aura del lugar.

3s tu c.lp4…

ーVamos, ¡suena divertido!ーexclamó Kaede con entusiasmo.

ーEste lugar parece uno donde prostituirian personas.ーrió jocosa la Inventora intentando ocultar el temblor de sus piernas.

ー¡No seas asustadizo! Vinimos hasta aquí por la cerda de Miu que ella se haga cargoーbufó Kokichi divertido.

ー¿C-Cerda?ーpreguntó la Inventora sudando.

Ignoraron el pequeño pleito del mentiroso y la rubia para adentrarse en el antiguo casino en busca de algún lugar "habitable" sin éxito.

ー¡Todo es culpa de la estúpida de Miu, ella nos dio esta idea!ーdijo el mentiroso intentando generar otra discusión con la Inventora, la cual, a su sorpresa no respondió a su insulto.

La chica se encontraba en alguna especie de trance, negaba constantemente que una mujer tan inalcanzable como ella siquiera se digne a escuchar palabras de una "perra" como ella, o así la llamaba la inventora.

Pensar en eso le molestaba, utilizar su valiosa inteligencia en pequeñeces como esas le sacaba de quicio, hizo una mueca de desagrado para seguir con su "pequeño" debate mental. Calmar a la clase y hacerte amiga de todos no era una tarea fácil, Kaede pudo hacerlo en solo una semana y eso le llamó la atención, todos la amaban y querían ser sus amigos; ¿sentía envidia? ¿la inalcanzable Miu Iruma sentía envidia de una perra que llegó hace una semana? La respuesta es: no. No sentía ni un poco de envidia, una mujer como ella no podría sentir envidia por otra, estaba sentada en el trono con todo el mundo a sus pies, por supuesto que no era envidia lo que sentía, o eso quería pensar.

Kokichi carraspeo con molestia.

ーDije que, todo esto es culpa de la estúpida de Miu.ーdijo recalcando las palabras "estúpida" y "Miu".

ー¿¡A quién le dices estúpida cara de rata!?ーdespués de mucho tiempo, Kokichi se sorprendió. Estaba completamente atónito al punto de que su mandíbula estaba por tocar el suelo, no pudo articular palabra al ver a la Miu que tenía delante, ella había respondido a su insulto sin ponerse nerviosa y tartamudear. Por supuesto que, nadie más noto este fenómeno antinatural que se presentaba ante ellos pero el pelimorado había grabado este momento en su mente como "la escena más extraña que ví en mi jodida vida" guardado en un gran portafolio color rosa que resaltaba entre todos los demás documentos sin mucha importancia, sí, el joven mentiroso tenía sus memorias guardadas en forma de portafolios sobre una gigante estantería.

Miu lo miró con desagrado al ver la expresión confundida del chico para seguir escuchando a sus compañeros discutiendo a qué lugar irían ya que en el que se encontraban no era muy humanamente posible habitar.

ー¿Y si vamos al parque?ーcomentó Kaede con entusiasmo, a lo que la mayoría estuvo de acuerdo y terminaron yendo al parque más cercano.

ー¡Ven cerda! Tienes que comprarme todos los dulces del carritoーle reprochó el mentiroso señalando al carrito que pasaba por el parque con bocinas haciendo sonar canciones infantiles.

ー¿C-Cerda?ーrespondió sudorosa la inventora con nervios.

ー¡Mira Miu ese se parece a ti!ーantes de que pudiera aceptar los reproches de Kokichi y entrar al infierno de su billetera Kaede la jalo del brazo mostrándole una pequeña brocheta dulce con un conejo sobre ella.

ー¿Un conejo? Miu es todo menos esoーexclamó Kokichi con falso enfado por la inventora al no comprarle dulces siendo interrumpido por la mano de esta tapándole los labios para que no dijera una palabra más, el chico enojado empezó a lamer su mano esperando a que la sacara, cosa que para su desgracia no pasó.

Kaede compró la brocheta ofreciéndole ésta, Miu dudo unos segundos pero terminó aceptándola de mala gana sin tomarla.

ーA-Acepto tu ofrendaーsacó la mano de los labios de Kokichi, la cual ya estaba toda chupada y se la pasó por el rostro al mentiroso para limpiarse haciendo a Kaede soltar unas risas, acercó su rostro a la brocheta y se la comió sin tocarla por miedo de "envenenarla" con la saliva del mentiroso.

🥀  ⟆࣪  Dulce conejo

La melodía de nuestras memorias. || IrumatsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora