𝔻𝕖𝕤𝕡𝕦𝕖𝕤 𝕕𝕖 𝕝𝕒 𝕥𝕠𝕣𝕞𝕖𝕟𝕥𝕒 𝕓𝕚𝕖𝕟𝕖 𝕝𝕒 𝕔𝕒𝕝𝕞𝕒

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Nagisa se sentía tan cansado...pero a su vez tanta paz por una vez en toda su vida se sentía ligeramente feliz.

No tenía nada de dolor y un sentimiento de bienestar pero eso era acompañado de un frío atroz y una tristeza que lo invadía.

No escuchaba nada pero sentía que alguien lo quería despertar pero se negaba a eso...no quería volver a la realidad que vivía.

Cuando abrió los ojos ya no se encontraba en el suelo del baño estaba recostado en uno de los muebles de su sala.

Se preguntó quién lo había encontrado, cuido y envolvió sus brazos con vendas que tenían rastros de sangre, no tan visibles.

¿Quien lo había salvado?

Su pregunta fue rápidamente resuelta cuando observó un chico de cabellera roja al que conocía muy bien saliendo de la cocina.

Karma al darse cuenta que su amigo ya habia despertado se acercó rápidamente.

— ¿Cómo te sientes? —pregunto karma pasando su mano por su mejilla.

Nagisa aunque podía ver en su mirada la seriedad denotaba mucha preocupación.

— Me siento cansado, muy cansado —respondió débilmente intentando sentarse sin poder lograrlo, sentía un ardor horrible en los brazos acompañado de mucho dolor en la cabeza.

Después de esas pocas palabras karma lo observaba con una mirada enojada cuando Nagisa quiso decir algo sus ojos se inundaron de lágrimas nuevamente sintiendo sus labios temblar.

La mirada de karma se suavizo acercándose y abrazarlo con todas sus fuerzas mientras lo consolaba y solo podía escuchar llorar a Nagisa y aferrarse de él como si su vida dependiera de ello.

Mientras que el chico descargaba todo lo que sentía con lloraba y trataba de mantener algunos de sus quejidos de dolor lo más silenciosos posible, karma buscaba la palabras para reconfortarlo. 

Al cabo de una hora llorando Nagisa conseguío tranquilizarse y respirar profundamente para poder lograr tener una conversación más tranquila.

— No voy a custionarte, simplemente voy a estar aquí hasta que te sientas mejor y quieras contarme lo que pasó ¿Esta bien? —dijo Karma limpiando sus lágrimas.

Para Nagisa escuchar esas palabras de karma lo hizo llorar de nuevo y con más intensidad.

Entre sollozos intentaba asimilar todo de lo que se habia enterado, estaba tan cansado de todo.

Solo se sentía seguro cuando Karma y Sugino estaban a su lado, ellos lo habían ayudado a liderar con tantas cosas que se estaba cansado de cargar  a sus amigos con sus problemas.

Estaba tan agradecido ya que sabía que cualquier persona se hubiera artando...pero ellos no, ambos estaban cuando más los necesitaba y apreciaba eso.

Karma lo mantuvo en sus brazos todo el tiempo hasta que se calamara pero simplemente se cuestionaba.

¿Debía contarle de lo que se enteró?

¿Que pasaba si su vida corre peligro por esto?

Nagisa sabía que a Hiromi nunca le a sido de su agrado karma de alguna manera ella lo detestaba.

No quería ponerlo en peligro, si Hiromi era capaz de golpearlo hasta dejarlo aborde de la muerte no quería imaginar lo que podría llegar hacerle.

...Si algo le pasará no podría vivir con la culpa...pero estaba desesperado y el podría ayudarlo.