♠️ ʀᴇɪ ʙᴀᴛꜱᴜʙᴀᴍɪ ♠️

420 25 2
                                    

A pedido dealanakude1

♠️♠️♠️♠️

Pequeños trozos de césped cortado levitaban en el aire, arrastrados por la suave brisa primaveral.

Escuché un tierno estornudo a mi derecha, le dediqué un mirada. La jardinería era lo mío, el único servicio que disfrutaba brindar como sirviente del clan; sin embargo, Rei lo odiaba. Sembrar y labrar la tierra, cosechar los frutos, recolectar flores, todo aquello se le hacía terriblemente aburrido. Ni siquiera sé porqué está aquí ayudándome, probablemente piense que pasando más tiempo juntas cambiaré de opinión, dejaré de estar enojada. Mentiría si dijese que no tiene razón.

Ella es mi talón de Aquiles desde que nos conocimos ese lluvioso día de abril, cuando la derrota de nuestros clanes en la guerra civil se hizo inminente y ambas acabamos trabajando como lacayos de los vencedores. 

Pasamos días duros, hemos tenido que complacer a otros a la vez que cargabámos con mochilas llenas de humillación por pertenecer al grupo de las Cien familias devoradas. Un peso demasiado grande para dos niñas a las cuales la vida golpeó duro. No es extrañeza de nadie el desarrollo de nuestra relación si vemos a el amor como lo que fue: la escapatoria perfecta de la burda agonía que trae consigo el abandono.

Porque a eso nos aferramos, gracias a tal patética e intangible cosa sobrevivimos. Ahora bien, ¿Cómo pretendía que me sintiera al escuchar su arriesgado plan contra las familias? ¿Qué haría una persona común si se entera de que su amado va trás la boca del lobo? ¿Le felicitaría?. Pues yo hice lo contrario, me enfurecí. No solo eso, dije cosas hirientes, maldije a sus mil antepasados, y ella... Ella solo sonrió.

Así era Rei. Amable, demasiado, siempre dispuesta a complacer al resto, a costa de su propia voluntad.

Exhalé con pesadez, tal vez vengarse era lo que su corazón quería y yo simplemente no supe comprenderlo. Giré mi rostro nuevamente, encontrándome con sus amarronados ojos.

- Es todo por hoy- dejé a un costado la tijera de podar y me quité los guantes blancos-. Iré a guardar estas cosas.

Me levanté, recogí los elementos regados por el suelo, Rei miraba, impaciente a que alguien o algo rompa el crudo hielo del ambiente.

- Puedes acompañarme, si quieres- sentencié, instantaneamente se posicionó detrás de mi, siguiéndome.

No era mucha la distancia entre la huerta y la sala de servicios, unos seis metros quizá. Caminé lo más rápido que mis brazos cargados de palas, regaderas y guantes me lo permitieron. Empuje la no tan liviana puerta con el pie derecho y entré casi trastabillando a aquél lugar repleto de chatarra metálica. La castaña intentó reprimir una carcajada en vano, ya que a los segundos estalló en risas.

- ¿Se puede saber qué es tan gracioso?- dije con las mejillas infladas.

- Te ves muy tierna enojada- comentó calmándose.

Se acercó a mi, tomó todo lo que traían mis cansados brazos, haciéndolo a un lado, para después abrazarme sorpresivamente.

- Rei...- podía notar sus tranquilos latidos contra mi pecho y su cuerpo arropándome cual niña. Dejé que lo hiciera, hacía tiempo que no estabámos así de cerca.

- Discúlpame, debí consultarte antes- enterró el rostro en mi cuello, susurrando-. No iré a la academia, si eso es lo que quieres.

Su voz denotaba resignación, incluso tristeza, me estremecí. ¿Era su sed de venganza capaz de cegar la racionalidad que la caracterizaba?, en tal caso ¿Quién se opondría a semejante deseo?. Así significara el mayor de los peligros, por primera vez perseguía un anhelo suyo. Por más estúpido que este parezca, me veía en la obligación de apoyarla.

Presioné mis uñas en su estrecha cintura, sin hacerle daño.

- No- respondí-. Tienes que hacerlo, respetaré tu decisión.

Se separó de mi clavícula, poniendo una tierna mueca de emoción, y comenzó a depositar cortos besos al rededor de mi cara y mandíbula. Su boca suave causaba cosquillas.

- ¿Por qué cambiaste de opinión?, no eres de las que dá el brazo a torcer facilmente- preguntó burlona mientras daba un último beso en mi frente.

- Digamos que puedes llegar a ser irresistible a veces.- fingí desentendimiento.

- ¿Irresisible? ¿Eso crees?- una sonrisa pícara se asomó en su boca.

Desvié la vista, roja y un tanto avergonzada.

De repente, Rei se arrodilló ante mi, retrocedí por instinto, chocando con una mesa de trabajo. Avanzó de cuclillas con su cabeza todavía entre mis robustas piernas.

- ¿Qué estás...?- dije confundida, ella solo me ignoró.

Con sus manos acarició la piel que mis pantaloncillos dejaban al descubierto, un escalofrío recorrió mi piel, allí por donde sus labios pasaban. Me senté en el mueble, dándole un mejor acceso a mis muslos. La humedad que sus labios desperdigaban por sobre la tela y la lentitud con la que sus tensos dedos rozaban tal molesta prenda agitaron mi ritmo cardíaco. Mi sangre estaba siendo bombeada hacia una misma dirección, mis caderas eran un péndulo moviéndose lentamente con ansias de atención.

- ¿En serio quieres hacerlo aquí?- inquirió sacándome de mi trance, pareciese como si se hubiera dado cuenta de algo.

Arqueé las cejas, su pregunta me descolocó; realicé un vistazo general del lugar donde nos encontrábamos. Había demasiados objetos polvorientos y muy poco espacio, en fin, antihigiénico e incómodo, entendí su mensaje al instante. Suspiré frustrada, acomodé mi pantalón y me reincorporé en la mesa. Le tendí el brazo, ella lo jaló, sentándose a mi lado.

Se apoyó en mi hombro, igual o más agitada que yo.

- Lo siento, me dejé llevar.

Entrelacé nuestras manos a modo de respuesta.

- ¿Sabes? Si todo sale bien, cuando esto termine ya no tendremos que utilizar el cuarto de servicios como habitación de hotel.

Le sonreí desganada, apretando fuerte sus falanges, aún no estaba del todo convencida.

- Acabaré con ellos, T/n. Seremos libres- continuó con tono duro.

- ¿Lo prometes? ¿Volverás pronto?- murmuré mirándola, perdiendóme en aquella dulce pero decidida expresion.

- Lo prometo.

Sea un error o no, elegí confiar, elegí seguir su corazón.

♠️♠️♠️♠️

Buenaass.

Dios, por qué tardaban tanto en actualizar ajkshjsjk perdón, somos un fracaso. Sin más, ojalá lo hayan disfrutado. 

Nos vemos pronto (eso espero). 

 -fucking_clown







One shots || anime >EN PAUSADonde viven las historias. Descúbrelo ahora