𝐀𝐏𝐑𝐄𝐍𝐃𝐈𝐄𝐍𝐃𝐎 𝐀 𝐕𝐈𝐕𝐈𝐑ˡᵉᵒ ᵛᵃˡᵈᵉᶻ|𝐏𝐞𝐫𝐜𝐲 𝐣𝐚𝐜𝐤𝐬𝐨𝐧

𝐗𝐗

Los s'mores fueron idea de Jason.

Después del almuerzo, Jason se había acercado a Piper con una amplia sonrisa en su rostro y un Leo a cuestas. Ella había estado de acuerdo con la idea, sobre todo porque pensó que les vendría bien un descanso. Algo alegre y divertido para distraerlos de todas las cosas malas.

Desafortunadamente, Percy lo había escuchado y también parecía entusiasmado. Jason había explicado en tono de disculpa que se trataba únicamente de un evento del Equipo "Salve-Hera-de-un-zarcillo-cueva-cosita".

... Podrían trabajar en el nombre más tarde.

Percy había respondido ... curiosamente. Había agarrado a Hazel y Frank sorprendidos, declarando que iban a tener una reunión del club "Mata a ese chico gigante en Alaska" antes de llevarse a rastras a sus dos amigos desconcertados.

Honestamente, fue una reacción bastante infantil, pero Piper supuso que no estaba sorprendida de recibirla de Percy.

(Más tarde se enteró de que después de la reunión improvisada del club, Percy había intentado salir con Annabeth solo para obtener un "Lo siento, solo miembros del club Mark of Athena" y una puerta en la cara. Parecía un poco mezquino para Annabeth lo sabía, pero también era consciente de que Annabeth se burlaría de Percy en cualquier oportunidad que tuviera, así que tal vez la historia no fuera demasiado descabellada después de todo).

Resultó, como era de esperar, que Leo era un gran tipo para hacer s'mores. Era mucho más fácil usar las llamas personalizadas de Leo que encender una fogata, y Leo hizo un buen trabajo al controlar su fuego para que los malvaviscos se asasen uniformemente.

El único problema eran los excéntricos gustos de sus amigas.

"¡Jason, eso ni siquiera es un s'more! ¡Solo te estás comiendo los pedazos por separado!"

"¡Me gusta más de esta manera!" defendió su novio. "¡No tiene nada de malo! Y además, en realidad no me estoy comiendo las galletas Graham. Solo los malvaviscos y el chocolate".

Piper se quedó mirándolo, absolutamente horrorizada. "¡Eso no es mejor!"

Leo rió. "Déjalo en paz, Pipes. ¿Y qué si es un gran bicho raro?" Y con eso, el malvavisco en su mano estalló en llamas.

"¿Qué estás haciendo?" Piper gritó. "¡Se quemará!"

Leo le arqueó una ceja. "Uh, sí. Ese es el punto." El fuego en su mano se apagó, revelando un malvavisco que de hecho se quemó hasta quedar crujiente. El exterior estaba ennegrecido y agrietado, absolutamente arruinado.

Leo se lo metió en la boca.

"No puedo creerles a ustedes dos", gimió Piper.

"¿Qué?" Leo preguntó a través del malvavisco que se le pegaba en la boca.

Piper simplemente negó con la cabeza, mirando como Leo preparaba otro malvavisco quemado, esta vez para un s'more propio. Jason se encogió de hombros en respuesta a su evidente angustia y rompió otro trozo de chocolate para comer.

Piper se rindió con sus amigos y ensartó un malvavisco propio, ofreciéndolo a la mano llameante de Leo. Ella lo giró con cuidado, decidida a obtener el perfecto color marrón dorado.