Capítulo VII

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—Me habías preguntado si necesitaba algo más y sí, sí necesito algo.

—¿El qué es? —cuestionó sentándose en la orilla de la cama. El rubio alargó su brazo izquierdo y rodeó la cintura de su marido, para acercarlo a él.

—Que te quedes conmigo, esta noche y todas las demás.

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Capítulo VII

—No creo que... no creo que sea conveniente... Podría lastimarte, lo mejor es que descanses.

—Por favor —volvió a pedir, por lo que Itachi terminó aceptando.

—Está bien, sólo... voy a tomar mis cosas —del gran armario empotrado en la pared, sacó su ropa para dormir y se cambió, metiéndose en la cama junto al rubio, quitándole el cojín de detrás para que pudiera recostarse bien.

Apagó con rapidez la luz de la lamparita y girándose hacia el otro lado de la cama, para evitar cualquier tipo de contacto o conversación, aún se ponía muy nervioso el tenerlo tan cerca.

Aunque no quería dormir en toda la noche, quería mantenerse despierto para velar por Deidara, quería estar pendiente si empeoraba, mejoraba o necesitaba algo pero, después de batallar contra sus párpados, el sueño terminó por vencerle. 

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A la mañana siguiente, Deidara amaneció algo más adolorido de lo normal, la herida le molestaba mucho, como si algo le estuviese aprisionando la herida de su brazo.

Al abrir los ojos, supo el motivo de la molestia de más en la herida, y es que Itachi, estaba dormido tan plácidamente abrazado a él. A pesar del dolor, sonrió, al verlo tan tierno a su lado.

—Ita... —le susurró, obteniendo una pequeña queja por parte del de cabellos largos—. Ita, ya amaneció —volvió a sonreír, quitándole con su mano libre y sana los cabellos oscuros que descansaban sobre su rostro. Con ese pequeño tacto, el ex Uchiha despertó.

—Yo... ¡lo siento, lo siento! —se disculpó, quitándose con rapidez de encima del rubio—. Perdón, ¿te lastimé? ¿Ves? Por eso no quería dormir contigo, sabía que te podía lastimar.

—Tranquilo, no me lastimaste, de verdad, hum —le sonrió.

—Sí te lastimé, mira —le señaló su venda, con una mancha carmín—, ¿por qué no me despertaste si te estaba lastimando?

—Porque te veías muy lindo dormido así, abrazado a mí —no quitó su sonrisa boba de la cara, haciendo sonrojar a Itachi.

—No digas cosas vergonzosas. De todas formas, deberías pensar primero en tu salud —la puerta fue golpeada por Sasori, pidiendo permiso para entrar—. Ah, buenos días, Sasori, puedes dejarlo sobre la mesita, gracias —le indicó al pelirrojo, que traía una bandeja con el desayuno.

—Permiso, buenos días. Espero que ya se encuentre mucho mejor, señor —saludó con educación, colocando sobre la mesita de cristal dicha bandeja.

—Me encuentro mejor, gracias —respondió cortésmente.

—Me alegro. Buen provecho, permiso —también con educación, abandonó la habitación. Itachi se levantó de la cama y fue hasta la bandeja, dejándola sobre el colchón, cerca de ellos.

—Desayuno en la cama, qué rico me consientes.

—No te consiento, sólo te atiendo como se debe. A ver, y ahora come, debes comer bien para reponerte —atrajo la comida para que el rubio comiera.

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⏰ Última actualización: May 30, 2021 ⏰

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Cage Of Love (Naruto)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora