La depresión de izuku

Fragilidad

La heroína ryuku se encontraba observando a izuku que se había encontrado desde hace 10 minutos observando una de las paredes de la habitación con lágrimas fluyendo por sus mejillas, no es que no quisiera ayudar sino que esencialmente no sabía cómo, y además siendo honestos, no sabía aún como ella lo estaba tomando tan bien, eso en la mente de cada los otros presentes ya que por fuera se estaba comportando sería por dentro ryuku se sentía de la peor clase de escoria, una escoria atrapada dentro de si misma que solo deseaba gritar y llorar ya que no pudo defender a quien era su compañera y amiga,su alumna, alguien a quien había jurado proteger, además de alguien tan pura y siendo honestos la única razón por la que no estaba descargando su ira o su tristeza sobre algún villano es que sabía que si dejaba salir su pena, al final no sabría que pasaría.
-no puedo darles detalles pero aparentemente sabían que iríamos y nos emboscaron, aquello fue una zona de guerra y para cuando nos dimos cuenta algunos habían escapado y teníamos heridos, nejire se adelantó y antes de que pudiera detenerla trato de ir por los que escaparon, para cuando la pude seguir momentos después la encontré sola y ya estaba...- la heroína no pudo seguir más

Mirio por otro lado solo podía observar con pena a su amigo mientras escuchaba a la heroína, el mismo se sentía horrible por no llorar pero la única conclusión a la que llegó es que seguía en shock por la noticia, y lo que le daba terror era que mientras más la asimilará, más le iba a doler, por primera vez deseo con todas sus fuerzas el poder caminar para buscar a quien lo hizo y...... No sabía que haría y eso le aterraba igual, pues si tuviera enfrente al asesino no sabia si actuaría como héroe o tomaría una venganza personal.

Mientras todo esto pasaba una figurita se metió en la habitación, sorprendiendo y asustando a los 3 adultos que se encontraban allí, al voltear solo pudieron observar a una pequeña niña de pelo blanco que miraba con tristeza a izuku con sus bellos ojos rojos,
Izuku solo pudo verlos por un segundo puesto que lo siguiente que supo es que sintió una presión en su pierna siendo que la niña se había lanzado a abrazarlo y al cargar a la pequeña en brazos pudo darse cuenta de que está misma se encontraba llorando e izuku que ya sentía una gran presión en su corazón hizo lo que pensó era lo correcto, se aguanto las ganas de llorar y le sonrió a la pequeña.
-¿Porque lloras Eri chan?- pregunto de manera amable mientras los dos adultos se sorprendian de la tranquilidad con la que hablaba.
-escuche que la señorita nejire ya no iba a regresar ¿Es cierto?- pregunto la niña tristemente
Izuku sintió que su corazón ya roto se rompía en pedazos, pero debía ser fuerte por la pequeña en sus brazos.
-descuida solo se retraso, volverá te lo prometo- dijo mientras cerraba los ojos y le sonreía, la verdad se sentía horrible al mentirle pero necesitaba esa mentira para tranquilizarla y muy en el fondo el también quería creer eso.
- umm de acuerdo si papi lo promete entonces es verdad- aseguro la pequeña un poco más alegre
-oye Eri chan ¿te parece si vamos a tu habitación a jugar?- pregunto a lo que la niña asintió emocionada y salió en dirección de su habitación seguida del peliverde.

Mientras el par se alejaba mirio y ryuku observaban en silencio como esos dos se iban antes de suspirar y mirarse el uno al otro.
-¿crees que estará bien?- pregunto la heroína al chico
-eso espero, no sé cómo reaccione cuando descubra que mintio- respondió mirio de manera seria
- me refería a izuku- corrigió la dragona.
-yo igual- respondió mirio tristemente al observar la ceja levantada de la mujer añadió
- conozco a izuku un poco mejor que usted y en este tiempo me he dado cuenta de cómo tiene la costumbre de esconder sus emociones- observo el chico - casi siempre las mantiene ocultas y solo nejire era capaz de entrar en el y ver cómo se sentía en realidad, creo que ahora está en shock pero será muy triste cuando se de a la idea - concluyó con un suspiro cansado.
La heroína solo pudo asentir ante lo dicho antes de mencionar
- ahora que lo veo tu tampoco pareces muy afectado, ¿También estás en shock?- pregunto
- no - respondió mirio - desde que nos graduamos nos hicimos a la idea del riesgo de nuestro trabajo y que alguno de nosotros podría no volver, por eso puedo soportarlo, además el llorar por alguien que siempre sonreía sería un insulto a su memoria, por eso decidí no llorar -