•Ｈａｐｐｉｅｒ• [Ａｄｒｉｎｅｔｔｅ]

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Alya y yo fuimos de compras porque decía que tenía que verme bonita para mi cita, cuando entenderá que sólo voy a verme con Adrien porque tenía tiempo sin verlo?
Pero bueno, me había comprado un conjunto de abrigo celeste y botas negras.

-Estás preciosa - me dijo mi mejor amiga

-Gracias... Supongo

-Oh vamos Marinette, anímate, todo estará bien - me sonrió

-Si tú lo dices

No nos habíamos dado cuenta de lo tarde que era, faltaban 15 minutos para que fueran las 4, por suerte ya estaba preparada.

15 minutos después, la puerta de mi casa sonó.

-Adrien - dijo mi madre - Que alegría verte

-También me alegro de verla señora Dupain. Marinette ya está lista?

-Sí, Marinette, Adrien está aquí

-Gracias mamá - le di un beso en la mejilla - Regreso luego - y me fui con Adrien

Luego de un rato caminando, llegamos a la pista de patinaje.

-Lista?

-Sí

Él me tomó de la mano y entramos a la pista, Dios, siento mis mejillas ardiendo, Alya tenía razón, aún siento algo por él y presiento que era una tarde muy buena.

Adrien habló con el encargado para pedir los patines, y cuando él se los entregó, me dio mi par y nos colocamos el de cada uno.

-Vamos? - me extendió su mano

-Seguro - la acepté y fuimos a la pista

Y ahí estábamos, dábamos giros, piruetas y uno que otro paso que inventabamos.

-Te ves muy bien - me dijo

-Igual tú 

Era cierto, vestía una gabardina beige con un pantalón y zapatos negros que realmente le quedaban increíble.

-Podemos ir a tomar algo si gustas, ya sabes, para ponernos al día con nuestras vidas

-Oh, pues... Está bien

-Perfecto, en Le Bistrot de Paris

-Sí. Extraño esa cafetería

Eso también era cierto, Le Bistrot de Paris era la cafetería a la que íbamos Alya, Mini, Adrien y yo, tengo años que no visitaba ese lugar.

Sin duda, necesitaba volver.

Continuará.
Y volví con Happier, "Serías mi mami?" ya tuvo su maratón, ahora es el turno de Happier, espero que les haya gustado este capítulo, y si así fue, regalenme sus votos y comentarios, que como siempre digo, no respondo por falta de tiempo, siempre leo y me animan a seguir.
Antes de irme, les dejo los vestuarios de nuestros protagonistas.
Sus abrazo virtual, se despide y los quiere Jim.