Haciendo y deshaciendo este amor | ERWIN x MIKE x OC | AU

XI - Satisfacción

Atención: cap sin corregir, mañana acomodo todo ♥

Hace 10 años y unos meses

16 de enero

La música alta, luces de colores y gente bailando y riendo, era el típico escenario de una fiesta.

Erwin comenzó a refregarse contra la chica que estaba besando. ¿Cómo le había dicho que se llamaba? Lara... Mara... No le había prestado atención y no le interesaba en realidad. Solo quería pasar el rato y si seguían así le iba a decir de ir a su casa o algún lugar más íntimo, ya se estaba calentando demasiado.

Pero la chica se separó de él.

— Me tengo que ir. Nos vemos, lindo — dijo la rubia antes de besar a Erwin por última vez y retirarse.

Smith la vio partir y suspiró. Miró a la gente a su alrededor y se sentó en el sillón del lugar. Había sido mala idea ir a esa fiesta solo; solo conocía a la cumpleañera y la había perdido de vista. 

Sus ojos se centraron en el culo de una chica que conversaba con un muchacho del otro lado de la sala, contra la pared. Subió los ojos a su cabello, eran de color anaranjado; se acordó de Olivia, que en el último tiempo había pasado mucho tiempo con su grupo de amigos y con quien había afianzado su vínculo.

La chica en un momento giró la cabeza y notó que, en efecto, se trataba de ella. Se sorprendió, pues Olivia con suerte llegaba a los 50 kilos, para él era demasiado flaca , o por lo menos en cuanto a pechos se refería; no se imaginó que pudiese tener tan buenas nalgas.

Erwin de forma automática se levantó y se acomodó el cabello. Analizó un poco más la situación; parecía que el muchacho que hablaba con ella estaba un tanto ebrio y que Olivia solo lo escuchaba por amable, pero claramente le parecía pesado.

Parecía una damisela en apuros y él la rescataría.

Sin pensarlo se acercó y le puso una mano en el hombro a la chica, que primero lo miró sorprendido, pero luego le sonrió alegre al reconocerlo.

— ¡Erwin! — exclamó.

Él le sonrió y luego miró al chico, que lo observaba con desdén.

— Amigo. ¿Me la prestás un rato?

El chico dudó, miró a la chica y de nuevo a Erwin. Tambaleante se alejó de ambos sin decir ninguna palabra.

— Gracias, me salvaste — dijo Olivia, tomando el brazo del rubio. Éste rio.

— Si, te vi de lejos y me pareció que querías escapar. ¿Qué hacés acá? ¿Conocés a Emilia? Ella estudia conmigo administración.

Olivia asintió.

— SI, fuimos juntas a danza.

Erwin la miró; que una mujer hiciera tal disciplina le parecía sumamente atractivo.

— No sabía que bailaras.