[3]

10 0 0
                                    


- ¿Hoy tienes partido verdad? - me pregunto mi hermanita mientras me entregaba un plato de comida -

- Chi - puedo ser un hombre mamado de 1.80, pero soy la persona más tierna del mundo -¿me vas a ir a verme onii-chan? - y un otaku, aunque eso ya está más que claro -

- Primero, no soy hombre y no soy mayor que tú, segundo, si voy a ir, quiero ver como comes tierra - se sentó enfrente de mi con esa sonrisa burlona -

- ¿Y llevaras a tu amigo? - soy bicurioso -

- Sí, pero no lo presiones mucho, es muy tímido y un poco antisocial - esta cree que me lo cogeré en la primera cita -

- Dudas mucho de mis capacidades sociales -

- No dudo de eso, pero eres muy aventado y no sueles pensar mucho las cosas cuando algo te molesta, como un gorila, por eso tu apodo -

- Justo en el corazón del pollo - colocando mi mano en la zona del corazón -

- ¿Contra quienes van a jugar? -

- Oh, buena pregunta... la verdad no sé, el entrenador dijo que luego nos diría, pero nunca comento nada sobre eso - es la primera vez que hace algo como eso, siempre nos dice una semana antes con quienes vamos a jugar -

Seguí conversando con mi hermanita sobre cualquier tema que se nos ocurra. Terminamos nuestra comida y nos subimos a nuestros cuartos para alistarnos e ir a la hermosa escuela, sonara como sarcasmo, pero aunque no lo crean, me gusta aprender. Soy un desmadroso de buenas calificaciones. Cuando ya estuvimos listos salimos de la casa no sin antes meterle seguro para que nadie nos robe algo y nos subimos a mi carro, así es, se manejar papús. Pusimos la radio para escuchar las noticias e ir por Cris y Rene. Cuando llegamos a la escuela me despedí de mi dulce hermanita con un beso en su frente recordándole que llevara a su amigo al partido.

Fuimos a nuestro salón y no pasó nada fuera de lo común, una Antar salvaje fingiendo prestar a tención cuando en verdad esta con su teléfono leyendo cochinadas gay's, un James haciendo origami, una Rene viendo el techo como si estuviera drogada, un Cris anotando todo como loca, un Kevin leyendo un libro físico y por ultimo ¡yo! dibujando fantasmitas en mi cuaderno para distraerme de la emoción que tengo al jugar. Ya era receso y ese sentimiento no se iba.

- ¿Puedes dejar de hacer eso? - me hablo Rene y yo solo pude mirarla confundido - tu pierna, la estas moviendo desde hace - señalo mi pierna y vi que era verdad, no me di en que momento comencé hacerlo -

- Uh, perdón - solo soltó un suspiro ¡contrólate Erick! -

- Sé que estas ansioso de tu partido, pero debes de relajarte un poco - ella puede ser una hija de puta, pero se preocupa mucho por los suyos -

- Te amo -

- Contigo ni a la esquina voy - volteo su cabeza para que no viera su adorable sonrojo y gracias a esa conversación me pude relajar, no quiero preocupar a mis amigos y familia otra vez -

- Lo que dijo Rene, no le pienses tanto - sujeto mi brazo Antares - si pasa algo, te lanzamos a Edgar para que te calme un poco - vergüenza en lo que siento ahora mismo -

- A ti también te amo -

- Pero no más que a el -

- Obvio ¿no lo han visto reír? Es una cosita tan linda - recordé cuando fui a buscar a mi onii-chan a su salón y lo vi riendo con ella, les juro que pude ser unas alas en su espalda. Iba a hablar cuando llega el capitán del equipo a mi mesa y se sienta entre Antar y mío -

- Hola raza ¿Qué tal linda? - paso su brazo por los hombros de mi amiga -

- Ya sabes el precio por tu contacto físico -

Una Historia Más Sobre Una Escuela ClichéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora