Lotto

Bajada

Namjoon se había vuelto muy cercano a Jackson.

Ya llevaban un año viviendo con el contrario y a medida que pasaban los días el chico parecía querer ser más apegado a Namjoon.

Claro, siempre había una línea que los separaba... Y esa línea era Taehyung.

No tenían mucho tiempo para conversar ya que la mayor parte del tiempo Jackson dormía cuando ellos estaban despiertos, pero cuando coincidían sus horarios era un dolor de cabeza.

Para Taehyung, porque el mayor les quitaba ese tiempo que podrían haber pasado caminando por la ciudad o pintando en alguna parte, demonios si lo mas divertido de esas salidas era cuando los descubrían y ambos corrían con el triple de miedo de una persona normal.

Era un nivel de adrenalina que Taehyung amaba... Y que no estaba sintiendo porque Jackson seguía hablándole a Namjoon.

"Mira viejo. Lo que digo es verdad, el bar es alucinante, te va encantar. Las luces y los tragos serán lo mejor" Le decía el rubio mientras rodeaba con un brazo a Namjoon, Taehyung gruñó. "Oye, no seas aguafiestas TaeTae, podría ser divertido" Jackson le sonrió "Además, podría devolverle unos buenos recuerdos a Namjoonie"

Namjoon enrojeció y Taehyung sintió sus sentidos en alerta.

"Vamos, no me digas que vas a ignorar que nos conocimos en una fiesta" le sonrió Jackson "Y que esa noche nosotros do-

"Hyung" Se quejó Taehyung, sus orejas rojas de ira "Namjoonie Hyung, no podemos ir hoy, me prometiste que íbamos a pintar el puente hoy"

Al recordarlo Namjoon asintió separándose de Jackson y logrando que una sonrisa apareciera en el rostro de Taehyung.

"Lo siento, pero podemos ir otro día" Namjoon le sonrió y Jackson solo bufó y asintió.

Cuando finalmente salieron Taehyung empezó a correr emocionado.

Tenían planeado pintar el puente hace meses, desde que Taehyung había empezado a pintar algunas murallas siempre tuvo en vista ese lugar, y además ya tenía algo en mente para el lugar.

Después de haber trabajado en una lavandería Taehyung había usado su dinero para comprar distintos tipos de pinturas, y para lo de hoy también había comprado algunas cuerdas para poder empezar sin problema.

Una vez llegaron Taehyung sonrió al ver el lugar vacío, le pidió a Namjoon  a que lo ayudara a poner bien las cuerdas y una vez estuvo listo saltó.

Gritó de emoción al sentirse en el aire y finamente volvió a subir para comenzar a pintar.

Al final estuvieron una semana yendo y viniendo al lugar. Se quedaban máximo dos horas y después iban a hacer otras cosas, ya fuera ir a almorzar o solo caminar por la ciudad.

Fue en la primera noche de la segunda semana que Taehyung encontró que su trabajo estaba terminado, poniendo su firma en una esquina le pidió a Namjoon que lo ayudara a subir.

Una vez estuvo en el borde del puente saltó de vuelta a la calle y casi pierde el equilibrio de no ser porque Namjoon lo sujetó.

Al levantarse su corazón se agitó por la cercanía, y al alzar la vista su rostro estaba tan cerca del de Namjoon que se alejó apenas pudo, ocultando su sonrojo.

"¿Quieres ver cómo quedó?" Preguntó Namjoon y el solo asintió mientras guardaba sus cosas y corría para bajar.

Cuando estuvieron en la otra calle Namjoon llegó a aplaudir de solo ver el trabajo.

En la parte más baja se podía ver el dibujo del mar bajo la luz del sol, y en un lado miles de cuervos iban hacia el sol, mostrando que al pasar por la luz sus alas se volvían blancas y poco a poco se convertían en unas aves completamente distintas.

El juego de los colores con el contraste de las luces hacía parecer el dibujo más realista de lo que ya era, y Taehyung se sentía extremadamente feliz de su resultado, y al sentir el gran abrazo de Namjoon sintió que todo el esfuerzo había valido la pena.

Sin duda le debía tomar una fotografía, pues era uno de sus mayores logros.

***

"Felicidades chicos, tienen la habitación 1006" Joy les sonrió "Está en el último piso, disfruten la vista"

Una vez se despidieron de las chicas fueron a dejar sus cosas en el cuarto, y Joy tenía razón pues desde esa habitación podían ver toda la ciudad a lo lejos, los ojos de Jungkook brillaron ante la vista.

"Iré a tomarme una ducha" Avisó Yoongi "Tu sí quieres puedes buscar a tus amigas y estar con ellas, pero debes volver a la hora de comer"

Jungkook asintió y emocionado dejó las cosas en su cuarto antes de tomar la llave y correr fuera del cuarto.

En si el lugar era más grande de lo que parecía, habían miles de pasillos donde la gente pasaba y caminaba a sus cuartos, muchos de los residentes mostrando libremente sus habilidades ya sea para alardear o porque no podían ocultarlas, Jungkook miraba a todos con cierto asombro mientras se subía al ascensor e iba al primer piso.

Cuando preguntó en recepción por cada una de las chicas, el chico que atendía les dijo que siempre estaban en el salón de presentaciones, a veces cantando y otras veces ayudando con la comida, Jungkook le agradeció y corrió al lugar.

Cuando entró todo estaba en completo silencio mientras las personas en sus mesas miraban hacia un escenario.

Al alzar su vista vio a Minnie siendo una de las actrices, sintió su corazón acelerarse de emoción y se quedó en su lugar para ver la obra completa, cuando está terminó corrió a saludar a su amiga.

"¡Minnie!" Gritó, y al igual que con Taehyung la menor no alcanzó a reaccionar cuando Jungkook llegó a su lado y la alzó en sus brazos. "¡No sabes lo feliz que estoy de verte!"

"¿¡Kookie!?" La sonrisa de Minnie no podía llegar a sus ojos debido a sus lágrimas "Estás bien" dijo tomando su rostro en sus manos y luego abrazarlo fuertemente "Dios, cuando las chicas me dijeron que desapareciste asumí que tú-" Minnie solo negó y Jungkook podía sentir las lágrimas en su hombro.

Jungkook la abrazó de vuelta cuidando de no lastimarla y cuando se separaron la chica limpió sus lágrimas.

"Ven, el resto va a estar tan feliz de verte"

Minnie lo guió hasta una parte escondida del escenario, y cuando su mirada conectó con el resto de las chicas no hubo más que gritos y abrazos, y muchas, muchas lágrimas.