Capítulo 2.

200 32 6
                                    

Las uñas que habían crecido en unos días habían desaparecido de sus manos. Mirio trataba de calmarla redeandola con sus brazos, pero no parecía funcionar muy bien.

Inmediatamente cuando un seguidor llegó a su habitación se separó de su novio y salió de ahí, Yūu no mentía cuando decía que tenían mucho que hablar. Los canales de televisión y las estaciones de radio estaban plagadas de noticias sobre las protecciones para los civiles y el intento fallido de los héroes en regresar la confianza.

En uno de los pocos temas de las noticias, apareció justamente la foto de ella y la de Mirio. Estaba siendo buscada como traidora de la sociedad, se decía que podía estar escondiendo información muy importante además de mentiras a la sociedad de héroes, agregaban en cada ocasión que podían la desaparición del héroe Lemillon que posiblemente fuera hecho por ella y un villano no identificado.

—¡Yūu! —exclamó abriendo la puerta con un golpe.

—Parece que ya te enteraste —la mirada de su hermano la amenazaba ferozmente —. Siéntate.

—No puede estar pasando esto —atendió a la orden sentándose en el sofá de la oficina.

—Te buscan porque tienen miedo de nosotros —Yūu se levantó de su silla y caminó hasta quedar detras de ella —. Y ahora tienen miedo de tí.

—¿Miedo? Ni siquiera tengo un kosei fuerte.

—Pero tienes información, mucha información importante —Yūu sonrió con crueldad —. Aunque la verdad no me importa demasiado.

—Mi amigo esta con ellos.

—Lo sé, mi niña.

—¿Crees que le pase algo? —comenzó a preocuparle, si la buscaban a ella, Natsume sería una buena manera de persuadirla.

—Tu vida es mucho más importante para mí, la sociedad de héroes pueden ser más crueles que los propios villanos. Como aquel chico en el Festival deportivo... ¿Cómo se llamaba?

—Katsuki... Bakugou.

Lo recordaba, en ese momento de la transmisión le había parecido bien que lo detuvieran de esa forma, pero estaba equivocada. Cuando pasaba algunos días en la U.A para cuidar a Eri junto a Mirio, el chico no le parecía tan malo, quizá tenía algunos problemas de ira pero la mayoría del tiempo estaba tranquilo y callado.

—Probrecillo —Yūu finalmente rodeó por completo el sofá y se sentó del otro lado —. Y casi después la Liga de villanos lo capturó. Ser héroe conlleva muchas cosas.

—¿Y ser un villano?

Yūu se limitó a sonreír impidiendo ver sus verdaderos sentimientos respecto a su estado.

—Lo que pase con nosotros y con ustedes queda en tus manos, los héroes te buscarán en todas partes y seguramente ese Erearsehead vendra pronto hacia acá más pronto de lo que crees.

»Deseo mover a todos mis hombres a otro lugar, ahora que estas mejor puedo hacerlo sin problemas, pero necesitaré algo.

Lo que Yūu dijo esa mañana era mentira, quería mantenerla tranquila hasta ese momento, pero seguía siendo lo mismo. Ella era el verdadero problema.

—¿Qué necesitás? —preguntó ___(Tn) con nervios.

—El héroe debe irse, ahora.

—¿Te refieres a dejarlo libre? Sí, yo también lo he pensando, Mirio no tiene porque estar involucrado en todo esto.

—No, me refiero a que debe irse, de esta vida.

Su mente quedó en blanco, no hablaba de dejarlo libre, ¿cómo pudo creer que a eso se refería? De todas formas era un villano, claro que debía cuidar su posición y a su gente.

A salvo [Mirio Togata] HAITUSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora