A salvo [Mirio Togata] HAITUS

Capítulo 5.

Despertó en una habitación extraña y para nada conocida, miró el techo esperando una respuesta del dónde estaba, pero no decía nada, no recordaba.

—Señorita, el baño esta listo —avisó una mujer, la había visto antes, ella le llevó su vestido para la reunión del día anterior.

—Dame un segundo —pidió ___(Tn), moría de sueño y estaba agobiada por no saber donde estaba.

—Estamos en Corea del Sur, justo como mi señor planeaba —habló de nuevo, interrumpiendo su recordar.

—Sí, gracias —sonrió, trataba de sonar amable, pero el vacío en su pecho aún seguía ahí.

Por esa razón no podía recordar donde estaba, después de la reunión, Yūu la había llevado directamente a su habitación, luego le llevó su cena y se quedó a su lado mirando la televisión mientras se quedaba dormida.

—¿Qué hora es? —preguntó, necesitaba resolver una pequeña duda.

—Las dos de la tarde  —dijo amablemente.

—Gracias.

Sí, le habían dado un somnífero para mantenerla dormida durante la mudanza. El techo de concreto ya no estaba y era remplazado por un techo de madera.

Se levantó de la cama y miró a su alrededor, era una habitación muy grande y en la misma se encontraba la gran tina que le esperaba con agua caliente.

—Mi señor prefiere que tome sus baños aquí mismo —aclaró de nuevo la mujer.

—Esta bien —contestó sin reprochar, sería muy incómodo, pero no estaba para pelear con la señora.

___(Tn) pidió que cerrará los ojos un momento y que estaría dentro de la tina enseguida, la mujer aceptó cerrando los ojos dándole una privacidad inservible para que se despojara de su ropa.

Yūu no había perdido ni un solo minuto después de que Mirio se fuera y le agradecía que perdonará la vida de su amado, aún tenía muchas dudas sobre como marcharía todo, pero quería cumplir un último deseo, era arriesgado y totalmente una locura ¿cómo reaccionaría Yūu a su petición?

—El agua esta tibia —aceptó ___(Tn) cuando ya estaba sumergida por completo.

—¿Le molesta algo? —preguntó la señora preocupada, mientras comenzaba a poner algo de shampoo en su mano.

—Quiero que el agua este caliente, hace frío aquí —inventó una excusa.

—Mañana estará a la temperatura perfecta —sonrió la señora. ___(Tn) había olvidado el nombre de su ahora cuidadora, recordaba a ver leído el expediente, pero no recordaba como se llama.

—Gracias —dijo devolviendo la sonrisa, daba igual, no necesitaba su nombre.

—Si me permite, yo me encargaré de vestirla. Mi señor tiene gustos muy firmes.

—Claro, has lo que sea, esta bien.

Haría todo lo que Yūu quisiera, pero antes de aceptar su destino, tenía un plan en mente, sería un completo chantaje si es que Yūu se oponía a cumplirlo.

A penas llegar a Corea, tenían una junta importante, Yūu por alguna razón quería que ella participará o al menos le acompañera durante ese tiempo. Estaba nervioso y prefería vigilarla el mismo de cerca.

El desayuno paso tan lento, Yūu halagó el como iba vestida, pero no recibió respuesta.

—Sé que estas molesta —dijo Yūu cuando terminó de comer. Su hermana comía tan lento que apenas iba por la mitad de su plato.