Tómate unas mentas
La estruendosa alarma del infierno me despierta pero hoy no me molesta, al contrario, el ruido que produce me parece el más bonito que he escuchado en mi corta vida.
Al asomarme por el balcón veo que hace un día maravilloso, el sol resplandece en un despejado firmamento, los pájaros cantan en los árboles y el ambiente huele a dulce venganza.
Una vez me visto bajo a la cocina para que Clarita alimente al monstruo que llevo dentro con un nutritivo desayuno.
-Buenos días, bella Clarita-la saludo mientras beso su frente.
-Buenos días niña, ¿podrías decirme porque andas tan risueña esta mañana?-me pregunta extrañada.
Ay Clarita-suspiro risueña-¿no te parece que hace un día maravilloso?-le digo mientras giro por la cocina con las manos en mi pecho.
Clarita me agarra del brazo haciéndome tropezar con mis propios pies y casi caer-¿Se puede saber que te has fumado esta mañana niña?-dice mientras me revisa los ojos.
-Me he fumado un canuto de venganza-ella suspira ruidosamente y se lleva una mano al corazón.
-Niña estupida-me dice mientras me golpea en el brazo y yo me lo sobo porque la condenada golpea fuerte-por un momento pensé que te habías fumado uno de maria-dice exasperada.
-y tú, ¿cómo sabes lo que es la maria Clarita?, acaso ¿la has probado alguna vez?-le digo cruzándome de brazos y con una sonrisa picara.
Ella inmediatamente me golpea con el trapo que llevaba en la mano y me dice-¡como te atreves!, yo siempre he sido una señorita-yo solo me carcajeo, adoro sacarla de sus casillas.
-Hoy te has despertado agresiva Clarita-le digo cuando vuelve a golpearme con el trapo para que pare de reírme-bueno, voy a desayunar rápido que debo ir a la prepa-le digo mientras me froto las manos entre sí.
****
Al llegar estaciono rápidamente en la primera plaza libre que encuentro y salgo corriendo hacia clases, porque, ¿adivinen qué?...exacto, llego tarde otra vez.
Hoy tenemos laboratorio a primera hora, solo espero que me deje entrar.
Al llegar a la puerta del laboratorio toco la puerta y la abro cuando escucho al profesor darme permiso para entrar.
-Buenos día señor Williams, lamento el retraso ¿puedo pasar?-le pregunto.
¿Qué creíais?, cuando quiero puedo ser muy educada.
-Sí señorita Graham, pero que sea la última vez entendido-me dice señalándome con el dedo.
Yo asiento mientras le saludo al estilo militar, haciendo que el profesor niegue con la cabeza mientras suelta una risita.
Al entrar veo que todos están colocados en pareja así que rápidamente busco a alguien que esté libre y que suerte la mía porque Jaden está solo ya que Braden está con Madison.
Al llegar al puesto en el que está Jaden veo que está dormido sobre su puño con el codo apoyado en la mesa. Rápidamente dejo mi morral en el suelo y empujo su codo haciendo que su cabeza golpee con la mesa haciendo un ruido que se podría haber escuchado hasta en la china.
Todo el mundo se gira a mirar mientras Jaden se soba la frente con una mueca de puro dolor y yo aguanto la carcajada que deseo soltar, sin poder aguantar más me río haciendo que todas las personas que se estaban aguantando la risa lo hagan también, incluso el profesor se ríe de las desgracias de Jaden.
-Bueno, ya está bien, dejad de reíros-dice el profesor cuando calma su risa-empecemos con la clase.
-Hoy haremos la disección de una rana-dice el profesor haciendo que las arcadas de mis compañeros resuenen por el salón.
Yo me río mientras repaso a todos mis compañeros con la vista deteniendome en Jared, éste está más blanco que la leche y parece a punto de echar el desayuno por la boca.
-Oye Jaden-le digo mientras le golpeo con mi codo en el costado-¿porque tu hermano parece estar a punto de potar?-le pregunto
-Es porque tiene algún tipo de fobia a las ranas, sapos, renacuajos y eso, ¿por qué?-me pregunta distraído aunque rápidamente me mira-Oh, no-me dice con los ojos bien abiertos-Oh, si-le digo con una sonrisa sin despegar mis ojos de Jared que parece cada vez peor.
El profesor va repartiendo a las ranas mientras que nosotros preparamos los instrumentos que vamos a utilizar.
Durante los primeros 45 minutos de clase el profesor se dedica a explicar las partes del cuerpo de la rana, su sistema nervioso y su funcionamiento y por último el procedimiento que debemos seguir para hacer de forma correcta la disección.
-Bien, ahora que entendéis el cuerpo de la rana y el procedimiento que debéis seguir podéis proceder con la disección siguiendo los paso antes mencionados-nos dice el profesor.
Todos nosotros agarramos el bisturí para posteriormente hacer un corte longitudinal sobre el cuerpo y después utilizar las pinzas para retirar la piel y descubrir los órganos.
No he terminado de hacer el corte cuando se escuchan las arcadas y después el vómito chocar con el suelo, todos levantamos la cabeza para ver como Jared saca todo el contenido de su organismo por la boca, mientras su compañera se echa hacia atrás mirándolo con asco.
-Jared pue...-el profesor no acaba la frase ya que el timbre de cambio de clase lo interrumpe, todos recogemos nuestras cosas y salimos en dirección a la próxima clase.
Al salir espero a los chicos y a Madison en la puerta, mientras espero sale Jared con muy mala cara.
Al verle no puedo evitar soltar una risita, él al escucharme se acerca con el enfado reflejado en su rostro. Cuando abre la boca para decirme algo le pongo la mano en la cara evitando que hable.
-Antes de decirme cualquier cosa, tómate unas mentas-le digo mientras me río y lo esquivo para ir hacia los chicos que ya han salido de clase.
(En multimedia Jared al saber que tendría que diseccionar a una rana)
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American Football (Pausada)
JugendliteraturAllison tendrá que mudarse a Los Ángeles. Lo único que Allison extrañara de su antiguo hogar serán su hamburguesería favorita, su pizzería favorita, su heladería favorita y a su mejor amigo. Nueva casa, nueva preparatoria, nuevos compañeros ¿nueva...