Capitulo 14: El recuerdo de alguien que me amo

89 58 17
                                    

Era la mañana de la exhibición de patinaje artístico a favor de los niños con cáncer en el que Keiko estaba inscrita, ya que ella amaba este tipo de exhibiciones donde podía acercarse a los niños e impresionar al público para ayudar a los tratamie...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Era la mañana de la exhibición de patinaje artístico a favor de los niños con cáncer en el que Keiko estaba inscrita, ya que ella amaba este tipo de exhibiciones donde podía acercarse a los niños e impresionar al público para ayudar a los tratamientos de los mismos.

Ella solía entrenar como para una competición de ranking, pues le encantaba llegar a los corazones de las personas, sin importar si ganaba prestigio o dinero, sabía que en esta vida hay cosas más valiosas que esto.

Las rutinas eran perfectas y maravillosas con alguno que otro truco elevado que en competición son ilegales debido a los accidentes que podrían ocurrir, era por eso que grandes mazas solían ir a ver qué es lo que haría en esta ocasión la atrevida y hermosa patinadora.

Era común ver su mochila, se encontraba nerviosa y emocionada tanto que olvido meter un par de cosas a su equipaje, dejo la mochila en cocina y Kaori miro a Ryo de inmediato, era inminente que ese pedazo de pervertido iba husmear entre las cosas de la joven patinadora.

Apenas Ryo movió un dedo y Kaori lo regaño de inmediato — ¡No te atrevas! ¡¡¡Ni si quiera lo pienses!!!— dijo Kaori en un tono amenazador.

—Vamos Kaori— Dijo Ryo en un tono relajado — No quieres saber lo que usan los patinadores y todo lo que preparan, sería algo súper educativo— el tono pícaro de Ryo se notaba en cada palabra.

—Hump!... conociéndote dudo que busques algo "educativo", más bien lo que tu buscas es algo como sus bragas, o algo parecido— Kaori se cruzó de brazos fulminándolo con la mirada.

Al ver esto Ryo se abalanzo con un gran salto hacia la mochila y a su vez Kaori la tomaron de un extremo, cada quien forcejeaban y se pedían soltarla pero nadie lo haría, incluso cuando escucharon que la mochila se estaba rompiendo, atónita Keiko miro la escena quería gritar que pararan, quería llorar pero un nudo en la garganta se lo impedía, la mochila no era el problema si no su amuleto de la suerte, pero su timidez no le permitió decir nada, en un instante todo se quebró las cosas de Keiko salieron volando al partirse la mochila en dos, ella corrió y atrapo un pequeño peluche en forma de perro.

Y fue ahí donde Ryo y Kaori, quienes habían caído hacia lados opuestos sentados amortiguados por su retaguardia se quedaron atónitos, Keiko reviso el peluche y después al ver que estaba bien lo abrazo y lloro felizmente. 

Después sintió un poco de vergüenza pues recordó que Kaori y Ryo estaban ahí; Ryo se acercó a ella ya que él había causado el alboroto, y con un pañuelo limpio las lágrimas de la joven patinadora.

—Lo siento, esta no era mi intención señorita Keiko— El arrepentimiento en el rostro de Ryo era real.

—No te preocupes, es solo que este es mi amuleto de la suerte, es algo muy especial y preciado para mí— Keiko se animó un poco.

—Verán su nombre es Idefix el perrito de Obélix, mi abuela me lo regalo de pequeña me fascinaba, mi abuela y yo solíamos ver las películas juntas y leíamos los cómics, era difícil que me separara de él, cada vez que lo hacía, algo malo sucedía, lo sé ahora que soy grande he madurado y me he dado cuenta que eso estaba solo en mi mente, se volvió aún más especial cuando mi abuela me abandono, cuando lo llevo conmigo suelo ganar pero cuando lo olvido y no lo veo antes de salir a la pista algo siempre falla, lo considero mi amuleto de la suerte y el más vivo recuerdo de mi abuela— Keiko miro con ternura el peluche y lo acaricio dulcemente.

Ryo puso una mano sobre su hombro, la miro con ternura —Sé que es muy valioso para ti, ¿pero porque ocultarlo?, quiero enmendar mi error, que te parece si de hoy en adelante él se sentara justo a mi lado, en las competiciones para que lo puedas ver cada vez que quieras— él se mostraba determinado y sin ninguna clase de vergüenza.

Keiko emocionada se aventó hacia a él abrazándolo con mucho cariño y fuerza —¿realmente lo harías por mí?— dijo Keiko.

Para Ryo era la primera vez que ella le había pedido algo tan efusivamente, se notaba que era feliz y en verdad lo deseaba —por supuesto.

Kaori se sintió aliviada de ver que Ryo enmendó su error y por unos instantes porque no admitirlo, verlo incluso más guapo.

Ese día Ryo cumplió su promesa, Keiko pudo ver su pequeño Idefix desde la pista de patinaje, y por unos instantes ver en sus ojos la sonrisa de su abuela, más que motivada ese día Keiko dedico su actuación a su abuela, la cual fue majestuosa en todo su esplendor.

Ese día Ryo cumplió su promesa, Keiko pudo ver su pequeño Idefix desde la pista de patinaje, y por unos instantes ver en sus ojos la sonrisa de su abuela, más que motivada ese día Keiko dedico su actuación a su abuela, la cual fue majestuosa en to...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Dibujo: Candynecroft

Historia: Trishiana

City Hunter X Witchblade [En proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora