Capitulo 21

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Narra Toni Topaz:

Abrí mis ojos los cuales cerré rápido, olvide cerrar las cortinas por lo cual la luz entraba al cuarto, fregué un poco mis ojos y los abrí parpadeando varias veces hasta acostumbrarme a la luz que entraba, que no era para nada comparada con la luz que tenia dormida sobre mi pecho. Si había algo que me gustaba de Cheryl era verla dormida, con toda su paz, su nariz y frente arrugada de vez en cuando, su boca entre abierta. Pequeños detalles de ella que me dan mucha ternura.

Sin embargo esa ternura desapareció al recordar lo de anoche, había sido totalmente un animal, en especial por dejar a Cheryl así, me sentía pésimo. No entiendo como es que esto así le pueda gustar, para mi suerte jamás tendría que volver a hacerlo. Comencé a acariciar el pelo de Cheryl y fue entonces cuando levanto su cabeza, ya estaba despierta, sonrió al verme.

- Buenos días corazón de mi vida. - Ayer dijo que le gusta que la llame de maneras tiernas y eso es lo que voy a hacer, esto si me gusta.

- Buenos días amor. - Subió su cabeza para dejar un beso en mi mejilla y luego esconder su cabeza en mi cuello. - ¿Cómo estas? 

- Bien, ¿Y tu? ¿Cómo te sientes? - Pregunte rápido.

- Con frio porque no me estas abrazando. - La verdad tenia miedo de abrazarla, tenia marcas en todas partes.

Tenia marcas en su abdomen, sus pechos, espalda, brazos, piernas y cuello, de verdad me sentía terrible con lo que hice. Decidí abrazar despacio a Cheryl a pesar de que me dijo que la abrazara bien no podía, tenia miedo de hacerle algo mas y que se pueda romper.

- Toni. - Se movió bruscamente haciendo que mueva mis brazos rápidamente para soltarla, levanto su cabeza y me miro. - Te dije que me abraces bien, normal, como lo hiciste siempre. - Sonaba molesta, tal vez no le gusta tener las marcas que le deje.

- Lo siento. - Trate de abrazarla lo mas normal posible. - ¿No te duele nada? 

- Solo me tiembla un poco la pierna derecha, lo que significa que hiciste bien tu trabajo. - Levanto su cabeza y beso mis labios.

- ¿Toni? - Escuche la voz de Clifford del otro lado de la puerta por lo cual aleje a Cheryl.

- Te haces la dormida. - Le dije cuando me miro confundida. 

- Bien, aunque mi padre no va a matarte. - Dijo bajo para acostarse un poco lejos mío y taparse bien con las sabanas.

- Voy a entrar. - Dijo Clifford.

- Si pasa. - Dije un poco bajo y lo vi entrar por la puerta. - No quiero despertarla. - Dije aun acostado bien tapado con las sabanas, no podía verme desnudo junto con su hija.

- Oh esta bien, ¿Puedes levantarte? Quiero hablar a solas contigo. - Cheryl se volteo en la cama y me abrazo haciéndose la dormida.

- Eh, ¿En otro momento? - Dije nervioso.

- Ahora Topaz, te espero abajo. - Dijo saliendo del cuarto. 

- Mierda, ¿Qué voy a hacer? ¿Y si nos escucho anoche? Gemiste y gritaste Cheryl, debería haberte dejado la mordaza puesta. - Cheryl levanto una ceja. - Oh mejor callarte con un beso.

- Tranquilo, estoy segura que te dirá otra cosa, ve a cambiarte y luego me cuentas. - Dejo un beso en mi nariz.

- Gracias por salvarme con este pequeño abrazo. - Rei.

- Yo lo quería y tu lo necesitabas. - Sentí su mano bajar por mi abdomen hasta mi bóxer.

- ¿No te cansas verdad? - Dije quitando su mano.

Estudiante de intercambioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora