Estudiante de intercambio

Capitulo 41

Desperté y me estire en la cama, el lado de Toni estaba frio y fue cuando note que el no estaba, suspire y me levante, estaba por abrir la puerta del cuarto cuando escucho la puerta del hotel donde estábamos, enseguida se escucharon las voces de los niños y la puerta cerrarse. Volví a la cama cerrando los ojos esperando por Toni, segundos después escuche la puerta del cuarto abrirse y cerrarse.

- Amor. - Esa era la voz de Toni. - Buenos días, despierta dormilona. - Abrí los ojos e hice un puchero.

- Quiero mi beso de buenos días. - Toni rio y se acerco a donde estaba, me senté en la cama y el en el borde, beso mis labios y ambos sonreímos.

- Buenos días mi bella durmiente. - Toni puso su mano sobre mi pierna que aun estaba tapada. - Lleve a los niños a desayunar y te traje un café.

- Que rico. - Me relamí los labios.

- Si, así que vístete rápido así te lo tomas en el viaje. - Se levanto y me estiro sus manos para ayudar a levantarme.

- ¿A donde vamos? - Pregunte.

- Tengo cosas que hacer, pero te llevare a ti y a los niños con mi madre. - Fruncí el ceño.

- ¿No puedo ir contigo? - Pregunte abrazando su cintura, el corrió lis cabellos de mi cara y beso mi nariz.

- Son cosas aburridas de negocios, no creo que quieras. - Hablo el.

- Si quiero, quiero pasar tiempo contigo y tal vez podríamos hacer algo en tu oficina. - Sonreí maliciosa llevando mis manos al borde del pantalón de Toni.

- ¿No quieres ver a tu prima mejor? Créeme que será mas divertido, además no se si los demás quieran que vayas. Lo que quise decir fue que tal vez no puedas ir ya que no trabajas en esta oficina de aquí, tu trabajas en la que esta en casa. - Se encogió de hombros y luego alejo mis manos. - Vístete y dime lo que quieres hacer. - Beso mi frente y salió del cuarto.

Me puse un jean blanco y una remera de como volver al futuro, unas zapatillas negras converse, me higienice y luego salí del cuarto, Miles corrió y me abrazo en cuando me agache, bese su mejilla y le sonreí.

- Buenos días Miles. - El sonrió y apoyo sus manos en mis mejillas.

- No sabes todo lo que puede hacer Toni, hoy me llevo en sus hombros y luego me lanzo en el aire y me atrapo. - Miles conto con toda su alegría mientras sonreía. - Luego nos llevo a desayunar y mira me ayudo a vestirme. - Miles tenia un jean azul con una remera amarilla de nirvana y sus vans negras.

- Estas hermoso mi vida. - Acaricie su cabello. - ¿Te gusto pasar la mañana con Toni? - Pregunte y el asintió.

- Si, dijo que mañana tu iras a desayunar con nosotros. - Miles volvió a abrazarme por el cuello, escondí mi cabeza en el suyo llenando mis fosas nasales de su rico perfume a niño.

Me separe de Miles y salude a Benja y Sara con un beso en la mejilla a cada uno, Toni estiro mi café en su mano hacia mi, me acerque a tomarlo pero rápido tomo mi mano pegándome a el y unió nuestros labios.

- Su café princesa. - Me dio mi café con una sonrisa en sus labios.

- Gracias. - Sonreí y tome un sorbo de mi café que aun seguía caliente. Estaba por decir algo pero Toni me interrumpió.

- ¿Nos vamos? - Pregunto y los niños tomaron sus pequeñas mochilas corriendo a la puerta, Sara camino a paso tranquilo y Toni estiro su mano para tomar la mía, la tome y caminamos hasta la puerta donde también tome la mano de Miles.

Subimos a el auto que Toni había rentado, era muy cómodo por suerte. En el camino Miles y Benja venían jugando cada uno con sus muñecos, Sara igual que siempre con sus audífonos, Toni no decía nada, solo estaba concentrado en conducir. Por otra parte estaba yo aburrida, queriendo saber que iba a hacer Toni pero sabia su respuesta, "Cosas de la empresa" y no quería molestarlo mas con eso, mi mirada se dirigió a su pantalón, a esa parte que tanto estaba necesitando ahora. Esperando que un día Toni sea quien arranque mi ropa me lleve a la cama y me de duro, generándome el placer que necesitaba, escuchar sus gemidos roncos.