S. CHANGBIN si había mejorado mi relación con Jisung, al menos ya no me gritaba cada que me veía o me golpea, pero aun así no era lo mismo, de ninguna manera era lo mismo, solo que lo atrapé varias veces mordiéndose el labio y viéndome el trasero cuando fuimos con los niños al parque y me agachaba un poco a empujarlos en sus triciclos.
aun así, tuve un montón de ideas para salvar nuestro matrimonio, lo invité a salir a un restaurante, pero no conseguimos niñera y ahí estábamos, en ropa elegante dándole de comer a nuestros hijos en la boca mientras ellos se divierten de lo lindo, luego al mirador del edificio más alta de Corea, dejamos con SeungMin y Jeongin a los niños, pero a los idiotas se les ocurrió llevarlos al mismo lugar que nosotros sin saber que estamos ahí.1así que tuve una mejor idea.
— Manse, hijo, deja de moverte — vestir a mis hijos lo mejor posible y hasta los peine, cosa que siempre es imposible, además de que no dejaban de moverse como si la ropa les picara — MinGuk, sácate el dedo de la nariz, Daehan, cariño, deja de quitarte el moño.
había hecho una reservación en el primer lugar donde invité a Jisung, en la torre más alta de Corea, en el mirador, pero esta vez solo iba con mis hijos.
— ¿vamos a cenar? — MinGuk miraba las fotos del menú con la lengua pasando por sus labios — porque yo quiero una orden de papas y está cosa — señalo con su dedo y sus hermanos miraron también sus menús.
— yo quiero pastel — Manse me puso en la cara su menú para que lo viera.
— no, nadie va a cenar nada hasta que tengamos todo listo para papá — saqué mi cámara profesional de una pequeña valija debajo de la mesa y los niños sonrieron al verla — saben que papá y yo hemos tenido problemas.
— sí, lo sabemos, papá Ji tapo tu cara de todo su álbum de bodas con fotos del actor que le gusta — apreté los labios, ya me imaginaba la cara de Mew Suppasit y de ese tal Mean phiravich en mis fotos de boda.
— ¿qué más hizo?
— pues ¿qué más hizo?... también con un cuchillo se puso a cortar toda la ropa que no te llevaste.
— ¡no es cierto, Manse! — dijo DaeHan — las cortó con un hacha.
— bueno ya, ya — negué con ambas manos frente a ellos — yo quiero regresar a casa, con ustedes, con papá, así que deben ayudarme
— ¿le vas a mandar un gigante ramo de flores como el de la otra vez? ¿sabes que se lo dio al tío Fefi?
— ¡¿que?! ya como sea, mi idea es otra, hijos — señale la cámara — vamos a grabar algo para papá — encendí la cámara. enfocando solo a DaeHan, la vista era perfecta, el paisaje de atardecer detrás suyo era hermoso y ellos se veían adorables — ok hijo, escúchame, tienes que decir, "cariño, gracias por casarte conmigo"
— cariño...Man Se está comiendo algo...
eso iba a ser imposible. los niños no dejaban de moverse y reírse de cualquier cosa que les decía como regaño.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
