POV Kara
Kara: No puedes solo irte, por favor quédate, quédate a mi lado. -Estabamos en el centro de la sala, ella tenía sus maletas a lado.-
Lena: Tengo que hacerlo, sabes que no hay opción, te amo pero no es suficiente aunque lo intente esto no puede continuar
Kara: Lena vámonos; solo tú y yo, donde nadie pueda encontrarnos, esto no puede terminar así
Lena: No puedo hacerlo, sabes que mis padres nos encontrarán. Todo está arreglado para la boda no puedo irme solo así. - Ella camino a la puerta yo solo pude tomar su mano.-
Kara: Entonces no te vayas... solo quédate esta noche, quédate a mi lado.
Lena volvió a mí, beso mis labios yo me aferre a ella en cada beso, en cada caricia. La tomé de su cadera llevándola aquella habitación que habia sido testigo del amor que nos prometimos hace tiempo.
Retiré cada prenda de su cuerpo hasta dejarla completamente desnuda, ella desabrocho cada botón de mi camisa para retirarla haciendo lo mismo con mis jeans, nuestros labios seguían unidos mientras mis dedos recorrían cada parte de su ser.
Kara: Quedate, eligeme no te vayas. -Pedi con dolor, pero ella no respondió, de sus labios no salió palabra, solo continuó besandome-
Mi lengua recorrió su cuello, subi a su lóbulo lo tomé con delicadeza entre mis dientes, sentí el cuerpo de Lena estrenecer mientras sus manos recorrían mi espalda, recorri cada uno de sus senos con mi lengua succionado con delicadeza, baje poco a poco dejando besos en su abdomen. Esta seria nuestra última noche yo no tenía prisa por que ella se fuera, baje a su centro lo recorrí pude notar su humedad, sus gemidos aumentaban con cada roce de mi lengua ella tomó mi cabellera rubia generando aún más presión, la penetre con dos dedos sintiendo la presión de su vagina su fluido empezó a recorrer mi mano, el ritmo de mi lengua y de aquellos dedos aumentaban su cuerpo demostraba la necesidad que tenía por sentirse mía, seguí hasta que Lena llego al climax.
Saboree aquel fluido que permanecía en su vulva, sin dudarlo me puse a su par nos besamos quise que ella se deleitará conmigo de ese su manjar.
Nuestros centros se unieron sentí su clitoris rozando con el mío, quise grabar cada centímetro de su rostro, quise grabar cada gemido que salía de su boca y así fue, todo quedo impreso en mi mente nuestras miradas estaban fijas no podría olvidar ese color esmeralda, nos fundimos en cada movimiento estábamos apunto de llegar al orgasmo cuando...
Desperte, después de años seguía teniendo aquel sueño aunque más bien era un recuerdo. Esa fue nuestra última noche, al despertar ella... ella ya no estaba, su elección fue bastante clara.
****
Me levanté de aquella cama, la cual ya no tenía ningún recuerdo de ella. Fui directo a la ducha aún tenía el tiempo necesario para llegar al trabajo, el agua caliente cayó sobre mi nuca recorriendo todo mi cuerpo, los minutos pasaron y yo aún la recordaba.
Años atrás...
Voy entrando a casa viernes por la mañana después de la entrevista con Cat Grant.
