𝖠𝗆𝖺𝗋 𝖠 𝖫𝖺 𝖮𝗌𝖼𝗎𝗋𝗂𝖽𝖺𝖽 / [𝙏𝙤𝙢 𝙍𝙞𝙙𝙙𝙡𝙚 𝙁𝙖𝙣𝙛𝙞𝙘]

•Capítulo 4•

Luego de ver a Astrid con André me sentí absolutamente engañado, ¿¡cómo se atrevía a escoger a una sangre sucia y no a mí!? todas piden, mueren, desean y sueñan con estar a mi lado, mueren por eso. No entra en mi cabeza, no es posible que ella, Astrid Chevalier no me ame, tu maldita estúpida tenías que ser solo mía, pero claro, no me lo dejaras fácil como pude suponer. Solo me quedará ver cómo ese infeliz te folla y luego son novios, como una puta pareja feliz de cuentos muggles. Pero no te preocupes, tengo mi as bajo la manga, no te lo dejaré tan fácil Hidleston... Pase, lo que pase, yo y Astrid estaremos juntos, cueste lo que cueste. Incluso si ello me toma días, semanas, meses, años o décadas, serás mía.

[...]

-Mi señor, ¿por qué nos llamó?- preguntó Avery

-Porque nos pondremos manos a la obra, Avery tú y Lestrange se encargarán de conseguir más y más seguidores, pronto seremos invencibles, yo haré más horrocruxes y así nadie me detendrá- reí mientras mis seguidores aplaudían, extrañaba esto

Prepárate mundo mágico porque yo seré el nuevo rey, y todos serán mis seguidores, sin asquerosas sangre sucias por supuesto, y tú André Hidleston morirás también, serás uno de los primeros en ejecutar

-Mulciber, Nott, ustedes deberán de alejar a los profesores de esto, ya saben, la distracción, que nadie de ellos se entere de esto- asentí con la cabeza buscando más opciones para Malfoy

-Malfoy tú... Te harás amigo de André, y yo de Astrid, sabremos las debilidades de cada uno de ellos y cuando menos se lo esperen estarán muertos- dije con risa macabra

-si mi señor, pero, que yo sepa Astrid es sangre pura, ¿no sería inútil matarla?-levantó una ceja

Eso sí lo sabia inútil.

-Malfoy me refiero a que André es quien morirá, Astrid no. Ella es completamente mía, y eso quiero que lo sepan, metan eso sus pequeñas cabezas, es mía, nadie le hará nada si yo no lo permito- golpeé la mesa haciendo que prácticamente todos se llevarán la mano al pecho

-Si mi señor, me quedó más que claro-

- Y una última cosa, no quiero que nadie los vuelva a encontrar fuera de la sala común, y mucho menos en nuestro lugar de encuentro, no volveré a soltar a mi pequeña serpiente por ustedes- dije levantandome

-Ahora salgan de aquí con suma cautela, no quiero perder la poca paciencia que me queda, inútiles- me asegure de que todos escucharán cada una de mis palabras, pues suele pasar que los imbéciles no entienden mis órdenes

Salí a paso apresurado, nadie nos tenía que ver, porque ahora nuestro plan saldría a flote, estamos en nuestro penúltimo año y haré cuantos horrocruxes se me den la gana, gracias Slughorn, fuiste de ayuda, gracias por decirme cuántos podía hacer...

En momento comencé a reír, no demasiado, pero me crucé con quién menos quería en estos momentos.

-Tom, puedo hablar contigo- me miró

-No, tengo que ir a dormir- dije caminando más rápido

-Tom porfavor, oye ¿Puedes escucharme? ¡detente eres mucho más rápido!... ¡Thomas solo quiero hablar!- gritó desesperada mientras intentaba alcanzarme, no se lo dejé fácil ya que camino mucho más rápido que ella. Y eso me gustaba

Y es que tampoco pienso hacerlo, nunca se lo dejaría tan fácil, si me quieres deja a esa sangre sucia y ven conmigo...

-Tom porfavor, escúchame...- tomó mi mano cuando por fin detuve mis acelerados pasos

-Joder escúchame quieres- entrelazó su mano con la mía

-¡Porqué mejor no te vas a entrelazar tus manos con el sucio de André!- musite enojado