Capitulo 1- Un nuevo día. Parte 1

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Mangel Pov's:

La verdad es que no se muy bien como reaccionar ante la situación en la que estoy ahora mismo frente al espejo de mi habitación.

Cheeto tenia razón, tubo toda la puta razón en todas las jodidas vacaciones de navidad, el me previno de esto y yo lo mande directito a la mierda. Me cago en toh.

-Eh engordao...-

Es que estas cosas me pasan a mi. Yo flipo.

Notaba como el uniforme caca de la preparatoria ahora me quedaba un poco ajustado, y es que en si era caca pura, enserio joder macho.

Era un conjunto que integraba un saco azul marino, corbata del mismo color, camiza gris y pantalones y zapatos negros.

Antes me quedaba mejor y me gustaba como me veía, pero ahora... Es que, jodeh me veía OBESISIMO frente al espejo.

Hice sonidos de sollozos aunque no estuviera llorando, mire al espejo y suspire de la manera mas honda que mis pulmones permitían, seguidamente me senté en la cama mirando la mochila de la escuela ya preparada, no falta mucho para que Cheeto pegue su grito espartano indicándome que ya fuera a desayunar.

-Cabrón! Que ehpera' para bajah!? Que no te hago el desayuno pa'que lo deje ahí de adorno!-

"Nuevo Récord" pensé dibujando una sonrisa en mis labios levantandome de la cama y saliendo del cuarto a ver que me hizo ese barbudo.

-Haber que me hizo mi Cheetito de desayunar~?- pregunte de manera melosa, lo suficientemente alto como para que mi bagabundo lo escuchara. Mientras tanto, bajaba las escaleras en dirección a la cocina

-Calle y coma, que no es muy temprano para oír sus bromas- dijo finjiendo molestia, yo Sonreí y me hacer que a el para plantarle un beso en la mejilla.

-Buenos días...- susurré coqueto en su oído, Abraham me miro con las cejas fruncidas, estábamos muy serca el uno del otro, y la verdad es que a ninguno le incomodaba esto. Cheeto me beso rápido en los labios y continuo sirviendo el desayuno.

-Buenos días Miguel- dijo sin siquiera un sonrojo o alguna exprecion. Eso me alegro.

En si nuestra relacion siempre ha sido así desde que éramos niños, los hermanos no suelen hacer este tipo de cosas tan homosexuales, pero nosotros somos diferentes.

Hace unos meses nuestra madre murió, causandonos una depresión que parecía nunca terminar, pero poco a poco se logro re-establecer esa tranquilidad que antes teníamos.

Para nuestra sorpresa, mamá nos dejo una casa y los ahorros de su vida, diciendo que usaramos ese dinero para nuestra carrera deseada. Ahora nosotros tenemos que valernos por nosotros mismos para seguir adelante;

Cheeto trabaja de mesero en un restaurante en el cual le regalan comida para que la comamos aquí, en pocas palabras; Nuestra cena de cada día.

Y yo soy un ayudante de guardería, algo como un niñero pero mas divertido y menos pesado.  Ambos con el dinero que juntamos se guarda en un bote, donde si alguno de los dos agarra aunque sea un euro, se queda sin cena por una semana...

Hasta ahora ha funcionado.

-Jaja...- me reí un poco bajito pero Cheeto me miro como si yo fuera un loco.

-Y ahora de que te rieh?- pregunto sirviendo un par de hot cakes en mi plato junto con un baso de leche. Le regale una sonrisa sincera.

-De na'... Solo que me alegro de que tu seah mi hermano- le dije mientras le miraba a los ojos, el entonces sonrió y se sentó alado de mi en la mesa.

-Yo pienso igua'- y seguidamente nos dispusimos a desayunar.

.:Un Rato Después:.

-Cheeto-

-Dime-

-...Se nota mucho que engorde?-

Mi hermano detuvo el auto de golpe mirándome con los ojos bien abiertos.

-Por que esa pregunta tan de repente Mahe?- dijo a punto de soltar la carcajada. Yo lo mire preocupado.

-Eh que... Hoy que me vi en el ehpejo note que el uniforme me quedaba mas apretado y...- me quede callado al oír la escandalosa risa de Cheeto, el cual trataba de contener las lágrimas, puto Abraham.

-Calla Abraham que ehto eh serio, jode'- dije fastidiado cruzandome de brazos, entonces el barbudo dejo de reírse y me miro serio.

-Me vuelveh a llamar Abraham, y juro que no te vuelvo a haceh el desayuno en mi via' eh Cabron- dijo algo cabreado, yo reí en mis adentros por que sabia que esa sera su reacción.

-Vale, vale hombre, no lo vuelvo a decih, pero ya fuera de coña, se nota mucho que eh engordao'?- Cheeto entonces me miro mi rostro y mi cuerpo. Analizándolos.

-Hmmm... Pueh vera Mahe, se nota un poco- dijo ahora mirándome.

-Pero no tanto, o si?- dije alarmado, entonces mi vagabundo río denuevo, pero ahora fue por mi reacción, exhaló y negó con la cabeza. Yo suspire, aliviado.

-Vale, graciah. Ahora si podemoh irno'- dije mirando hacia enfrente, entonces Cheeto arranco de nuevo el auto.

Can I Belive You...? {Rubelangel}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora