Alessa, Alex y Axel; trillizos. Hijos de un conocido investigador de homicidios: Michael Morgan y una de la mejores abogadas de New York: Amelia Smith.
Los trillizos Morgan crecieron en un ambiente lleno de cariño, alegría y amor. Pero como suelen...
Ya llegamos?-pregunte algo ansiosa. Habíamos pasado todo el transcurso del camino entre charlas y risas. No seas ansiosa-dijo riendo. Hace 15 minutos que salimos de mi casa-hable haciendo un puchero. Ya llegamos-dijo cuando frenó el Jeep.
Bajo y dio la vuelta al vehículo para abrirme la puerta, me ayudó con el cinturón y bajé. Tomo una canasta, tomo mi mano y comenzamos a caminar. Luego de unos 5 minutos llegamos a una parte del bosque que estaba decorada con luces, una manta en el suelo y velas alrededor. Era muy hermoso.
Te gusta?-pregunto rascandose la nuca nervioso. Que si me gusta? Me fascina, es muy hermoso Emmett-dije para voltear a verlo, el me sonreía. Rosalie y Alice me ayudaron a decorar-dijo caminando hacia la manta conmigo. Acomodo las cosas y nos sentamos- Esme preparo comida para ti-dijo sacando unos sándwiches, jugo y postres. Realmente amo la comida de Esme-dije mientras tomaba un aperitivo. Y a ella le encanta cocinarte-dijo riendo.
Comencé a comer mientras Emmett me miraba, hablamos cosas triviales, y nuestra vida en sí.
Le agradaste a papá- dije sonriendo. Si? No parecía-dijo riendo bajo. Te dio la charla?- pregunté divertida. No te diré de qué hablamos, pero no es lo que estás pensando-dijo sonriente. Rei por lo que dijo.
Seguimos charlando y riendo. Cuando termine de comer guardamos y limpiamos todo para acostarnos sobre la manta. Recosté mi cabeza en su pecho mientras el me abrazaba con un brazo y el otro lo puso bajo su cabeza.
Ale...-llamo mi atención. Si?-pregunte. Hay algo que te quiero dah-dijo mirándome. Ah sí? Y que es?-pregunte pícara. No es lo que piensas-dijo divertido. Saco una cajita de tercio pelo negro de su bolsillo. Me pedirás matrimonio?-pregunte asombrada. No-rio ligeramente, abrió la caja y pude ver un hermoso anillo que tenía el signo del infinito y dos piedras en el centro.
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No sabes por cuánto tiempo te esperé... que el día en el que te vi en la cafetería supe que serías mi perdición pero también mi salvación, por eso... bajo la luz de la luna... prometo estar contigo...-deslizo el anillo por mi dedo, yo tenia mis ojos llenos de lagrimas-siempre Alessa Morgan. Siempre-susurre mientras me lanzaba a sus brazos y le daba un beso.