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Como casi todos los días salia de mi instituto camino a casa, amaba caminar viendo el atardecer pero no solo este.
Me habia enamorado de un súper héroe así que siempre que pasaba por mi recorrido el hacia patrulla, yo aprovechaba para simplemente observar su belleza.
Y hoy no era la excepción, el caminaba con su capucha tapando casi toda si cara nuestra distancia era de cinco personas.
Yo no iba a una escuela de Héroes solo iba a una normal ademas mi Kosei no era muy heroico.
Solo podia hacer ilusiones por no mas de cinco minutos.
— ¡Oye ten cuidado.!— Sin querer había chocado con una señora, todos en el lugar me miraron incluyéndolo a el.
Susurré un pequeño perdón tratando de irme.
— ¿Eres un Héroe? Has algo, me empujo.— La señora tomo el brazo del héroe poniéndolo frente a mi.
— Señora ya le dije que lo sentía, no lo hice con malas intenciones.— Y así no era como quería tener un primer encuentro con aquel héroe.
— S-Señora e-ella ya se disculpo.—
— ¡No es suficiente! ¿Acaso no sabe quien soy yo?.— La señora empujo al héroe contra mi.
— P-Perdoname.— Realmente me sentia mal por el, me di cuenta que la estaba pasando mal.
— Quiero dinero.— Le sonrei acercándome a ella, de mi bolsillo "saque dinero" aunque solo era una ilusión.
Se lo deje en la mano y empecé a caminar solo tenia cinco minutos para desaparecer de la vista de aquella amargada señora.
Lo único rápido que pude imaginar fue un fajo de billetes así que no me seguiría para renegar por mas.
Salí de aquélla calle llegando a un lindo barrio con casas blancas, la única casa de diferente color era la mía, mi madre la habia pintado de un color naranja.
Me acerque a la puerta de mi casa abriendo esta tirando mi maleta a cualquier lugar de la casa, cerré la puerta detras de mi sentándome en el cómodo sofá. Eran las dos de la tarde así que comería en media hora no tenia amigos para salir ni para hablar, además mi madre trabajaba casi todo el día.
Mis dias eran muy solitarios solo hacia tareas y en algunas ocasiones por muy triste que sonara hacia ilusiones de mis personajes favoritos de anime y solo hablaba con ellos.
Escuche el sonido de la puerta levantándome con pereza del sofá.
— ¿Quien es?.— Me asome por la ventana viendo a Suneater.
Pegue un pequeño chillido acomodando mi ropa junto a mi cabello, sentia el calor subir a mis mejillas mientras pensaba en cosas positivas.
Abrí la puerta viendo al Héroe frente a mi sonrojado.
